Alejandro Speitzer y Bárbara López: la dupla detrás de ‘Straight’
Entre bromas, risas y mucha complicidad, Alejandro y Bárbara nos hablaron sobre su protagónico en Straight, el nuevo proyecto del director Marcelo Tobar, en donde también comparten créditos con el actor Franco Masini.
La película gira en torno a la vida de Ro (Alejandro Speitzer), quien es un joven heterosexual que lleva una relación estable con su novia Elia (Bárbara López). Sin embargo, todo cambia cuando conoce a Cris (Franco Masini), un hombre que desafía sus concepciones sobre el amor y la atracción. A medida que su relación con Cris se profundiza, Ro comienza a cuestionar su identidad y a enfrentarse a sus propios prejuicios.
Cuando Alejandro y Bárbara se enteraron que iban a protagonizar esta cinta, ‘Barbie’, como la llama Speitzer, nos contó que se sintió “muy afortunada de trabajar con este niño”, haciendo referencia a su coprotagonista.
Para Alejandro, el hecho de haber formado parte de esta trama fue de “mucho aprendizaje”, empezando por el rodaje, el cual nos contó que no fue nada sencillo por el tipo de tomas en el que la cinta se tenía que filmar: “eran secuencias largas”, dijo. El actor de 29 años aseguró con mucha emoción que Straight es una película “con la que se puede identificar el espectador, ya que habla de amor, un sentimiento universal”.
Quizá esta película pueda sonar un poco familiar ya que en 2018, la historia original de Scott Elmegreen y Drew Fornarola llegó por primera vez al teatro Milán de la Ciudad de México bajo la dirección de Manolo Caro y contó con las actuaciones de Alejandro Speitzer, Zuria Vega y Erick Elías como protagonistas. En aquella obra teatral, el actor de 29 años, dio vida a Andy, un hombre que empieza a despertar nuevas inquietudes en Dan (Erick Elías), quien mantiene una relación con Elsa (Zuria Vega).
6 años después, Marcelo Tobar retomó esta historia y la plasmó en una nueva versión cinematográfica, la cual explora los límites de la atracción humana y cómo los sentimientos inesperados pueden transformar nuestras creencias.
Sin duda, la perspectiva de Speitzer cambió con este nuevo proyecto. Aunque ya estaba familiarizado con la obra de teatro en la que actuó hace 6 años, Alejandro nos confesó que para él “fue interesante llevar esta historia al cine”.
“Yo, haciendo otro personaje, fue uno de los retos para olvidarme de lo que había vivido en la obra”. Además, destacó que gracias a su experiencia en la puesta en escena de Manolo Caro, pudo rescatar algunos elementos de lo vivido allí y trasladarlos a Ro, lo que le permitió darle una nueva dimensión a su personaje en el cine.