Hace apenas unos meses, Mnica Garca, ministra de Sanidad, argumentaba en una entrevista a EL MUNDO que la desmantelacin de Muface no era una prioridad dentro de sus listas de tareas. “Sabiendo que es un modelo anacrnico, un subsistema dentro de un otro y que no es el ms eficiente, si creramos el SNS desde cero obviamente prescindiramos de esta frmula. Pero ahora mismo no es una prioridad, tenemos otros pilares del SNS muy daados por los recortes y la pandemia”.
Sin embargo, sin ser un objetivo marcado esto deba haberse tomado como un anuncio. A da de hoy el concierto para la renovacin de la asistencia sanitaria de 1,5 millones de funcionarios y sus familias a travs de Muface no ha sido renovado.
Hace dos semanas terminaba el plazo para las ofertas al concierto para los aos 2025 y 2026 y la licitacin qued desierta. Adeslas, Asisa y DKV, que hasta ahora prestaban el servicio, decidieron no acudir a la renovacin del contrato pese a que el Gobierno ha aprobado la mayor subida de la prima de la historia.
Para saber ms
Esto ha supuesto una pugna entre las aseguradoras y el Ejecutivo con los funcionarios en medio esperando qu decisin les tocaba acatar. Mientras unas esperaban alargar los contratos, desde Sanidad se advierte que las cuentas s que les salen y que podran asumir el trasvase de poblacin asegurada en el Sistema Nacional de Salud.
“El contexto actual hace que, por primera vez en muchos aos, la posibilidad de incorporar a la poblacin mutualista a la asistencia sanitaria pblica sea una opcin tanto viable como razonable”. As lo manifiesta en el informe de transicin Muface: del seguro privado al Sistema Nacional de Salud .
Esto choca con el estudio realizado por la Ctedra de Salud Sostenible y Responsable de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) e impulsado junto a la Alianza de la Sanidad Privada Espaola (ASPE) el pasado mes de febrero. El trabajo, titulado El mutualismo administrativo: Modelo predictivo sobre la eleccin de los mutualistas y escenarios futuros cuantificaba el gasto en un milln de euros y describa un impacto en las listas de espera y en las infraestructuras con la llegada de los mutualistas al sistema pblico. En el primer caso, advierte de que las listas sufriran un del incremento en un 266% para consulta externa y del 115% para una intervencin quirrgica. En el segundo, habra que elevar un 3,8% la capacidad nacional actual del nmero de camas.
Por otro lado, el informe de transicin de Muface desliza dicho documento que “hay una fuerte verosimilitud en favor de la hiptesis que seala que las aseguradoras privadas estn incurriendo en un fenmeno de seleccin de riesgos que empuja a los mutualistas asegurados con dichas condiciones a trasladarse a proveedores pblicos de atencin sanitaria”. Un acusacin directa a las aseguradoras y el desvo de pacientes a la pblica en caso de enfermedades graves.
Anlisis de Sanidad: el impacto en las comunidades autnomas
El Ministerio que dirige Mnica Garca ha elaborado el informe de transicin Muface: del seguro privado al Sistema Nacional de Salud que recoge que ante la situacin, “el Gobierno de Espaa, a travs del Ministerio de Transformacin Digital y Funcin Pblica, tiene ante s dos opciones: tratar de mejorar la oferta para hacerla ms atractiva para las empresas aseguradoras o prorrogar durante nueve meses el concierto actual, como permite la Ley de Contratos del Sector Pblico, y abordar el trnsito de los mutualistas de MUFACE a la prestacin de servicios sanitarios por parte del Sistema Nacional de Salud”.
Con datos de 31 de octubre de 2024, Muface tiene en torno a 1,5 millones de mutualistas, de los cuales 1.007.322 personas han escogido recibir la asistencia sanitaria mediante aseguradoras privadas (Asisa, Adeslas y DKV). Esto supone que un 32,7% de la poblacin mutualista recibe asistencia sanitaria por medio de la prestacin del Sistema Nacional de Salud, mientras que el 67,3% la recibe por parte de aseguradoras privadas.
