Estados Unidos a 7 de noviembre, 2024.- A tan solo meses de asumir la presidencia en enero de 2025, Donald Trump ha dejado claro que una de sus primeras decisiones será cumplir sus promesas de campaña: cerrar la frontera con México y realizar deportaciones masivas. En una reciente entrevista con NBC News, el presidente electo reafirmó su postura de endurecer las políticas migratorias y emprender acciones contra los cárteles de la droga, destacando que estas medidas son prioritarias para su administración.
Trump afirmó que su administración “no tendrá opción” más que hacer de la frontera una zona “fuerte y poderosa”, asegurando que su postura no está sujeta a costos. El republicano, que durante su campaña dirigió un fuerte discurso contra la inmigración ilegal, mencionó que uno de los principales motivos de su victoria sobre Kamala Harris fue su propuesta de combatir el tráfico de drogas y reforzar la seguridad en la frontera.
«Cuando la gente ha matado y asesinado, cuando los capos de la droga han destruido países, no tenemos otra opción. Ahora van a regresar a esos países porque no se quedan aquí,» enfatizó Trump.
La promesa de implementar deportaciones masivas y confrontar a los cárteles genera tanto apoyo como preocupación, especialmente en los sectores que defienden los derechos de los migrantes. En caso de ejecutarse, estas medidas implicarían grandes cambios para la política migratoria y podrían repercutir en la relación bilateral con México, así como en la situación de millones de personas que viven y trabajan en Estados Unidos.
Esta mañana, Claudia Sheinbaum, presidenta de México, confirmó que tuvo una llamada “cordial” con el presidente electo, en la que lo felicitó por su victoria en las elecciones del 5 de noviembre. Según Sheinbaum, ambos mandatarios hablaron sobre la importancia de mantener una “buena relación” entre México y Estados Unidos.
Esta relación se encuentra en un momento delicado, ya que Trump también ha propuesto incrementar hasta en un 100% los aranceles a México si el país no controla el flujo migratorio hacia el norte. Estas declaraciones han generado tensiones y podrían marcar el inicio de un período de diálogo complejo entre ambas naciones.
Las políticas migratorias anunciadas por Trump no solo afectarán a los migrantes, sino que también podrían tener un impacto significativo en la economía mexicana y en las comunidades transfronterizas. Durante su mandato anterior, Trump ya había implementado políticas de contención migratoria y medidas de presión arancelaria, lo que generó una serie de desafíos para México en temas de seguridad, economía y derechos humanos.
A nivel interno, las promesas de Trump generan divisiones, ya que algunos sectores respaldan la idea de una frontera más segura, mientras que otros critican sus políticas por su enfoque restrictivo y su potencial impacto en las relaciones diplomáticas.
La comunidad migrante en Estados Unidos y los defensores de derechos humanos se mantienen atentos a las decisiones que tome la nueva administración de Trump. Mientras tanto, México y Estados Unidos enfrentan el desafío de encontrar puntos de entendimiento en temas de seguridad, migración y comercio.