El superintendente estatal republicano Ryan Walters ordenó el jueves 27 de junio de 2024 que las escuelas públicas incorporen la Biblia en las lecciones de quinto a duodécimo grado, el último esfuerzo de los conservadores para incorporar la religión en las aulas. (Foto AP/Marta Lavandier, Archivo)
OKLAHOMA CITY (AP) – El superintendente de instrucción pública del estado de Oklahoma ordenó el jueves a las escuelas públicas que incorporen la Biblia en las lecciones en cada salón de clases entre 5º y 12º grado, el último esfuerzo de los conservadores para incorporar la religión en las aulas.
La directiva provocó la condena inmediata de los grupos de derechos civiles y los partidarios de la separación de la Iglesia y el Estado, con algunos llamándolo un abuso de poder y una violación de la Constitución de Estados Unidos.
La orden enviada a los distritos de todo el estado por el superintendente estatal republicano Ryan Walters dice que la adhesión al mandato es obligatoria y “se espera un cumplimiento inmediato y estricto”.
“La Biblia es un elemento histórico y cultural indispensable”, dijo Walters en un comunicado. “Sin un conocimiento básico de ella, los estudiantes de Oklahoma son incapaces de contextualizar adecuadamente los fundamentos de nuestra nación, razón por la cual los estándares educativos de Oklahoma prevén su instrucción”.
La ley de Oklahoma ya permite explícitamente contar con la Biblia en las aulas y permite que los maestros las utilicen en la enseñanza, dijo Phil Bacharach, vocero del fiscal general del estado.
Pero no está claro si Walters tiene autoridad para ordenar que las escuelas la enseñen. La ley estatal dice que los distritos escolares individuales tienen la autoridad exclusiva para decidir sobre la instrucción, el plan de estudios, las listas de lectura, los materiales didácticos y los libros de texto.
Adam Soltani , responsable en Oklahoma del Consejo de Relaciones Estadounidenses-Islámicas, criticó la orden como una clara violación de la cláusula constitucional que prohíbe al gobierno “establecer” una religión.
“Nos oponemos rotundamente a cualquier requisito de que la religión se enseñe a la fuerza o se exija como parte de los planes de lecciones en las escuelas públicas, en Oklahoma o en cualquier otro lugar del país”, dijo Adam Soltani en un comunicado.
La semana pasada el estado de Luisiana aprobó una ley que tiene como requisito que las escuelas públicas exhiban los diez mandamientos, esto como una medida de incluir a Dios en las aulas, lineamiento que el expresidente Donald Trump respaldó.
“¿Alguien ha leído lo de ‘No robarás’? Es decir, ¿alguien ha leído estás cosas tan increíbles? Simplemente increíbles”, declaró Trump en la reunión de la Coalición Faith & Freedom (Fe y Libertad). “No quieren que sea proclamado. Es un mundo loco”, exclamó Trump.
A principios de esta semana, el Tribunal Supremo de Oklahoma bloqueó un intento del estado de tener la primera escuela religiosa concertada financiada con fondos públicos del país.