Microsoft Office es la suite ofimática más conocida y utilizada a nivel mundial, sin embargo, hay varias alternativas gratuitas a las que puedes recurrir que dan muy buenos resultados. Concretamente OpenOffice y LibreOffice se encuentran entre las mejores opciones por sus prestaciones y destacan por ser de código abierto. Vamos a profundizar en estos paquetes de oficina, revisando sus similitudes, sus diferencias y valorando cuál es mejor según diferentes criterios objetivos.
OpenOffice nació originalmente como una clara alternativa a la suite de Microsoft. Tras haberse hecho con ella Oracle y cedérsela a Apache, varios desarrolladores crearon un nuevo paquete ofimático partiendo de su código fuente original y mejorándola, naciendo de esta manera LibreOffice, un programa que ha usado el código de OpenOffice, pero ha mejorado con el paso de los años hasta ofrecer mejores prestaciones y añadiendo características adicionales, además de mejorando la compatibilidad con Microsoft Office. Asimismo, esta última cuenta con más versiones regulares que incluyen actualizaciones de seguridad.
Este es el programa derivado OpenOffice, sin embargo, los responsables de su código, The Document Foundation, han buscado diferenciarlo a nivel interno y externo. Por eso, nos encontramos con dos programas que partiendo de un mismo código han acabado siendo diferentes. Para saber cuál es mejor, debemos profundizar un poco más en cada uno y en sus diferencias.
La primera alternativa se compone de un paquete de herramientas que han sido desarrolladas por una comunidad de software libre. En esta comunidad podemos encontrar a Novell, Google y Sun Microsystems, los fundadores de OpenOffice. Su uso se encuentra ampliamente extendido en el mundo laboral y el particular debido sobre todo a sus características más importantes. La primera, que es un software libre y de código abierto, la segunda, que se puede ejecutar en diferentes sistemas operativos, es decir, es una alternativa multiplataforma. La tercera, que usa una interfaz de usuario con una apariencia parecida, lo que hace que sea muy intuitivo y la cuarta, que cuenta con una gran compatibilidad a nivel de archivos. Además, está disponible en más de cuarenta idiomas diferentes.
Para poder utilizarlo, lo primero que tienes que hacer es descargarlo. Para ello entra en esta página y selecciona la versión que necesitas teniendo en cuenta tu sistema operativo, idioma que prefieres y versión deseada (recomendamos la última). En la instalación de este programa puedes encontrarte con la primera traba. Tu antivirus puede bloquear la instalación diciendo que está intentando cambiar o eliminar un archivo. Una vez que has superado este bache, si es que te ha sucedido, tienes que indicar tu nombre, qué instalación quieres (selecciona típica a menos que tengas muchos conocimientos y prefieras personalizarla) y dale a instalar. Todo el proceso te llevará solo unos minutos.
Al configurarla, tienes que indicar tu nombre, apellidos, iniciales y dar a finalizar. Si no das tus datos no pasa nada. Te aparecerá la pantalla con la suite en la que te encontrarás con las opciones de documento de texto, hoja de cálculo, presentación, dibujo, base de datos, fórmula, abrir y plantillas.
Más abajo, verás la opción de obtener más plantillas, añadir nuevas características y obtener más información sobre el programa.
Si vas a documentos de texto te encontrarás con un editor de textos que se parece mucho a Microsoft Word en apariencia, pero mucho más atractivo y colorido. Tiene una gran cantidad de funcionalidades, lo que necesitas para editar tus textos. A la derecha te aparece la pantalla de propiedades, aunque puedes cambiarla por otra si lo deseas. Puedes explorar los programas que más te interesen de la suite.
LibreOffice
Por otro lado, LibreOffice es una suite de oficina que cuenta con una interfaz muy limpia y con herramientas muy potentes. Incluye diferentes aplicaciones que la convierten actualmente en la opción más potente de código abierto y software libre, es decir, puedes descargarla gratis en tu PC.
