WASHINGTON– El nuevo jefe de la diplomacia estadounidense, Marco Rubio, promete una “política exterior pragmática” que en el caso de América Latina se centrará en “frenar la migración masiva” y “garantizar la seguridad de las fronteras”.
Para construir un Departamento de Estado “más innovador, ágil y centrado” prevé “reemplazar algunas prioridades, despriorizar algunos temas y eliminar algunas prácticas”, según un comunicado publicado este miércoles.
“Tenemos que frenar la migración masiva y garantizar la seguridad de nuestras fronteras”, afirma, en la línea con la prioridad máxima del presidente Donald Trump, que en las primeras horas de su segundo mandato firmó varias órdenes ejecutivas, nada comparado con las 80 que firmó Joe Biden en su primera semana sin las críticas de la prensa aliada de extrema izquierda.
“Nuestras relaciones diplomáticas con otros países, particularmente en las Américas, priorizarán la seguridad de las fronteras de América, parar la migración ilegal y desestabilizadora, y negociar la repatriación de migrantes ilegales”, advirtió.
Trump prometió la deportación masiva de migrantes en situación irregular, pero está por ver si países como Cuba, Nicaragua y Venezuela los aceptan y cuántos recibirán los demás.
Primer estadounidense de origen hispano en dirigir el Departamento de Estado
Rubio, hijo de migrantes cubanos y que habla español con fluidez, quiere dejar atrás el “enfoque en causas políticas partidistas como hicieron los demócratas con una agenda radical de izquierda y líneas culturales que son muy divisivas en EEUU y profundamente impopulares en el extranjero” para “volver a los fundamentos de la diplomacia”.
De este modo prevé “llevar a cabo una política exterior pragmática en cooperación con otras naciones” por el bien de los intereses de Estados Unidos.
En general seguirá lo que califica de “agenda vanguardista” de Trump.
Eso pasa por eliminar los temas de fallida y cuestionada lucha contra el “calentamiento global”, que significaron la derrota para su predecesor Joe Biden.
En este sentido, Rubio precisa que el Departamento de Estado se centrará en el objetivo de Trump de “un regreso al dominio energético estadounidense”.
“Debemos aprovechar nuestras fortalezas y deshacernos de las políticas climáticas que debilitan a América”, afirma Rubio, quien promete no obstante respaldar las “protecciones ambientales sensatas”.
En su comparecencia en el Senado para su confirmación en el cargo, Rubio afirmó que los cárteles del narcotráfico controlan enormes extensiones de las regiones fronterizas” de Estados Unidos con México y arremetió contra Venezuela, Cuba y Nicaragua.
Entre los decretos firmados por Trump figura la inclusión de Cuba en la lista negra de países patrocinadores del terrorismo, de la que Biden la había retirado días antes de terminar su mandato.
FUENTE: Con información de AFP y otras fuentes.