Última hora tras las elecciones en EE.UU., en vivo: transición presidencial de Donald Trump y más noticias

Los republicanos aseguraron la Casa Blanca y ganaron el control del Senado, pero el control unificado para el Partido Republicano sigue siendo una incógnita mientras los votos en las carreras de la Cámara de Representantes continúan siendo contados.

CNN aún no proyecta un ganador en 14 carreras de la Cámara. Hasta la mañana de este martes, se estima que quedan por contar 790.000 votos, principalmente en California. Los estados restantes incluyen Alaska, Arizona, Iowa, Maine, Ohio y Oregon.

Los republicanos están a tres escaños de retener la mayoría, mientras que los demócratas están a 12 escaños de hacerse con la Cámara.

El representante Andy Kim, el nuevo senador electo demócrata de Nueva Jersey, dijo a CNN que los demócratas no respondieron a la ansiedad de los votantes que están preocupados por la ineficacia del gobierno.

Kim dijo que, al hablar con los votantes, vio “cuánto la gente se sentía realmente inquieta sobre sus vidas. Sabes, lo describen como esta profunda ansiedad”.

También destacó la desconfianza en el gobierno como un problema clave para los demócratas.

“Creo que eran más profundas, solo desconfianza y muchos problemas que la gente enfrenta en este momento que simplemente no sienten que el gobierno esté abordando de ninguna manera significativa. Así que va a ser un gran esfuerzo tratar de recuperar algo de esa confianza”, dijo.

Señaló que, aunque la titularidad en los cargos jugó en contra de los demócratas, “hay algo más profundo, no solo sobre estos últimos cuatro años en particular, sino en general, en términos de cómo el Partido Demócrata está participando, y creo que eso es algo que necesitamos resolver”.

La vicepresidenta de EE.UU., Kamala Harris, tuvo una carrera mucho más reñida en Nueva Jersey de lo que se esperaba, aunque aún ganó el estado.

Los abogados de Donald Trump y la oficina del fiscal de distrito de Manhattan acordaron retrasar la actividad en el caso de pagos por silencio hasta el 19 de noviembre para darle tiempo a los abogados del presidente electo de presentar nuevos argumentos sobre cómo su victoria electoral impacta el caso.

Se esperaba que el juez Juan Merchan dictaminara este martes sobre si revocar la condena por fraude empresarial basada en el fallo de la Corte Suprema de este verano sobre la inmunidad presidencial.

El juez concedió la moción para que la oficina del fiscal del distrito presente sus opiniones sobre los pasos apropiados a seguir antes de las 10 a.m. del 19 de noviembre.

“El pueblo está de acuerdo en que estas son circunstancias sin precedentes y los argumentos planteados por el abogado defensor en la correspondencia al pueblo el viernes requieren una consideración cuidadosa para asegurar que cualquier paso adicional en este procedimiento equilibre adecuadamente los intereses en competencia de (1) un veredicto de culpabilidad del jurado tras un juicio que tiene la presunción de regularidad; y (2) la Oficina del Presidente”, escribió el fiscal Matthew Colangelo al juez.

El abogado de Trump, Emil Bove, argumentó que los cargos deberían ser desestimados.

“La suspensión y la desestimación son necesarias para evitar impedimentos inconstitucionales a la capacidad del presidente Trump para gobernar”, escribió Bove.

Más sobre el caso: Trump fue acusado por primera vez en marzo de 2023 por el fiscal del distrito de Manhattan por cargos estatales relacionados con un pago de dinero por silencio a una estrella de cine para adultos en 2016. El 30 de mayo, fue declarado culpable de los 34 cargos de falsificación de registros comerciales en primer grado por 12 jurados. Trump se declaró inocente.

Merchan anunció el 6 de septiembre que sentenciaría a Trump el 26 de noviembre, si fuera necesario, diciendo que parte de su razón para el retraso era evitar la apariencia de que la sentencia estaba destinada a influir en las elecciones de noviembre.

El abogado conservador Mark Paoletta, de quien CNN informó que ha sido propuesto al presidente electo Donald Trump como posible secretario de Justicia, dijo este martes en Fox News que los empleados federales que no apoyen la agenda de Trump deberían dejar el gobierno.

“Deportar a millones de inmigrantes indocumentados de este país, asegurar la frontera, prohibir DEI, todas esas cosas destructivas que el gobierno de Biden dejó correr desenfrenadas, sacar a los chicos de los deportes de chicas, esas son todas las cosas en las que el Departamento de Justicia va a trabajar y esas son las cosas que los empleados del Departamento de Justicia, los empleados actuales, van a apoyar. Y si no quieren apoyarlo, deberían irse”, dijo Paoletta en “Fox and Friends”.