Además de las características predeterminadas que veremos a continuación, incluye la posibilidad de añadir muchas extensiones y se actualiza constantemente, con lo que permite disfrutar de una gran variedad de plantillas y de documentos diferentes. También está disponible en multitud de idiomas y cuenta se prueba diariamente por una gran comunidad de usuarios y desarrolladores que hacen que esté en constante actualización.
La instalación de este programa también es muy sencilla. Una vez que has dado a descargar el archivo en esta página, se descarga y lo ejecutas. Te aparecerá una pantalla muy intuitiva que es el asistente de instalación. Elige la instalación típica y continúa. El proceso es el mismo que el anterior, aunque el proceso de este parece llevar un poco más de tiempo. No lo notarás demasiado si tu conexión no es lenta.
Nada más instalarla, te encontrarás con una pantalla en la que a la derecha podrás elegir abrir un archivo, archivos remotos, documentos recientes, plantillas y la opción de crear documentos con cada una de sus herramientas.
Si le das por ejemplo a LibreOffice Writer encontrarás su editor de textos, más moderno y con una gran cantidad de funcionalidades. Te encontrarás a mano gran cantidad de funcionalidades que usas en el día a día. Además, destaca porque cuenta con soporte para documentos integrados o embebidos, algo que puedes activar en Archivo, Propiedades, Tipo de letra, para que puedas verlo igual en cualquier sistema operativo. Te recomendamos explorar el resto de programas para que te hagas una idea de su funcionamiento.
En qué se parecen
Considerando entonces que sus orígenes son similares, es lógico encontrar semejanzas en ambos. De todas formas, es básico conocer algo: y es que, si estamos acostumbrados a usar cualquier versión moderna de Microsoft Office, puede que el cambio en la interfaz de los dos programas nos resulte un tanto complicada, pero es verdad que contamos con algunas características propias de cada una que son bastante parecidas.
Funcionalidades y compatibilidad
De hecho, hay detalles que nos resultarán más que familiares. En cuanto a la curva de aprendizaje de ambos programas, la verdad es que sí que hay diferencias, pero es cierto que, al ser LibreOffice un fork de OpenOffice, la interfaz y la forma de trabajar con ambos programas es casi idéntica.
A pesar de que LibreOffice surgió años después de OpenOffice, estos softwares comparten algunas funcionalidades. De hecho, aunque siempre han buscado distinguirse son programas similares en cierto sentido. Asimismo, tanto LibreOffice como OpenOffice están disponibles para usuarios de Mac, Windows, o Linux. Es así que, en los dos casos, contaremos con un procesador de textos, de un diseñador de hojas de cálculo y de un creador de presentaciones. Además, las dos plataformas incluyen su propio administrador de bases de datos y una aplicación de dibujo, así como una concreta para la creación de fórmulas matemáticas.
Además, hay que señalar que, en ambos casos, se cuenta con API, comentarios/notas y la alternativa de crear base de datos, por ejemplo. Y esto es solo el principio, dato en ambas suites también se permiten la gestión de documentos y se ofrecen diferentes herramientas de presentación, importación o exportación de datos, etc.
Por otro, lo que también comparten, dentro del campo de las funcionalidades, es la pestaña con las opciones de asistencia. En ambos programas de suite ofimática se pueden encontrar diferentes alternativas: preguntas frecuentes y foro, correo electrónico/servicio de ayuda, sus bases de conocimientos y también la opción de chat.
Aplicaciones
Ambos programas ofrecen un paquete básico de aplicaciones tras descargar su suite ofimática, algo bastante común en Microsoft, por ejemplo, con su paquete de Word. Así, podemos encontrar las siguientes aplicaciones comunes tanto en LibreOficce como en OpenOficce:
- Writer: Un procesador de texto que te permitirá crear, editar y guardar archivos.
- Calc: Una hoja de cálculo libre y de código abierto compatible con Microsoft Excel. Podrás gestionar tablas y realizar cálculos, entre otros.
- Impress: Un programa de creación de presentaciones de diapositivas muy parecido a Microsoft Office PowerPoint. Podrás editar tus presentaciones añadiendo imágenes, texto o fondos, por ejemplo.
