La actividad sísmica en Estados Unidos es impulsada por el roce de placas tectónicas. Expertos destacan la necesidad de protocolos de emergencia en un contexto de cambio climático y crecimiento urbano.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) es nuestro principal aliado para estar informados sobre la actividad sísmica en el país. Gracias a su monitoreo constante, podemos conocer en tiempo real la magnitud y ubicación de los terremotos que sacuden, por ejemplo, las regiones cercanas al Cinturón de Fuego del Pacífico, donde la falla de San Andrés representa un riesgo constante.
¿Qué ciudades en Estados Unidos registran mayor actividad sísmica?
- Los Ángeles, California: situada en la ruta de la falla de San Andrés, enfrenta un riesgo continuo de sismos fuertes.
- San Francisco, California: reconocida por el devastador terremoto de 1906, sigue siendo vulnerable por su cercanía a importantes fallas.
- Seattle, Washington: cercana a la zona de subducción de Cascadia, está en riesgo de experimentar un sismo de gran magnitud.
- Anchorage, Alaska: la región más sísmica de Estados Unidos, sujeta a temblores frecuentes debido a su posición en el Cinturón de Fuego.
- San Diego, California: próxima a la falla de San Andrés, lo que la coloca en una zona de alto riesgo sísmico.
- Salt Lake City, Utah: aunque no es muy conocida por sismos, la falla de Wasatch genera actividad sísmica en esta ciudad.
- Portland, Oregón: ubicada cerca de la zona de subducción de Cascadia, enfrenta el peligro de un terremoto significativo.
- Sacramento, California: aunque al norte de las fallas más activas, su cercanía a la actividad tectónica la mantiene en riesgo.
- Reno, Nevada: experimenta actividad sísmica moderada con potencial de movimientos significativos debido a fallas cercanas.
- Oklahoma City, Oklahoma: aunque la actividad sísmica es inducida por el ser humano, la región ha visto un aumento de temblores en los últimos años.
¿Cuál es el motivo de la provocación de los sismos?
La costa oeste de Estados Unidos, especialmente California, es una zona de alta sismicidad. Esta intensa actividad se debe principalmente al roce entre las placas tectónicas del Pacífico y Norteamericana, con la falla de San Andrés como principal protagonista. Además, procesos de subducción en el noroeste del Pacífico contribuyen a esta inestabilidad geológica.
Si bien California es conocida por sus frecuentes temblores, los sismos no son exclusivos del Estado Dorado. Otras regiones de Estados Unidos también se encuentran bajo la amenaza de movimientos telúricos causados por fallas geológicas internas. El Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS) vigila constantemente la actividad sísmica del país y proporciona información actualizada al instante sobre la intensidad, ubicación y profundidad de los terremotos.
La creciente amenaza de los terremotos, impulsada por el cambio climático y la expansión urbana, exige una acción inmediata. Expertos advierten que la elaboración de protocolos de emergencia y el seguimiento constante de la actividad sísmica son fundamentales para salvaguardar la vida de millones.