Sus palabras reflejan declaraciones anteriores en una publicación en X el lunes.

“Esos empleados que participan en la llamada ‘resistencia’ contra la agenda legal del presidente debidamente elegido estarían subvirtiendo la democracia estadounidense”, escribió Paoletta.

Hablando con Fox, Paoletta también opinó sobre el próximo fallo del juez de Nueva York Juan Merchan, quien supervisó el juicio de pagos por silencio contra Trump y decidirá este martes si concede la moción del presidente electo para desestimar su condena en el caso. Trump está citando la decisión de la Corte Suprema de EE.UU. sobre la inmunidad presidencial que limita qué evidencia puede presentarse ante un jurado.

“Creo que él (Merchan) debería desestimarlo hoy, sí, la Corte Suprema tuvo que intervenir y tomar una decisión que todos los estadounidenses, todas las personas legales entendieron que el presidente es inmune. El presidente no hizo nada malo, la izquierda inventó estos crímenes, y así que con suerte se resuelve hoy”, dijo Paoletta.

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, viaja a Bruselas este martes mientras los posibles movimientos del presidente electo de EE.UU., Donald Trump, sobre el apoyo a Ucrania, la OTAN y los aranceles plantean serias preguntas y preocupaciones entre los funcionarios europeos.

El viaje se produce una semana después de las elecciones presidenciales de EE.UU. y mientras los líderes europeos se preparan para otros cuatro años de Trump. A raíz de las elecciones en EE.UU., líderes europeos como Emmanuel Macron de Francia prometieron “una Europa más unida, más fuerte y más soberana”, incluso cuando gobiernos como el de Olaf Scholz en Alemania están al borde del colapso.

“Ha habido un despertar estratégico que debemos abrazar como europeos. No podemos confiar nuestra seguridad a los estadounidenses para siempre”, dijo Macron el jueves.

Trump y su compañero de fórmula, J. D. Vance, han expresado serias dudas sobre el compromiso continuo de EE.UU. con Kyiv mientras la guerra se prolonga más de dos años y medio después de que las fuerzas rusas lanzaran una invasión a gran escala. Además, Trump ha hecho comentarios que sugieren que EE.UU. podría presionar a Ucrania para aceptar una tregua incómoda con Rusia. Durante su campaña, Trump también indicó que solo adheriría al compromiso de defensa mutua de la OTAN para los países que estén contribuyendo lo suficiente de sus presupuestos anuales a la defensa.

Durante la campaña, Trump dijo que “uno de los presidentes de un gran país” en un momento le preguntó si EE.UU. seguiría defendiendo al país si fueran invadidos por Rusia, incluso si “no pagan”.

“No, no te protegería”, recordó Trump diciéndole a ese presidente. “De hecho, los alentaría a hacer lo que quieran. Tienes que pagar. Tienes que pagar tus cuentas”.

Mientras los países de todo el mundo se preparan para una segunda presidencia de Donald Trump, un líder mundial está preparando una estrategia diplomática cuidadosamente calibrada.

En Corea del Sur, el presidente del país, Yoon Suk Yeol, “recientemente comenzó a practicar golf nuevamente por primera vez en ocho años, en preparación para la ‘diplomacia del golf’ con el presidente electo Trump”, dijo la oficina presidencial a CNN.

Dijo que Yoon lo había hecho “siguiendo el consejo de quienes lo rodean”, pero se negó a decir cuándo practicó golf el presidente.

Desde que ganó las elecciones en Estados Unidos, Trump ha mantenido un frenético calendario mientras los líderes mundiales llaman para felicitar y cortejar al próximo líder estadounidense, con analistas observando quién logrará una primera reunión.

Y el golf ha demostrado ser durante mucho tiempo un camino confiable hacia Trump. El juego es el motor de ganancias de su imperio empresarial: sus campos de golf y las empresas asociadas con ellos generan cientos de millones de dólares, según una investigación de CNN en 2018.

Trump visitó más campos de golf que cualquier presidente reciente durante su primer año en el cargo en 2017, pasando los fines de semana en sus propiedades en Florida, Nueva Jersey y Virginia, a veces llevando consigo a legisladores o líderes empresariales.

A menos de una semana del inicio de la transición de Donald Trump, con algunas de las decisiones de personal más críticas aún en curso, el presidente electo de Estados Unidos ha elevado a una nueva clase de candidatos: los zares.

Las discusiones sobre un futuro papel para Doug Burgum, gobernador de Dakota del Norte convertido en aliado de Trump, han evolucionado hacia el de un “zar de la energía”, según dos personas familiarizadas con las discusiones, con un amplio mandato para dirigir un proceso interinstitucional que avance la agenda energética del presidente electo Donald Trump. CNN informó el viernes que Burgum estaba siendo considerado para un papel como zar de la energía.

