Hoy, frente a la Municipalidad de Ñuñoa, un grupo de padres, apoderados, estudiantes e instituciones religiosas se reunió para exigir la reinstauración de las clases de religión en los colegios municipales. La protesta, apoyada por el Centro Cristiano de Servicios Evangélicos para el Desarrollo, busca restablecer una educación acorde a las creencias de las familias afectadas.
Gabriel Fuentealba, representante de la institución, declaró: «Estamos en contra de las políticas que eliminan las clases de religión, una medida que vulnera nuestro derecho a una educación religiosa. Exigimos que la comunidad revise el material educativo de sus hijos y haga valer su derecho a la clase de religión por ley.»
*Acciones de la Superintendencia de Educación*
La Superintendencia de Educación ha enviado una circular estableciendo el procedimiento para la implementación de las clases de religión. Según el Decreto 924, las clases de religión deben ser impartidas durante dos horas semanales, y los apoderados tienen el derecho de exigir que sus hijos reciban una educación religiosa acorde al programa aprobado por el Ministerio de Educación al momento de la matrícula. La circular especifica:
- *Alumnos que No Quieren Clases de Religión*: Los colegios deben ofrecer alternativas educativas para los estudiantes cuyos padres opten por no inscribirlos en clases de religión.
- *Alumnos que Quieren Clases de Religión*: Los padres deben decidir al momento de la matrícula si sus hijos asistirán a las clases de religión, las cuales deben seguir el programa aprobado por el Ministerio de Educación.
- *Implementación en Colegios Municipales, Subvencionados y Particulares*: Todos los colegios deben cumplir con las dos horas semanales de clase de religión según lo estipulado por el Decreto 924.
*Vulneraciones por la Municipalidad de Ñuñoa*
La Municipalidad de Ñuñoa ha vulnerado estos derechos al crear un programa propio con ideología y contratando docentes no acreditados ni certificados para impartir un programa aprobado por el Ministerio de Educación. Esta situación fue evidenciada por una circular enviada al Colegio Siria, donde se implementó un programa no autorizado.
*Derecho Constitucional Vulnerado*
Este proceder vulnera el derecho constitucional de los padres a educar a sus hijos según sus creencias. La Constitución establece en su Artículo 19, Inciso 10, que «los padres tienen el derecho preferente y el deber de educar a sus hijos». La medida de eliminar las clases de religión, bajo la administración de la alcaldesa del Partido Comunista, contraviene estos principios.
*Acciones Requeridas*
El grupo de padres y el Centro Cristiano de Servicio Evangélico para el Desarrollo solicita:
– La reincorporación inmediata de los profesores de religión acreditados con el certificado de idoneidad docente.
– El despido inmediato de los profesores contratados bajo programas ideológicos no aprobados.
– La revisión y fiscalización por parte de la Superintendencia de Educación y la Contraloría de los programas y recursos utilizados.
*Campaña Nacional*
La campaña «Para que Ñuñoa Vuelva a Tener Fe» informa a la comunidad nacional que cualquier comuna y colegio que enfrente estos problemas puede presentar reclamos a través de la página de la Superintendencia de Educación.
