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La inflamación es un proceso natural del organismo, pero cuando se vuelve crónica puede desencadenar enfermedades graves como artritis, diabetes, patologías cardíacas o incluso cáncer. Según el Instituto Europeo de Nutrición y Salud, una dieta antiinflamatoria es clave para prevenir estas afecciones y mejorar la calidad de vida. A continuación, exploramos qué alimentos se recomiendan en este tipo de alimentación y cuáles deberíamos reducir o evitar.
¿Qué es una dieta antiinflamatoria y para quién está indicada?
Una dieta antiinflamatoria se basa en la inclusión de nutrientes que ayudan a reducir los procesos inflamatorios en el organismo. “Este tipo de alimentación es especialmente recomendable para quienes sufren dolor crónico, problemas digestivos, enfermedades cardíacas, sobrepeso, problemas de piel o incluso alteraciones psicológicas como depresión y ansiedad”, señala el Instituto Europeo de Nutrición y Salud.
El objetivo principal es controlar la inflamación a través de alimentos ricos en antioxidantes, ácidos grasos saludables, fibra y compuestos bioactivos, promoviendo una salud integral.
Alimentos antiinflamatorios: aliados para tu dieta
Incluir alimentos antiinflamatorios en la dieta diaria puede marcar una gran diferencia. Entre los más destacados se encuentran:
- Frutas y verduras: la piña, manzana, papaya, frutos rojos, espinacas y brócoli son fuentes de antioxidantes y compuestos bioactivos que combaten la inflamación.
- Pescado azul: salmón, sardinas y atún, ricos en ácidos grasos omega-3, son esenciales para reducir los procesos inflamatorios y promover la salud cardiovascular.
- Frutos secos y semillas: nueces, almendras, pistachos y semillas de lino o chía son excelentes opciones por su aporte de grasas saludables y antioxidantes.
- Té verde: este té es conocido por sus catequinas, compuestos antioxidantes con propiedades antiinflamatorias.
- Especias: cúrcuma, jengibre y canela son ingredientes naturales con alto poder antiinflamatorio.
- Probióticos: alimentos como el kéfir y el yogur ayudan a equilibrar la flora intestinal, reduciendo la inflamación del tracto digestivo.
Estos alimentos no solo reducen la inflamación, sino que también aportan nutrientes esenciales para una dieta equilibrada y saludable.
Alimentos a evitar en una dieta antiinflamatoria
Tan importante como incluir alimentos beneficiosos es evitar aquellos que contribuyen a la inflamación. Según el Instituto Europeo de Nutrición y Salud, los siguientes productos deben reducirse:
- Alimentos procesados: embutidos, snacks y productos precocinados son ricos en aditivos y grasas nocivas.
- Azúcar y alimentos con azúcares añadidos: incrementan la inflamación y el riesgo de enfermedades metabólicas.
- Grasas saturadas: presentes en carnes rojas y productos ultraprocesados.
- Harinas y productos refinados: pan blanco, arroz blanco y pasta refinada.
- Alcohol: su consumo excesivo eleva la inflamación y compromete la salud.
- Cafeína: tomada en exceso puede contribuir a procesos inflamatorios.
“No se trata de eliminar estos alimentos por completo, sino de reducir su consumo habitual para mantener el equilibrio en la dieta”, puntualiza el Instituto Europeo de Nutrición y Salud.
Adoptar una dieta antiinflamatoria no solo previene enfermedades crónicas, sino que también mejora la calidad de vida a corto y largo plazo. Como indica el Instituto Europeo de Nutrición y Salud, “todo es cuestión de equilibrio y de hacer elecciones conscientes que beneficien a nuestro cuerpo”.
Incluir alimentos antiinflamatorios y reducir el consumo de aquellos que generan inflamación es un paso fundamental hacia una alimentación saludable y sostenible. ¿Estás listo para transformar tu dieta?
Beatriz Molina es una periodista especializada en nutrición y salud. Siempre al tanto de las tendencias healthy, Beatriz ofrece las claves para conseguir nuestra mejor versión tanto física como mental. Se graduó en Periodismo en la Universidad de Sevilla y desde entonces ha trabajado como redactora en diferentes revistas digitales, entre ellas otra de las publicaciones más icónicas del grupo Hearst; la revista ELLE, donde cubría como redactora SEO temas sobre estilo de vida, moda, literatura o turismo. En adición, cuenta con experiencia en coberturas de eventos de tal repercusión como los premios Goya, la Mercedes-Benz Fashion Week o festivales de cine a nivel europeo.
Pero más allá de los medios digitales, también cuenta con experiencia en empresas privadas de diferentes y diversos sectores ajenos a la prensa, siempre desde el departamento de Marketing y Comunicación. En un sentido más académico, cabe destacar las tres publicaciones que lleva a sus espaldas; una de ellas premiada con el primer premio de Innovación Docente y Buenas Prácticas María Moliner.