- Draw: Es un editor de gráficos vectoriales con el que podrás hacer dibujos, gráficos y diagramas. Cuenta con un controlador 3D para añadir esferas, anillos cubos, etc.
- Base: Un sistema gestor de bases de datos con una amplia gama de características. Podrás crear y modificar tablas, formularios, consultas e incluso informes.
En definitiva, si has trabajado en anteriores ocasiones con el paquete Office, seguro que te sonarán algunas de estas herramientas, ya que son muy similares tanto en su manejo como en la cantidad de funcionalidades que presentan. Las aplicaciones son muy similares, así como la experiencia de uso y las funciones. Por ejemplo, el formato de textos en Write es muy similar al líder del mercado Word de Microsoft. De estructura similar a Excel, las otras aplicaciones de LibreOffice u OpenOffice también ofrecen una amplia gama de funciones con las que los usuarios ya estarán familiarizados.
Es sencillo abrir y editar documentos producidos en un programa de Microsoft Office con una de las dos variantes de código abierto y compartirlo con otros usuarios. Sin embargo, para formatos más complejos, por ejemplo, dentro de un texto o si se usaron animaciones especiales en PowerPoint, estas aplicaciones muestran sus límites. Esto también puede provocar que los documentos no se muestren correctamente y, por lo tanto, la edición puede verse limitada.
Compatibilidad con otros programas
En cuanto a la compatibilidad con otros programas, ambas aplicaciones presentan muchas ventajas: LibreOffice y OpenOffice pueden abrir y guardar archivos en los formatos más utilizados de Microsoft Office:
- Archivos de texto en formato DOCX.
- Archivos de hojas de cálculo en formato XLSX.
- Archivos de presentación en formato PPTX.
OpenOffice vs LibreOffice: Diferencias principales
Para poder determinar las principales diferencias entre un programa y otro, vamos a tener en cuenta diferentes aspectos importantes en los que debes fijarte, aunque puede que te interesen más otros, por lo que es bueno que conozcas las prestaciones de cada uno de ellos antes de tomar la decisión final.
Interfaz
En lo que respecta a interfaz de usuario, OpenOffice sigue con su interfaz característica, mientras que su sucesora se diferencia en este aspecto. Tiene un diseño más limpio, donde se da más importancia al editor de textos y con una diferente distribución de los elementos con respecto al anterior. Al igual que el anterior puedes añadir las propiedades en la derecha, aunque no es lo primero que ves.
No hay una mejor ni peor, eso dependerá de los gustos de cada persona, siendo la interfaz de LibreOffice más moderna y la de Apache continúa su aspecto original en gran medida, algo que no tiene por qué ser malo. Puede que te guste la primera porque te has familiarizado con ella y te guste lo clásico, o quizá lo que busques es algo que te resulte más atractivo, sea más intuitivo y moderno, como es el caso de LibreOffice.
Herramientas
Ambos tienen las mismas herramientas, aunque su nombre no sea el mismo en las dos, evidentemente. Por ello, no vas a echar ninguna de menos, lo único que podemos diferenciar aquí es en cuál te guste más o te sea más fácil de utilizar.
Las herramientas que incorporan son:
- Procesador de textos.
- Hojas de cálculo.
- Software de dibujo.
- Base de datos.
- Programa de presentaciones de diapositivas.
- Fórmulas.
Los dos tienen plantillas, aunque en LibreOffice ya vienen integradas y no hay que descargarlas por separado. También tienen motor de extensiones y asistentes para ciertas tareas.
Sin embargo, hay claras diferencias también. LibreOffice por su parte, sí que cuenta con la posibilidad de ofrecer al usuario una edición de imágenes, aunque Apache gana en el sentido de que ofrece una gestión del diseño y hasta modelos personalizables. Al igual que da la opción de visualizar los datos.
Curva de aprendizaje
Si hace tiempo que conoces Microsoft Word (o cualquier otra herramienta de Office) y te has acostumbrado a sus programas más antiguos, te resultará mucho más fácil familiarizarte con ambas series ofimáticas ya que guardan muchas similitudes.
