El país, con su rica diversidad cultural, también enfrenta desafíos significativos en lo que respecta a la libertad religiosa
India ocupa el 11º lugar en la Lista Mundial de la Persecución 2024, una clasificación que muestra los países donde es más difícil ser cristiano. En el país, la presión y la violencia son mayores para aquellos que se convierten del hinduismo, convirtiéndose en objetivos frecuentes de nacionalistas hindúes, que creen que todo indio debe ser hindú. Los extremistas hindúes también creen que la India es para hindúes y que no hay espacio para otras religiones. Consideran que Cristo y, por lo tanto, el cristianismo, son un Dios y una religión extranjeros.
En general, cuando alguien se convierte al cristianismo y deja el hinduismo, su estilo de vida cambia. Evitan la adoración a los ídolos, los rituales hindúes y dejan de asistir al templo. También dejan de hacer donaciones para los festivales locales, lo que provoca una reacción negativa entre los hindúes más conservadores, resultando en un aumento de la persecución. Las leyes anti-conversión en varios estados también afectan a la iglesia india, ya que pastores y evangelistas corren el riesgo de ser arrestados si son acusados de persuadir a alguien para convertirse al cristianismo.
La persecución puede ser violenta. Los cristianos experimentan violencia física, sexual, secuestros, ataques en reuniones en iglesias, vandalismo, cierre forzado de iglesias e incluso muerte. Pero la persecución también puede ser más sutil y llena de presión. Los cristianos enfrentan falsas acusaciones de conversión forzada, discursos de odio, exclusión social (principalmente daños a los cristianos en áreas rurales que dependen de recursos comunitarios como pozos de agua para satisfacer sus necesidades básicas), abuso mental, manifestaciones públicas y están sujetos a programas de reconversión dirigidos a los de origen hindú (el programa se llama Ghar Wapsi, que en hindi significa “regreso a casa”).
En los últimos años, muchas iglesias domésticas han surgido con nuevos cristianos, que tienden a ser económicamente pobres. A menudo, encuentran a Cristo en busca de sanidad o paz. Al no sentirse cómodos estableciendo iglesias, ya que los miembros de iglesias establecidas pueden ser más ricos y las congregaciones más grandes pueden hacer que los nuevos cristianos se sientan perdidos, terminan uniéndose a las iglesias domésticas. Por lo tanto, el número sigue aumentando.
Sin embargo, este aumento llama la atención de los extremistas hindúes. Las iglesias domésticas son objetivos fáciles para la violencia, debido a que no tienen edificios de iglesias registrados. Cualquier tipo de reunión en casas de cristianos es considerada una reunión para convertir personas al cristianismo utilizando dinero u otros medios fraudulentos. Por lo tanto, las iglesias domésticas son monitoreadas de cerca: si algún cristiano es un nuevo convertido o el único convertido en la familia, la información llega a los extremistas, haciendo que la iglesia doméstica sea aún más vulnerable.
Preparación para responder a la persecución
¿Cómo responder cuando se es presionado y perseguido de manera violenta? Incluso para cristianos de muchos años, esta puede ser una pregunta difícil de responder. Por ello, es de suma importancia preparar a cristianos en la India que enfrentan esta realidad para que sepan cómo responder de manera bíblica. Con una donación, puedes ayudar a que cristianos indios sean capacitados para saber cómo reaccionar frente a la persecución.
