Walgreens, una de las cadenas de farmacias más grandes de Estados Unidos, anunció que cerrará 500 de sus tiendas en todo el país en 2025. Esta medida forma parte de un plan más amplio para reducir su presencia física en aproximadamente 1,200 ubicaciones en los próximos años. A pesar de haber superado las expectativas de Wall Street en el último trimestre fiscal, la empresa reconoció que alrededor de un cuarto de sus 8,700 tiendas en EE. UU. operan con pérdidas, lo que ha hecho inevitable una reestructuración agresiva.
LA PALABRA DEL CEO DE WALGREENS
El CEO de Walgreens, Tim Wentworth, explicó que esta decisión es necesaria para garantizar la sostenibilidad a largo plazo de la compañía. “Estamos seguros de que nuestros esfuerzos para reestructurarnos traerán beneficios financieros y para los consumidores a largo plazo”, declaró Wentworth. La estrategia de cierre se enfoca en optimizar la eficiencia operativa y mejorar la rentabilidad, en un contexto donde las tiendas físicas enfrentan desafíos económicos y una competencia feroz en el mercado.
Uno de los factores clave detrás de esta decisión es el cambio en el comportamiento del consumidor. La creciente preferencia por las compras en línea y la aparición de opciones más competitivas en el sector minorista redujeron el tráfico en las tiendas físicas. Además, Walgreens se ha enfrentado a una disminución en los reembolsos de recetas y un aumento en los costos operativos, agravado por el incremento en los robos en sus establecimientos.

La demanda que tuvo durante la pandemia de COVID-19 por las vacunaciones ha disminuido considerablemente (Foto: AFP)
La disminución de la demanda de servicios relacionados con la pandemia de COVID-19 también ha afectado los ingresos de la compañía. Durante la pandemia, Walgreens experimentó un aumento en la demanda de vacunas y pruebas, lo que impulsó temporalmente sus resultados financieros. Sin embargo, con la estabilización de la situación sanitaria, estos ingresos adicionales desaparecieron, dejando a la empresa en una posición más vulnerable.
El impacto de esta decisión se sentirá especialmente en los estados de Nueva York y Nueva Jersey, donde varias tiendas cerrarán en los próximos meses. En Nueva Jersey, las ubicaciones afectadas incluyen la tienda en 642 Newman Springs Rd en Lincroft, 901 Main St en Asbury Park y 37 Old Hwy 22 en Clinton.
Mientras tanto, en Nueva York, cerrarán las tiendas de 50 N Main St en Ellenville, 153 Main St en Owego, 792 W Main St en Rochester, 5651 Whiskey Hill Rd en Wolcott y 77 7th Ave en Nueva York.

Los cierres se darán debido a las dificultades económicas que enfrentan muchas tiendas en el país (Foto: AFP)
Esta reestructuración refleja una tendencia más amplia en el sector minorista, donde las empresas están replanteando sus modelos operativos para adaptarse a un mercado cada vez más digital. Walgreens no es la única cadena que ha reducido su presencia física en respuesta a la evolución del comportamiento del consumidor y los desafíos económicos. Empresas como CVS y Rite Aid también han implementado estrategias similares para mantenerse competitivos en el mercado.
Sin embargo, Walgreens no planea desaparecer de las calles estadounidenses. La compañía señaló que comenzará invirtiendo en tecnología y servicios digitales para mejorar la experiencia del cliente. Además, buscará reforzar su presencia en ubicaciones estratégicas y consolidar las operaciones en las tiendas más rentables.
