Onceavo mandamiento: no impondrás religión

¿Qué opinarían los mexicanos si algún mandatario estatal -de un partido conservador- dictara una ley que ordenara colocar un letrero con los Diez Mandamientos (de La Biblia) en todas las entradas de las escuelas de la entidad?

La semana pasada, el gobernador de Luisiana, Jeff Landry, en Estados Unidos, firmó una ley que obliga a todas las escuelas de ese estado a exhibir el texto bíblico donde se enumeran los Diez Mandamientos, lo que organizaciones pro derechos vieron como una afrenta al laicismo y a la constitución de aquella nación.

Como se sabe, en noviembre próximo habrá elecciones presidenciales en EU, donde el republicano Donald Trump se perfila como el único contendiente que podría derrotar a Joe Baiden. Luisiana aporta pocos votos, comparados con entidades como California, Texas o Florida, donde abundan los evangélicos y católicos que apoyan al ex presidente.

Trump y su partido han sabido manejar el tema religioso a lo largo de la campaña. La acción de Landry seguramente colectará votos en iglesias protestantes, mormonas y católicas. El gobernador ha comentado que esa porción bíblica -que deberá ser expuesta en carteles en todas las escuelas públicas (desde primarias hasta universidades)- “contienen valiosas lecciones para los estudiantes”.

La medida forma parte de una campaña de ministros de culto, legisladores y activistas religiosos que están a favor de que se vuelva a orar antes iniciar las actividades educativas y en oficinas gubernamentales, como se hacía antaño. Pero, también organismos de la sociedad civil a favor de la libertad religiosa estuvieron en contra, argumentando que Estados Unidos es un país laico.

En el México actual ha habido gobernadores y gobernadoras ProVida que han pretendido imponer una religión (la mayoritaria), pero sus intentos han sido frenados, como fue el caso del ex gobernador priista de Chihuahua, César Duarte Jáquez, quien en un acto público consagró al Corazón de María al estado y a su familia en abril de 2013. Al término de su mandato, fue acusado de corrupción y detenido en EU a mediados de 2020.

La nueva conformación geopolítica de México, con Claudia Sheinbaum a la cabeza, ha prometido que se respetará el Estado laico, pero también a las distintas asociaciones religiosas que existen en México (más de 10 mil); que impedirá que se cierren los templos, como se rumoró falsamente en redes sociales antes y durante la campaña presidencial, pero evitará también que se impongan expresiones religiosas como un anexo de la formación educativa.

PALABRA DE HONOR: Por cierto, la semana pasada el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, festejó junto con pastores evangélicos el “Día del Arrepentimiento y la Esperanza en Cristo” donde el mandatario pidió perdón por los pecados de avaricia, lujuria, hechicería, inmoralidad y corrupción… pero se va a reelegir, como todo buen dictador.