La investigación sobre la caída fatal del 16 de octubre encontró que Payne, de 31 años, “no estaba completamente consciente” cuando cayó desde el balcón de un hotel.
Un comunicado de prensa de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°14 de Argentina reveló los resultados finales de las pruebas toxicológicas realizadas tras la muerte de Liam Payne. Según una copia del informe, en las 72 horas previas a su muerte tras caer por el balcón desde el tercer piso de un hotel en Buenos Aires, el excantante de One Direction y solista tenía “alcohol, cocaína y un antidepresivo recetado” en su sistema.
El reporte dice que los hallazgos del informe de toxicología ya se han compartido con la familia de Payne, quien “solo presentaba en su cuerpo rastros de un policonsumo” de sustancias basándose en “análisis toxicológicos completos sobre orina, sangre y humor vítreo, realizados en muy corto tiempo”.
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Los funcionarios que realizaron la autopsia concluyeron que la muerte del astro de 31 años se produjo por “‘politraumatismos’ y ‘una hemorragia interna y externa’, producto de la caída que el músico sufrió desde el balcón de la habitación del tercer piso del hotel del barrio de Palermo donde se alojaba”.
Tres informes adicionales solicitados por un fiscal también confirmaron que las lesiones que sufrió Payne fueron provocadas por la caída en el Hotel Casa Sur Palermo y que “se descartaban las autolesivas de cualquier tipo y/o también la intervención física de terceras personas”. Además, las autoridades informaron que Payne no adoptó una “postura refleja” para protegerse de la caída, lo que llevó a concluir que “pudo haberse precipitado en un estado de semi o total inconsciencia”.
En concreto, “la falta de defensa o reflejo de conservación en la caída, junto a otros datos relevantes por su consumo, permiten concluir que Liam Payne no estaba plenamente consciente o atravesaba un estado de disminución notoria o abolición de la consciencia al momento de la caída”. La Fiscalía dijo que así se pudo descartar la “posibilidad de un acto consciente o voluntario por parte de la víctima, ya que, en el estado en el que atravesaba, no sabía lo que hacía ni podía entenderlo”.
Una llamada frenética al 911 realizada por el personal del hotel poco antes de la muerte de Payne incluyó una descripción de un huésped que estaba “abrumado por las drogas y el alcohol” y “destruyendo [su] habitación entera”. Cuando llegó la policía, Payne ya había caído y fallecido en el lugar debido a sus lesiones.
Antes de la publicación de los resultados, los investigadores supuestamente encontraron una serie de sustancias ilícitas en el cuerpo de Payne al momento de su muerte, incluida una droga recreativa llamada “cocaína rosa”, una mezcla de sustancias que a menudo contiene ketamina combinada con MDMA, metanfetamina y cocaína, opioides y/o sustancias psicoactivas.
Payne había sido abierto en el pasado sobre su lucha contra la adicción. En mayo de 2023, celebró 100 días de sobriedad y dijo en ese momento: “Me siento muy, muy bien, y el apoyo de los fans y todo ha sido muy, muy bueno. Así que estoy súper feliz”. En 2021, Payne también habló de sus problemas de uso de sustancias en el podcast Diary of a CEO, detallando su lucha contra la depresión y las sustancias durante los caóticos años de 1D.
La policía allanó el hotel el mes pasado y, según informes, confiscó varios artículos, entre ellos discos duros de computadoras e imágenes de CCTV de las cámaras del hotel.
Además de la noticia sobre los resultados de la autopsia, el comunicado de prensa del jueves reveló que tres personas han sido arrestadas y acusadas en Argentina en relación con la muerte de Payne luego de que se descubriera “una conducta ilícita”, lo que llevó a los cargos de abandono de una persona seguido de su muerte, suministro y facilitación de estupefacientes.
Los tres fueron descritos –pero no nombrados– como una persona que “acompañó diariamente al artista durante su estadía en la ciudad de Buenos Aires”, quien fue acusada de abandonar a una persona que posteriormente murió, lo que conlleva un potencial pena de 5 a 15 años de prisión. Una segunda persona fue descrita como un empleado del hotel que “debe responder por dos suministros comprobados de cocaína a Liam Payne durante el período que estuvo en el hotel”, mientras que una tercera, también “proveedor de drogas”, ha sido acusada de suministro de narcóticos.
La investigación de la muerte de Payne incluyó el análisis de más de 800 horas de video de las cámaras de seguridad del hotel y de la vía pública adyacente, así como una extracción y análisis forense del contenido del teléfono celular del cantante, incluyendo llamadas, mensajes, chats, y datos de redes sociales. Los investigadores también revisaron un registro de los pedidos de Payne en el bar/restaurante del hotel para determinar quién lo había visitado y sus “hábitos de consumo” de alimentos y bebidas.
Asimismo, la policía extrajo varios gigabytes de datos de los teléfonos móviles de la recepción del hotel y de otros testigos que se ofrecieron voluntariamente a corroborar sus declaraciones.