Perseverance, el explorador de la NASA, ha estado trabajando duro en Marte, recogiendo trozos de rocas y almacenándolas en el planeta rojo. Pero aquí en la Tierra la agencia espacial encuentra dificultades para cumplir con su plan de lograr que esas rocas lleguen a casa. Después de deliberaciones que duraron meses, la NASA decidió presentar dos rutas alternativas para su programa Sample Return, y uno de ellos convoca a la industria privada para que ayude.
Durante una rueda de prensa la NASA anunció el martes una visión inusual para su misión de muestras de Marte. Seguirá simultáneamente dos caminos para traer las muestras a la Tierra. “De esa forma, con dos alternativas, la NASA se asegurará que las muestras de Marte puedan llegar a nosotros ahorrando tiempo y dinero, en comparación con el plan anterior”, dijo Bill Nelson en declaraciones, como administrador de la NASA.
En abril de 2024 la NASA había convocado a la industria privada para encontrar formas alternativas de recoger las rocas y polvo de Marte y traerlas a la Tierra. Pedían propuestas con un arquitectura de misión que redujera costos y tiempo. Cinco meses después la agencia recibió 11 estudios, tanto de la comunidad de la NASA como de actores de la industria. Y se formó un equipo para evaluar cuál sería la mejor solución.
Dos alternativas
La primera opción involucra medios ya probados de tocar terreno en Marte con una grúa parecida a las que usan los exploradores de la NASA. La otra opción tiene que ver con un nuevo método desarrollado por un socio comercial.
Ambos caminos usarían una versión más pequeña del Vehículo de Ascenso Marciano, un cohete liviano que lanzaría los tubos con las muestras desde Marte hacia la órbita del planeta. Las dos misiones dependerían además del Orbitador de Retorno a Tierra de la Agencia Espacial Europea, que captaría el contenedor con las muestras en la órbita de Marte. El contenedor tendría 30 tubos en su interior.
La NASA ha tenido problemas con su misión Sample Return de Marte, con costos elevados y demoras en los plazos. Se lo calificó como “una campaña con grandes limitaciones y desafíos”, y “con un presupuesto y plazos que no son realistas”. La misión originalmente buscaba traer las muestras en la década de 2030, a un costo de U$ 7 mil millones. Luego, el costo y los plazos se extendieron y todo pareció volverse imposible.
A pesar de sus complejidades el programa es una oportunidad sin precedentes para estudiar muestras de otro planeta. “Los científicos podrán entender la historia geológica del planeta Marte y la evolución del clima en este planeta estéril donde tal vez hubo vida en el pasado, echando luz sobre los orígenes del sistema solar antes de que hubiera vida aquí en la Tierra”, dijo Fox. “También, esto nos preparará para poder enviar de forma segura a los primeros exploradores humanos que lleguen a Marte”.
Este artículo ha sido traducido de Gizmodo US por Lucas Handley. Aquí podrás encontrar la versión original.