En trminos de distribucin porcentual por franjas de edad, la poblacin peditrica (0-14 aos) representa el 11,8%, la poblacin joven (15-34 aos) el 13,9%, el grupo de poblacin entre los 35 y los 64 aos son el 42,4%, mientras que los mayores de 65 aos suponen el 31,9%.
Como recoge dicho documento, se puede observar que existen diferencias entre CCAA en lo relacionado con el impacto que tendra la incorporacin de la poblacin mutualista de Muface que en la actualidad recibe asistencia sanitaria mediante aseguradoras privadas. De todas las autonomas, Andaluca, Castilla y Len y Extremadura se caracterizan por estar entre las que tendran que incorporar a un mayor porcentaje, siendo, adems, las que lo haran con un mayor porcentaje de mayores de 65 aos.
Se pueden establecer tres grupos de CCAA en funcin de la composicin y proporcin de la poblacin a incorporar a sus servicios autonmicos de salud. Uno con menor proporcin de mutualistas: Baleares, Catalua, Euskadi y Navarra; proporcin intermedia: Aragn, Principado de Asturias, Canarias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Galicia, Madrid, Murcia y La Rioja; comunidades y ciudades autnomas con mayor proporcin: Andaluca, Castilla y Len, Extremadura, Ceuta y Melilla.
Bajo impacto: Baleares, Catalua, Euskadi y Navarra
Por diferentes motivos, son regiones cuya poblacin mutualista de Muface con asistencia sanitaria privada supone menos de un 1,2% del total de la poblacin existente en su sistema pblico de salud. En trminos absolutos, esta es una cifra similar a la del incremento anual de la poblacin que puede afrontar una Comunidad Autnoma.
Es llamativo el caso de Euskadi, que presenta un 35,65% de la poblacin mutualista de con sanidad privada mayor de 65 aos; a pesar de tan elevado porcentaje, supondra incrementar en tan solo un 1,63% los mayores de 65 aos de su poblacin cubierta dado que es la regin que absorbera un menor impacto global (0,65% de la poblacin del SNS en conjunto).
Impacto intermedio: Aragn, Principado de Asturias, Canarias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Galicia, Madrid, Murcia y La Rioja
En este grupo de CCAA la incorporacin de los mutualistas de MUFACE supondra incorporar entre un 1,9% (Canarias, La Rioja y Principado de Asturias) y un 2,42% (Castilla-La Mancha) de personas a los respectivos sistemas regionales de salud. En trminos generales, la distribucin por grupos de edad est en torno a la media nacional en los de 35-64 y mayores de 65 aos.
Sin embargo, merece la pena mencionar el caso de la Comunidad de Madrid. El impacto global sera de un incremento del 2,24% de la poblacin ya existente bajo la cobertura del Sistema Nacional de Salud. Al analizar por grupos de edad, se observa que todos los grupos de edad se encuentran por debajo de la media nacional salvo el de mayores de 65 aos, que representa un 4,54% de la cantidad total existente en la actualidad bajo la cobertura del Servicio Madrileo de Salud. Es una cifra similar a Extremadura e inferior a Andaluca, Ceuta o Melilla, sin embargo, es especialmente notable al mirar el diferencial entre lo que representa ese grupo de edad en la poblacin mutualista de MUFACE y la de la poblacin general dado que la Comunidad de Madrid tiene una poblacin relativamente poco envejecida (36,77% en poblacin mutualista de MUFACE vs 18,18% en poblacin general cubierta por la sanidad pblica madrilea)
Mayor impacto: Andaluca, Castilla y Len, Extremadura, Ceuta y Melilla
Hemos agrupado en este epgrafe las CCAA cuyo impacto en la incorporacin de mutualistas al SNS tiene una desviacin positiva superior a medio punto porcentual respecto de las cifras a nivel nacional. En todos los casos, el porcentaje de poblacin mutualista mayor de 65 aos respecto a la poblacin mayor de 65 aos existente en los respectivos servicios regionales de salud es superior, siendo Andaluca la Comunidad Autnoma con mayor impacto en la incorporacin de este grupo de edad.
Tanto Ceuta como Melilla tienen las cifras ms elevadas tanto de representacin de la poblacin mutualista de MUFACE con sanidad privada que debera ser integrada en la sanidad pblica (ms del doble de la media nacional) como de representacin del grupo etario de mayores de 65 aos.