Burgum había estado en contención para un puesto a nivel de gabinete, como dirigir el Departamento del Interior o de Energía, informó CNN anteriormente. Pero, en los últimos días, esas conversaciones se destilaron en un papel que le daría a Burgum supervisión de políticas sin estar agobiado por decenas de miles de empleados o procesos laberínticos.

Es solo el más reciente ejemplo de un destacado contendiente de Trump discutiendo un papel que opera en la esfera entre las agencias y el presidente entrante, un intento de eludir los procesos burocráticos y ejercer más poder sobre sus carteras. También significa que esos candidatos, no cargados por un largo proceso de confirmación en el Senado, pueden comenzar su trabajo desde el primer día.

Algo de contexto: el término “zar” se ha llegado a referir a un nombramiento político con un problema específico por resolver. El presidente Barack Obama nombró a más de dos docenas de funcionarios con ese título, a menudo usado informalmente, para abordar temas como, por ejemplo, cómo cerrar la Bahía de Guantánamo, contener la propagación del ébola y dar cuenta del vasto gasto de estímulo durante la Gran Recesión. El presidente Joe Biden también nombró zares para ayudar a gestionar la respuesta a la pandemia de covid-19 y los problemas de la cadena de suministro que surgieron como resultado.

El candidato del presidente electo Donald Trump para la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos cuestionó el alcance y la gravedad del cambio climático en comentarios de 2014.

“Sería productivo si pudiéramos llegar a lo que es real y lo que no es real”, dijo el exrepresentante de Nueva York Lee Zeldin en una entrevista de 2014 con Newsday. “Todavía no estoy convencido de todo el argumento de que tenemos un problema tan serio como otras personas dicen”.

CNN preguntó al portavoz de Zeldin si todavía mantiene esas opiniones y si está de acuerdo con el consenso científico abrumador de que el cambio climático es real y un problema serio.

“El congresista Zeldin fue un líder destacado en la Cámara abogando por aire limpio y agua limpia durante su tiempo en el Congreso”, dijo el portavoz de Zeldin, Daniel Gall, a CNN en un comunicado.

Bajo el presidente Joe Biden y el expresidente Barack Obama, abordar el cambio climático se convirtió en una de las principales responsabilidades de la EPA. La agencia finalizó varias reglas importantes que obligarían a las plantas de energía, vehículos y operaciones de petróleo y gas a reducir su contaminación que calienta el planeta proveniente de la quema de carbón, petróleo y gas. Una de las primeras tareas de Zeldin probablemente será comenzar el proceso para revocar varias de esas regulaciones.

Zeldin dijo el lunes a Fox News que retirará las regulaciones “de izquierda” y se centrará en “desatar la prosperidad económica” a través de la agencia.

El regreso del presidente electo Donald Trump a la Casa Blanca ya conllevaba el potencial de cambios radicales en la Reserva Federal. Pero ahora la pregunta que se plantea cada vez más no es cómo funcionará el banco central bajo el mandato de Trump, sino si seguirá funcionando.

Elon Musk, un partidario clave de Trump que se espera que tenga una influencia considerable para ayudar a dar forma a las políticas del futuro presidente, incluyó un emoji de “100” al compartir la publicación del senador republicano Mike Lee de Utah en X pidiendo la abolición de la Reserva Federal.

“El Poder Ejecutivo debería estar bajo la dirección del presidente”, escribió Lee este jueves en la publicación, horas después de que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijera a periodistas que no renunciaría si Trump se lo pidiera.

“La Reserva Federal es uno de los muchos ejemplos de cómo nos hemos desviado de la Constitución en ese sentido”, escribió Lee. “Otra razón más por la que deberíamos acabar con la Reserva Federal”.

Cuando se le preguntó cuál es la postura de Trump sobre el asunto, la portavoz de la transición Trump-Vance, Karoline Leavitt, dijo a CNN: “La política solo debe considerarse oficial si proviene directamente del presidente Trump”.

Los llamados a abolir la Reserva Federal no son nada nuevo. El excongresista Ron Paul publicó en 2009 un libro titulado “End the Fed”.

Luego, en junio, el representante republicano Thomas Massie de Kentucky y Lee presentaron proyectos de ley destinados a desmantelar el banco central del país y transferir sus responsabilidades al Departamento del Tesoro.

Pero hasta ahora, Trump no expresó públicamente su apoyo al desmantelamiento de la Reserva Federal. Sin embargo, durante la campaña electoral ha abogado por cambiar el reglamento del banco central, para consternación de muchos economistas.

La Agencia de Protección Ambiental acaba de finalizar una de las únicas normas climáticas pendientes de la administración Biden, destinada a tomar medidas enérgicas contra las fugas de metano, un potente gas que calienta el planeta y tiene un impacto descomunal en el clima.