Si no es así, te llevará un poco más, pero su panel es tan intuitivo que no te costará dar con ellos. Su forma de trabajar además es parecida, así que, aunque con sus diferencias te llevará prácticamente lo mismo empezar a usar una u otra sin dificultades.
En esto, aunque con sus diferencias, no creemos que vaya a ganar ninguno más allá de tus gustos personales o preferencias. Aunque algo que sí hay que tener en cuenta es que OpenOffice ofrece más en términos de flexibilidad cuando se trata de idiomas, lo que le permite descargar idiomas adicionales como complementos. En cambio, si instalamos LibreOffice, tendremos que elegir un idioma al principio.
En cualquier caso, la interfaz de Apache ayuda a que la curva de aprendizaje para los usuarios que acaban de comenzar desde cero sea más sencilla.
Consumo y rendimiento
LibreOffice requiere de más rendimiento de memoria y depende de Java. La de Apache no requiere tanta memoria, sino que carga solo el programa que se usa, lo que hace que su consumo sea muy inferior que su versión más moderna. Esto es especialmente importante si tu ordenador es antiguo o no tiene muchos recursos. Por tanto, la decisión entre una u otra dependerá de si tu ordenador es más moderno o tiene mayores cursos o no es así, entre otros aspectos que estamos analizando.
LibreOffice requiere al menos 256 MB de RAM, aunque se recomiendan 512 MB, además de 1,5 GB disponibles en tu disco duro. OpenOffice requiere el mismo RAM, pero menos espacio en disco, 650 MB o menos según el sistema operativo.
Formatos de fichero compatibles
Los dos usan por defecto los formatos ODF (Open Document Format), para guardar los documentos en formato abierto compatible con la mayoría de programas. Entre las extensiones típicas de ODF encontramos .odt, .ods, .odp y .odg. LibreOffice destaca en este aspecto porque además es compatible con los formatos de Microsoft Office, por lo que puede abrir y guardar documentos creados en las últimas versiones de Word.
Esta es una clara ventaja sobre su predecesor, ya que la OpenOffice puede abrir documentos de Office, pero no guardarlos (solo de versiones hasta el 2003). Si podemos establecer un ganador en compatibilidad, ganaría LibreOffice por este aspecto.
Otras diferencias a tener en cuenta
Además de las que hemos indicado, hay otras características y diferencias que puedes tener en cuenta de ambos programas a la hora de entender mejor qué es lo que te ofrece cada uno de ellos. Así podrás profundizar más en el perfil de cada uno y tomar una mejor decisión sobre cuál utilizar.
Compatibilidad
Las dos suites son de código abierto, gratis y con un proceso de instalación similar. Se pueden utilizar en los mismos sistemas operativos, aunque en OpenOffice no hay versión de 64 bits de Windows, pero sí de otros sistemas operativos. Sí hay enlaces de distribuidores de terceros en que puedes instalarlo en otros sistemas. Puedes usarlos en Windows, macOS y Linux.
Si tienes Windows con 64 bits o macOS en una versión más reciente, OpenOffice no es lo tuyo, sí lo es en todas las versiones Linux. En este aspecto, está claro que gana LibreOffice por estar disponible en todas las versiones de los sistemas operativos, aunque si puedes usar cualquiera de los dos tienes que fijarte en otros aspectos.
Para que te hagas una idea rápidamente de las compatibilidades de estas dos suites ofimáticas gratuitas, aquí tienes el listado:
- LibreOffice está disponible para Windows (32 y 64 bits), Linux (64 bits) y macOS 10.12 o superior.
- Apache OpenOffice está disponible para descargar en Windows (32 bits), Linux (32 y 64 bits) y macOS (menor e igual que la versión 10.15 Catalina, y la versión compatible es OpenOffice 4.0.1).
Ayuda a empresas
Con Collabora Office se puede obtener ayuda empresarial al usar LibreOffice en nuestra empresa o lugar de trabajo. También se puede implementar LibreOffice en los servidores de nuestra empresa para crear un espacio de trabajo colaborativo. Sin embargo, Apache OpenOffice no tiene ninguna opción de soporte empresarial. Por lo tanto, es más adecuado para usuarios que solo lo van a usar en casa o en el colegio.
