Aragón volvió a despedir el año corriendo. Las San Silvestres inundaron las calles de la comunidad de norte a sur y de este a oeste, siendo la más multitudinaria la de Zaragoza, con 4.900 participantes por el centro de la ciudad. Pol Oriach y Cristina Espejo fueron los triunfadores de la prueba, que para la montisonense suponía el cuarto consecutivo sobre el asfalto zaragozano. Y si la vespertina fue un éxito, no se quedó atrás la San Silvestre infantil que se celebró en la mañana del último día del año en el entorno de La Granja.
Pero hubo más, muchas más. Huesca recuperó esta prueba después de varios años de ausencia con 350 participantes, la mayoría de ellos disfrazados. Más de 500 personas se reunieron en Barbastro, 425 corredores en la categoría absoluta y 114 en las categorías minis. Javier Castells y Martina Laplana fueron los más rápidos. Cerca de 1.400 corredores tomaron parte en la XXII edición de la San Silvestre de Villanúa, la carrera más popular por número de participantes de Aragón solo por detrás de la de Zaragoza. Alodia Martínez, de tan solo 13 años, y Carlos Gurrea fueron los ganadores en la categoría absoluta en la que hubo un participante muy especial: Jorge Pulido, el capitán de la SD Huesca.
En la provincia de Teruel también fueron miles las personas que terminaron el año haciendo deporte. En la capital turolense fueron más de 1.100 los que cruzaron la meta, en la que Izan Edo fue el más rápido y Elena Martín, la favorita, superó por poco a la última ganadora, Marta Ceperuelo. En Alcañiz también corrieron varios centenares de atletas con Laura Clavería y Javier Rodríguez en chicos como triunfadores. Hamza El Amraouy y Raquel Buj se impusieron en Utrillas mientras que Carlota Gasión y Andrés Mata fueron los más rápidos de los 450 participantes en Andorra. Monreal del Campo, Montalbán, Valderrobres, Cella, Híjar y Albalate del Arzobispo, entre otras localidades, celebraron su tradicional carrera del pavo.