Ternua se adapta a la climatología. La compañía vasca de equipamiento deportivo ha reorganizado su ejercicio fiscal para adaptarlo al ciclo meteorológico natural y contabilizar así las ventas de final e inicio de año de manera conjunta. “La campaña de invierno es muy importante para nosotros, y con la que normalmente alcanzamos y superamos nuestros objetivos”, ha explicado Jokin Umerez, director general del grupo, a Modaes.
El ejercicio fiscal del grupo pasará ahora a finalizar el 31 de marzo, para cuando Ternua prevé alcanzar una facturación de 35 millones de euros. En 2023, la empresa registró una cifra de negocio de 34,7 millones de euros, un 10% más que en el año anterior. En medio de este proceso, el grupo ha cerrado un trimestre entre enero y marzo que le ha permitido reajustar el negocio, y que finalizó con ventas en planas y un resultado neto en positivo, según explica Umerez.
La compañía comenzó en 2023 ya un plan de consolidación y optimización de su estructura operativa, que supuso, entre otros, suprimir las filiales de Ternua en Estados Unidos y Canadá para pasar a operar a través de un socio local. Esta reorganización ha continuado en 2024, en la que Ternua ha lanzado oficialmente una nueva división del negocio de equipamiento laboral.
Según explica Umerez, la compañía ya ha comenzado a comercializar prendas y accesorios en el norte de España, donde está basada la compañía, y espera que a largo plazo llegue a alcanzar un 45% de todas las prendas de Ternua. Para ello, el grupo ha establecido un plan de desarrollo con más incidencia en las zonas donde este producto puede tener mayor penetración, relata el directivo.
Ternua ya comercializa su nueva división de equipamiento laboral en el norte de España
“Nos hemos ido acercando de manera natural a este nicho de oportunidad, un producto funcional y además, sostenible, que está muy en sintonía con el ADN de Ternua”, continúa Umerez. La compañía, especializada en el segmento outdoor, utiliza un 100% de algodón orgánico o reciclado en las prendas de las cuatro marcas con las que opera, Ternua, Lorpen, Astore y Loreak Mendian. A principios de octubre, además, el grupo recibió la certificación B-Corp.
El negocio de Ternua está concentrado mayoritariamente en el wholesale, donde factura alrededor del 70% de su facturación. En los últimos meses, sin embargo, las ventas del comercio minorista de la compañía han ido cogiendo más peso dentro del negocio, hasta alcanzar un 25%, tanto a través de su red de tiendas como ecommerce propio.
Ternua opera principalmente en España, aunque también está presente en el mercado internacional, que acumula algo más del 30% del negocio. Después de suprimir sus filiales en Norteamérica, la compañía opera de forma directa en Francia, donde también cuenta con una filial, o Italia, Alemania, Austria o Suiza a través de country managers. Paralelamente, el grupo también distribuye en más de 50 países de todo el mundo.
Tras su fundación en 1986 como una tienda de deporte en el norte de España, Ternua puso en funcionamiento dos años después una estructura productiva propia. Con el paso de los años, la empresa ha ido adquiriendo su cartera de marcas y en 2014 integró un área de innovación para impulsar la sostenibilidad en el negocio. “Siendo una marca de outdoor, nada tiene más sentido que tratar de respetar el medioambiente”, asegura Umerez.