Idiomas
OpenOffice no ofrece una solución para equipos que quieren trabajar juntos en archivos y documentos. Con LibreOffice, el proceso es mucho más complejo que con otros proveedores. Para usar la edición online, primero se debe instalar una aplicación en un servidor dedicado. Solo entonces los miembros del equipo pueden usar las funciones de trabajo colaborativo en el navegador web.
Los usuarios de LibreOffice deben comprometerse con el primer idioma seleccionado después del inicio, mientras que los usuarios de OpenOffice pueden cargar paquetes de idiomas adicionales y, por lo tanto, adaptar la aplicación a sus propias necesidades después.
Comunidad
LibreOffice tiene una comunidad mucho más activa y extensa, por lo que va mejorando con el paso del tiempo. La serie ofimática adquirida de Apache no se preocupa tanto por ello y tiene una menor comunidad. Puede que el hecho de haber sido comprada por una empresa grande influya en ello, la comunidad de The Document Foundation se implica más con el código abierto de su suite y su mejora constante para convertirse en un digno competidor de Microsoft Office.
Por su parte, OpenOffice ya tiene mucha más historia y aun teniendo a alguien detrás su comunidad no es tan grande en la actualidad. Sin embargo, sí que tiene un foro oficial que tiene actividad reciente en el que puedes informarte, consultar dudas e incluso participar para ayudar a otros usuarios.
Actualizaciones
Si queremos mejorar la productividad con el programa y tener un rendimiento mejorado, es recomendable elegir un software que reciba actualizaciones periódicas. Es cierto que ambos reciben actualizaciones periódicas. Pero, OpenOffice se limita a correcciones de errores y actualizaciones menores. En cambio, LibreOffice tiene correcciones de errores y actualizaciones menores frecuentes, pero actualizaciones importantes periódicas con funciones más nuevas.
La frecuencia de las actualizaciones significa que también hay más posibilidades de errores en LibreOffice, pero es probable que cualquiera que aparezca se resuelva rápidamente con la próxima actualización.
Cuál es mejor
No es fácil dar respuesta a estas preguntas porque cada una de ellas tiene sus propias características, ventajas y desventajas. Además, ambas utilizan el mismo código abierto.
LibreOffice destaca por contar con una interfaz más moderna, más funcionalidades y mejoras constantes, mayor compatibilidad con Windows y alta compatibilidad con los archivos de Microsoft Office hasta el punto de poder abrirlos y guardarlos en sus versiones más modernas. Además, incluye más plantillas de diseño en la herramienta de «presentación». También funciona mejor con los formatos más complejos y permite dar formato a los textos y a los archivos de manera más sencilla y eficiente. También permite encontrar otras funciones más fácilmente, como por ejemplo las marcas de agua en archivos PDF o el recuento de palabras. Tiene más funciones que OpenOffice, incluyendo, por ejemplo, más alternativas de importación y exportación de archivos. Existen más desarrolladores que están realizando su trabajo en LibreOffice, lo que se traduce en que las actualizaciones se publican más regularmente y los errores se solucionan más rápido.
OpenOffice no tiene compatibilidad para guardar documentos en las versiones más modernas de Microsoft Office, aunque sí puede abrirlos. Sin embargo, destaca porque tiene una interfaz original que si ya conoces no te costará nada utilizarla y necesita menos recursos que su rival. De esta forma, es una buena alternativa para los que tienen ordenadores antiguos o necesitan consumir los mínimos recursos posibles. Además, las funcionalidades que incorporan suelen hacerlo ya pulidas y con los mínimos errores posibles, aunque lleve más en implementarlas. A nivel de estabilidad, esta alternativa gana, ya que la otra opción, al contar con innovaciones más constantes tiene más problemas, sobre todo en ordenadores antiguos, además de que consume menos RAM.