La norma, propuesta hace casi un año, fue ordenada por la Ley de Reducción de la Inflación, lo que podría dificultar su desmantelamiento por parte de la segunda administración de Trump.

La nueva norma cobra a los productores de petróleo y gas que emiten grandes cantidades de metano una tarifa por desperdiciar dicho metano por encima de un determinado umbral venteándolo o quemándolo en la atmósfera en lugar de capturarlo. La tarifa por el metano será cobrada por el gobierno federal hasta que las empresas reparen las fugas.

Esta tarifa se combinó con incentivos financieros para que las compañías de petróleo y gas repararan tuberías o infraestructuras con fugas.

El metano es un gas inodoro e invisible que tiene un poder de calentamiento 80 veces superior al del dióxido de carbono. Es el principal componente del gas que calienta nuestros hogares y alimenta nuestras estufas, y es uno de los principales subproductos de la extracción de petróleo y gas.

También está calentando drásticamente el planeta. Un grupo internacional de científicos llegó a la conclusión de que la concentración de metano en la atmósfera es ahora más alta que en cualquier otro momento en al menos 800.000 años. Es responsable de hasta un tercio del calentamiento global que experimentó el planeta hasta ahora, según la EPA.

La norma podría resultar difícil de revocar para la administración entrante de Trump porque el programa estaba incluido en la ley climática de Biden, que fue aprobada por el Congreso en 2022. Para deshacerla se necesitaría otro acto del Congreso; si bien no es imposible si los republicanos ganan la Cámara de Representantes, podría ser una tarea cuesta arriba y llevar más tiempo que si la administración Trump actuara por su cuenta.

“La EPA estuvo trabajando con la industria, los estados y las comunidades para reducir las emisiones de metano de modo que el gas natural llegue finalmente a los consumidores como combustible utilizable en lugar de como un gas de efecto invernadero dañino”, dijo el administrador de la EPA, Michael Regan, en un comunicado.

Según la EPA, esta norma por sí sola evitaría que 1,2 millones de toneladas métricas de metano contaminen la atmósfera, el equivalente a retirar de circulación casi 8 millones de automóviles a gasolina durante un año.

El presidente electo Donald Trump está construyendo su nueva administración.

A última hora de este lunes, parecía que estaba a punto de completar su equipo de seguridad nacional, ya que dos fuentes le dijeron a CNN que probablemente elegirá al senador de Florida Marco Rubio como su secretario de Estado. Y una fuente le dijo a CNN que le había pedido al representante republicano de Florida Mike Waltz que fuera su asesor de seguridad nacional.

Trump seleccionó a la gobernadora Kristi Noem como próxima secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, dijeron dos fuentes.

Esto es lo que más sabemos sobre el posible nuevo equipo de Trump:
Trump propuso al exrepresentante republicano de Nueva York Lee Zeldin para servir como su administrador de la Agencia de Protección Ambiental.

Se espera que Trump anuncie que Stephen Miller, su principal asesor de inmigración, servirá como subsecretario general de políticas de la Casa Blanca, dijeron a CNN dos fuentes familiarizadas con los planes.

Las discusiones sobre un futuro rol para el gobernador de Dakota del Norte convertido en aliado de Trump, Doug Burgum, evolucionaron hacia el de un “zar de la energía”, según dos personas familiarizadas con las discusiones.

El presidente electo seleccionó a la representante republicana Elise Stefanik como su embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas.

También anunció que Tom Homan, quien se desempeñó como director interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas en su última administración, estará a cargo de las fronteras del país.

El expresidente de la SEC, Jay Clayton , se encuentra entre los candidatos políticos propuestos a fiscal general, según informaron fuentes a CNN. El senador de Missouri Eric Schmitt, que encabezaba la lista de Trump para el cargo, retiró su nombre de la consideración . Trump estima que su fiscal general es el cargo más importante de su administración.

El senador republicano Bill Hagerty de Tennessee, quien pidió recortar inmediatamente la ayuda a Ucrania, está siendo considerado para varios puestos.

Hay varios nombres que se barajan para el puesto de secretario del Tesoro, incluido Scott Bessent , quien preparó a Trump para sus discursos en el club económico.

El primer anuncio clave de Trump fue la semana pasada, cuando dijo que la directora de campaña, Susie Wiles , sería su secretaria general de la Casa Blanca.

Todavía no se espera que el magnate Elon Musk asuma formalmente una posición en la administración de Trump, pero ejerció una gran influencia , según múltiples fuentes.

Trump dijo él sábado que su exrival presidencial republicana Nikki Haley y su exsecretario de Estado Mike Pompeo no tendrían roles en su administración entrante.