Tras casi una década de disputas legales, Brad Pitt y Angelina Jolie han firmado finalmente los papeles que ponen fin a su divorcio. Sin embargo, esta resolución no habría sido posible sin la influencia de Ines de Ramon, la actual pareja del actor, según fuentes cercanas a la pareja.
La diseñadora de joyas, de 31 años, ha sido un apoyo fundamental para Pitt, quien llevaba ocho años atrapado en lo que algunos han llamado un “Guerra de las Rosas” moderna. Desde que Jolie presentó la demanda de divorcio en 2016, las diferencias entre ambos no han cesado, especialmente en temas como la custodia de sus hijos y la propiedad de su icónico viñedo en Francia, Château Miraval.
“Ines influyó en Brad para que finalmente llegara a un acuerdo”, asegura una fuente cercana al actor. Según este informante, De Ramon le dejó claro a Pitt que cerrar este capítulo sería fundamental para construir una vida juntos, posiblemente con planes de formar una familia en el futuro. “La opinión de Ines es que la vida sería mucho más disfrutable sin la sombra del divorcio”, añade la misma fuente. Este consejo, lleno de sentido práctico, habría sido la motivación que Brad necesitaba para dar el paso definitivo.
Desde que comenzaron a salir en noviembre de 2022, De Ramon ha demostrado ser una influencia positiva en la vida de Pitt. “Ella tiene una perspectiva muy sana sobre las cosas y ha ayudado a Brad a enfocarse en lo realmente importante. Es una mujer fuerte que no se deja intimidar por el ojo público ni por los problemas legales que rodean a Brad”, comenta otro informante.
Mientras que Pitt parece encontrar un nuevo equilibrio emocional, Jolie ha expresado su alivio tras este avance en la disputa legal. Su abogado, James Simon, declaró que Angelina está “agotada” tras años de enfrentamientos, pero siente cierta paz al ver que, al menos, esta etapa ha concluido. Desde que solicitó el divorcio, Jolie ha priorizado el bienestar de sus hijos, alejándolos de las propiedades compartidas con Pitt. Según Simon, la actriz se ha enfocado en “encontrar paz y sanación para su familia”, aunque el proceso completo está lejos de haber terminado.
Aunque el divorcio ha llegado a su fin, no todo está resuelto entre Pitt y Jolie. La disputa en torno al Château Miraval, la lujosa propiedad vinícola que la pareja adquirió durante su matrimonio, sigue siendo un tema pendiente. Esta controversia legal, que incluye acusaciones de ventas no autorizadas y mal manejo de la propiedad, continúa prolongándose en los tribunales. Sin embargo, tanto Pitt como Jolie parecen haber llegado a la conclusión de que firmar los documentos del divorcio era un paso necesario para avanzar. “Ambos lados entendieron que era momento de dejar esto atrás”, señaló una fuente.
De Ramon, quien anteriormente estuvo casada con Paul Wesley, estrella de The Vampire Diaries, parece estar acostumbrada a las dinámicas de las relaciones en el ojo público. Esto ha permitido que su relación con Pitt fluya sin que las complicaciones legales de su pasado interfieran en su romance. Brad Pitt, quien ha enfrentado un escrutinio mediático constante desde sus matrimonios con Jennifer Aniston y Angelina Jolie, ha encontrado en De Ramon una pareja que no solo lo apoya, sino que también lo ayuda a mirar hacia el futuro con optimismo. “Brad está muy agradecido de tener a alguien como Ines a su lado. Ella no deja que los problemas legales pongan tensión en su relación y siempre mantiene una actitud positiva”, asegura una fuente cercana. Con la firma de los papeles de divorcio, Brad Pitt e Inés de Ramon pueden enfocarse en construir una vida juntos, mientras Angelina Jolie se concentra en su familia y proyectos personales.