Redacción El Economista
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La moneda mexicana frenó cuatro días de pérdidas ante el dólar, en medio de datos de inflación en México y a la espera de mayor visibilidad sobre la próxima tanda de aranceles estadounidenses.
El peso se apreció 0.90% a 20.0587 unidades por dólar el lunes, su nivel más fuerte en una semana.
Mientras que el índice dólar (DXY), que mide el desempeño de la divisa estadounidense frente a una canasta de monedas, ganó 0.2% en 104.29 unidades.
Los inversionistas evaluaron que el Índice Nacional de Precios al Consumidor en México registró un avance de 0.14% en la primera quincena de marzo, el menor incremento para un periodo similar en los últimos cinco años.
A tasa anual, la inflación registró un avance a 3.67% frente a la primera mitad de marzo de 2024, su tercer descenso en los últimos cuatro meses, luego de haber repuntado en febrero.
Las cifras de inflación se dan a conocer a unos días de la reunión de política monetaria de Banco de México.
Por otra parte, la expectativa de que Donald Trump anuncie medidas comerciales menos agresivas aumentó el apetito por riesgo.
Reportes de medios internacionales aseguran que el anuncio de “tarifas recíprocas” que hará el presidente Trump la próxima semana será focalizado, excluyendo a algunas naciones.
“Esperamos que la economía pueda soportar cierto grado de incertidumbre en torno a la política arancelaria a corto plazo; sin embargo, a futuro, si las empresas comienzan a ajustar sus precios debido a los aranceles, dicha presión podría trasladarse a los consumidores (lo que implica una mayor inflación) o absorberse parcialmente (lo que implica una reducción de los márgenes de beneficio)”, escribieron analistas de Wells Fargo en un reporte.
Gabriela Siller, directora de Análisis de Banco Base dijo que durante la sesión Trump mantuvo una retórica proteccionista, por lo que se espera que el mercado siga siendo cauteloso en los próximos días y no se pueden descartar episodios de alta volatilidad cambiaria.
A pesar de la apreciación del peso, en la sesión el dólar se mantuvo fuerte ante sus principales cruces. Las divisas más depreciadas fueron el yen japonés con 0.92%, el peso chileno con 0.76%, la lira turca con 0.65%, el real brasileño con 0.63%, el florín húngaro con 0.45% y el sol peruano con 0.36%.
Las divisas más apreciadas fueron el peso mexicano, el shekel israelí con 0.79%, la corona sueca con 0.41%, el rublo ruso con 0.40%, la rupia de India con 0.39% y la corona noruega con 0.26 por ciento. (Con información de Infosel)