De esta manera, ambas alternativas permiten disponer de una alternativa a Microsoft Office interesante, con lo que, en muchos casos la elección final dependerá de las preferencias de cada usuario y del sistema con el que trabajemos, así como de la alternativa que nos resulte más sencilla de utilizar. Además, hay que tener en cuenta en todo momento que son dos softwares por los que no hay que pagar nada. Por lo que es una ventaja, a pesar de las diferentes limitaciones que no hay en Office, pero de ahí que cueste una determinada cantidad de dinero que no todo el mundo ve rentable.
Nos quedamos con LibreOffice. Sobre todo, si estamos buscando un software actualizado y que se revise periódicamente, también a nivel de seguridad y de funciones. Si en cambio estamos buscando una alternativa de alto rendimiento y estable para usar en sistemas antiguos, Open Office será una buena alternativa. De todas formas, tienen los mismos programas y altas prestaciones, así que cualquiera de ellas te será muy práctica para abrir y editar los documentos que necesites. Son gratis y de código abierto.
¿Cuál es más seguro?
Hay muchas formas de valorar el rendimiento de ambos programas y, de momento, ya te hemos proporcionado nuestro veredicto en general. Pero, dependiendo de cuál sea el rasgo al que le des más importancia, podría haber otras maneras de ver el enfrentamiento entre OpenOffice y LibreOffice. Por ejemplo, algo a lo que le dan mucha importancia una gran cantidad de usuarios es la seguridad.
En estos tiempos, queremos usar programas de calidad que ofrezcan muchas funciones, pero también necesitamos saber que estaremos seguros mientras los usamos. Por ello, el nivel de seguridad que aportan estos programas es muy relevante. Para comenzar, te podemos decir que los dos están programados para ofrecer una seguridad de alto nivel. No obstante, uno de los dos software destaca por encima del otro si hablamos de este tipo de característica.
Se trata de LibreOffice, software que proporciona más opciones para que puedas encriptar tus archivos y documentos de manera que tengas más claro que no les ocurrirá nada. Los archivos se encriptan con algoritmos más seguros y complejos y, de esta forma, puedes estar más tranquilo usándolo. Esta es una muy buena opción en el caso de estar gestionando archivos que quieras que estén más protegidos que con contraseñas u otros sistemas, ya que se trata de un encriptado de alto nivel.
En esa misma línea, LibreOffice está preparado para que tengas la oportunidad de utilizar el programa a la hora de firmar con certificados de seguridad concretos. Eso aumenta las posibilidades y refuerza el perfil de este programa como herramienta enfocada a la protección en la creación o transmisión de documentos. Esto, eso sí, no quiere decir que OpenOffice no sea un programa seguro. En realidad, también se trata de un software de gran seguridad, así que con ambas opciones harías una buena elección. Pero si la seguridad es tu primer rasgo para decidirte por un programa, LibreOffice será tu mejor opción y la que te proporcionará más confianza.
Alternativa: Microsoft Office gratuito
Si ninguna de las dos opciones te convence, y venías buscando una forma de tener el office de Microsoft de forma gratuita, ya sea Excel, Word o PowerPoint, hay una manera muy sencilla de conseguirlo, sin trucos, códigos ni días de prueba, sino de forma permanente y en unos pocos segundos.
Se trata del uso de la versión online, a la cual puedes acceder desde aquí. Con ella solo tendrás que iniciar sesión con una cuenta de Outlook (o de Hotmail) y empezar a crear documentos. Serán gratuitos, y lo mejor de todo es que podrás acceder a ellos desde cualquier sistema operativo o equipo, es decir, lo que guardes en tu PC lo tendrás también en tu móvil. Solamente necesitas conexión a internet.
Además, otro de sus beneficios, es que todo lo que escribas se irá guardando automáticamente, por lo que si se te va la luz, o se te bloquea el ordenador, no perderás nada, y podrás seguir donde ibas, así como restaurar alguna versión anterior. Y eso no es todo, podrás compartir el documento con un amigo, o un compañero de clase, para modificar el Excel, Word o PowerPoint juntos, pudiendo ver lo que el otro modifica, y agregando contenido ambos a la vez.
Ahora que ya tienes las mejores opciones, dependiendo de tus necesidades, si tienes conexión a internet o no, si buscas compartir a tiempo real un documento, etc, podrás elegir el que más te guste.