Checo Pérez sigue en el punto de mira. Aunque Red Bull anunció su renovación por dos años justo antes del GP de Canadá, el mexicano continúa vigilado en vista de su bajo rendimiento en lo que va de temporada. En el GP de España, el piloto energético arrastraba una sanción de tres posiciones en parrilla desde Montreal que, ya previo a que la acción comenzara en Barcelona, se sabía que condicionaría todo su fin de semana: clasificó octavo el pasado sábado, pero salió undécimo en carrera y quedarse atascado detrás de Nico Hülkenberg durante la primera parte de la cita fue lo que más le perjudicó.
“Creo que con la sanción que teníamos y viendo dónde empezamos, fue muy difícil adelantar en la primera tanda. Mi carrera se acabó ahí. Me quedé enganchado detrás de Nico y estaba deslizando mucho. Fue una pesadilla de carrera, muy difícil en general”, aseguró el mexicano el domingo por la tarde. Con una estrategia a tres paradas, que no era el plan inicial, el de Red Bull consiguió llegar hasta la octava posición, pasando a Gasly en la última vuelta y sumando cuatro puntos más. Mientras, su compañero de equipo volvió a ganar la carrera, lo cual, no deja en buena posición su actuación en Barcelona, por la que ha vuelto a ser señalado. Evidentemente, por Helmut Marko, que ya dijo antes de aterrizar en España que Pérez tenía “tres carreras para subir el listón”, citando también ese contrato con “ciertas cláusulas” ligadas al rendimiento que podrían ponerle fuera del equipo.
Ajeno a ese revuelo, Checo siguió analizando la carrera: “Al final, cambiamos a tres paradas y fuimos capaces de adelantar a Gasly para conseguir el octavo puesto. Fue muy duro y todo se comprometió por la primera tanda. Creo que entendimos muchas cosas que han pasado durante la carrera. El equilibrio no estaba con los blandos y eso parece estar relacionado con los problemas que tuvimos en clasificación. Creo que podemos volver más fuertes”. Lo que está claro es que el mexicano no se encuentra nada cómodo con su monoplaza, lo cual, condicionará este triplete que continúa con el GP de Austria esta semana y el GP de Gran Bretaña la próxima semana. “El problema que tengo es que no puedo encontrar el equilibrio en todas las tandas. Sufrí con el medio en las curvas lentas para encontrar estabilidad en la rotación. Es algo en lo que estamos trabajando muy duro con el equipo con cambios agresivos durante el fin de semana, los cuales no creo que funcionasen, así que los revisaremos”, analizaba Pérez en Montmeló.
