El oro superó el viernes la cifra de los 3.000 dólares la onza, por primera vez en la historia, impulsado por su condición de valor seguro frente a tensiones geopolíticas y la estrategia económica del presidente Donald J. Trump.
Hoy los mercados bursátiles dejaron el mareo creado por la gran prensa de izquierda en EEUU y el mundo sobre los aranceles para centrarse en las ventajas del plan maestro de Washington y las grandes posibilidades de inversión que comienzan a abrirse.
En la tarde, el principal indicador Dow Jones subía 1.44 en la Bolsa de Nueva York, mientras el indicador de las grandes empresas ascendía 1.64%, para dejar atrás el terreno negativo de los últimos días.
La política de aranceles del presidente estadounidense contribuye de forma directa a elevar el precio del metal amarillo, un efecto que la Casa Blanca espera como parte de la primera etapa de su plan económico.
Trump anunció el jueves que quería gravar el champán, los vinos y otros productos alcohólicos de la Unión Europea (UE) hasta un 200%, si no se abandonan los aranceles aduaneros del 50% anunciados por Bruselas sobre el whisky estadounidense.
De este modo, y empujado por otros factores, el precio del oro subió a 3.004,94 dólares la onza.
“La ecuación respecto al oro sigue siendo simple. Cuanto más altos sean los aranceles, mayor será la incertidumbre y más fuerte la demanda”, resume Stephen Innes, analista de SPI AM.
Y ese efecto es el que busca el plan de Trump en los mercados mundiales y en los inversores, además de poner contra la pared a los bancos centrales para que salgan a comprar oro y bajen de manera considerable las reservas de dólares.
Esta acumulación de dólares en reservas ha generado una falta de liquiedez en la circulación de la moneda y después de la pandemia de COVID-19 el gobierno de EEUU tuvo que desembolsar varios paquetes de ayuda en más de 8 billones (trillions) de dólares.
Plan Maestro: Mientras el oro sube, el precio del petróleo baja
Los precios internacionales del petróleo cayeron el jueves, luego de la publicación de un informe de la Agencia Internacional de Energía (AIE) que predice un sobreabastecimiento global para 2025, incluso aunque se detengan los aumentos de producción de la OPEP+ después de abril.
En Londres, el precio del barril de crudo Brent del Mar del Norte para entrega en mayo cayó 1,51% con cierre en 69,88 dólares.
De su lado, en Nueva York, su equivalente estadounidense, el barril de West Texas Intermediate (WTI) para entrega en abril, bajó 1,67%, para llegar a los 66,55 dólares.
Este panorama sienta las bases para la caída real y duradera de la inflación en EEUU y el resto del planeta.
Durante el gobierno de Joe Biden la Reserva Federal tuvo que imprimir más dinero aumentando aún más la inflación existente, causada por el ataque frontal a las petroleras estadounidenses con sus erradas políticas de “cambio climático”.
“Las preocupaciones [generadas] sobre el crecimiento mundial por el tema de los aranceles, refuerzan el papel del oro como refugio en un entorno económico cambiante“, considera el analista.
La onza de oro ya había superado su récord anterior de febrero el jueves y se espera que la tendencia siga siendo al alza, en contraposición con los precios del petróleo que caen, otro de los elementos con el que juega el magistral plan económico del presidente estadounidense contra la inflación.
“Las ‘dudas’ [fomentadas] sobre el acuerdo de paz entre Ucrania y Rusia han aumentado la incertidumbre” en los mercados, haciendo subir el precio del metal precioso, añade Russ Mould, analista de AJ Bell. Sin embargo, detrás de ese simple análisis, existen muchas aristas por revelar.
FUENTE: Con información de AFP.
