Presuntamente la novia de un temible sicario sería una de las claves principales de este crimen.
El asesinato del pastor Marlon Lora, junto a su esposa Yurlay Rincón y sus hijos, ocurrido en Colombia, sigue generando conmoción mientras las autoridades avanzan en la investigación.
Fotos: redes sociales.
Aunque no hay detenidos, se ha identificado a los presuntos responsables, vinculados al grupo narcoparamilitar Clan del Golfo, y se ha ofrecido una recompensa de 50 millones de pesos colombianos para dar con su paradero.
Se dio a conocer que, un día antes del ataque, el 28 de diciembre, Yurlay Rincón había realizado una denuncia en redes sociales, señalando a dos hombres presuntamente involucrados en un robo en una empresa familiar dedicada a la fabricación de muebles.
Tras el robo inicial, habrían cometido otro asalto en un almacén cercano. Esta denuncia ahora es considerada un posible detonante del homicidio de la familia Lora.
Otra línea de investigación apunta a que la ejecución del pastor y su familia pudo haber sido un error, esta ha causado mayo impacto en redes sociales.
Según las autoridades, el objetivo real de los sicarios podría haber sido Zaida Andrea Sánchez Polanco, novia del narcotraficante Alexander González Pérez, alias “El Calvo”.
Sánchez Polanco, residente del municipio de Aguachica, habría sido confundida con Ángela Lora, hija del pastor, debido a un parecido en su vestimenta al momento de la balacera.
La presunta confusión ha abierto interrogantes sobre la relación entre el Clan del Golfo y los implicados en el asesinato. Este grupo armado es conocido por su control del narcotráfico en la región y su historial de ataques coordinados.
La publicación de Yurlay Rincón en redes sociales, acompañada de fotografías de los hombres señalados, es ahora pieza clave en el caso.
La policía busca determinar si los individuos liberados podrían estar vinculados al crimen o si su denuncia desencadenó represalias por parte del grupo armado.
El pastor Marlon Lora y su familia eran conocidos en su comunidad por su trabajo social y religioso. Este trágico hecho ha desatado indignación y exige justicia para esclarecer las circunstancias que rodearon su asesinato.
Las autoridades continúan indagando las posibles conexiones entre el Clan del Golfo, los sicarios identificados y las víctimas, mientras la recompensa ofrecida busca acelerar la captura de los responsables.