La biopic reafirma su reinado televisivo con el estreno de Cris Miró (ella), serie de TNT, Max y Flow que recrea el camino a la consagración del ícono trans argentino de la década de 1990 con amparo en el libro Hembra de Carlos Sanzol. El giro temático hacia la diversidad guía, asimismo, la ficción de ocho episodios dirigida por Martín Vatenberg y Javier van de Couter, en la narración cronológica de cómo Gerardo Elías encuentra no sin resistencias sociales y familiares una identidad más auténtica al travestirse en Cris Miró, quien pasaría de actuar en cabarets clandestinos a convertirse en la primera vedete trans del teatro Maipo y una omnipresente estrella de la revista, la televisión y la farándula porteñas.
La estela de Miró fue tan meteórica como trágicamente breve, pero su recorrido abrió puertas a la comunidad transgénero en el teatro y en los medios de comunicación al mismo tiempo que exhibió una impronta distante y pacífica que afianzó el mito.
El reto de la mímesis audiovisual recayó sobre Mina Serrano, performer, modelo y vedete española radicada en París que emprende su primer protagónico televisivo y además en un contexto para ella inédito como el argentino. Serrano (27), que nació poco después de la muerte de Miró, se presentó voluntariamente al casting de Cris Miró (ella) alentada por el parecido con su personaje, y una serie de audiciones y pruebas por Zoom desde Europa hicieron el resto.
La concreción de la tira demandó sin embargo más tiempo del esperado, en parte por la pausa de pandemia, y recién hoy Serrano se estrena en la piel de la diva. Katja Alemann, César Bordón, Agustín Aristarán, Vico D´Alessandro, Marcos Montes, Toto Rovito, Manu Fanego, Campi y Adabel Guerrero, entre otros, completan el elenco.
¿Qué le llamó la atención a Serrano de Miró? “Me impactó su valentía, decir algo tan simple como ‘¿y por qué yo no?’, ‘¿por qué no puedo ser la primera vecdel Maipo?’ Es algo que dicho así suena sencillo pero que en verdad era algo extremadamente radical”, dice la actriz a poco de pasear sus casi dos metros de altura y su liviandad de esfinge por el teatro Astor Piazzolla porteño donde se presentó la ficción.
Y sigue: “Cuando veo a Cris pienso en un término que medio me inventé que es ‘elegancia punk’. Porque desde la elegancia, la corrección, la educación, ella volteaba el tablero, cambiaba las normas y transgredía. Esa es una de las cualidades que siempre me han sorprendido y que más me han inspirado de Cris. Es lo más difícil de hacer y yo trato de aplicármelo”.
“Ha habido algunas mujeres trans a lo largo de mi vida como Cris que me han enseñado que frente al prejuicio y el rechazo lo más fácil es blindarse, defenderse -sostiene-. En cambio hacer el esfuerzo de abrirse, de estar en paz y recibir a la gente con bondad supone un esfuerzo titánico, y eso es lo que cambia las mentes y hace que la sociedad cambie. Tenemos que mantenernos en esa luz y en esa bondad que Cris tenía. Yo no sé cuánto se lo trabajó y cuánto era una cosa que apareció espontáneamente en ella, pero sin duda que fue uno de los focos a la hora de construir el personaje”.
Terrenos distintos
Para Serrano su vida en Granada previa al espectáculo fue difícil, y encuentra cierto paralelismo con el libreto que le toca representar en Cris Miró (ella). “He vivido el rechazo y la no aceptación en distintos momentos. Eso me ha hecho ser fuerte, tener más en claro quién soy, porque cuando la gente no te abre las puertas de entrada eres tú la que tiene que ir a convencerles y eso te hace ser mejor, exigirte. No es necesario ponerse a discutir con esas personas: aceptémoslas, incluyámoslas. No hay que victimizarse ni tampoco encolerizarse. Digamos que yo hice lo que pude con mi realidad y bueno, es un shock estar aquí, es una sorpresa. Si alguien me hubiese dicho en el pasado que yo iba a estar haciendo este papel me hubiese cagado de risa”, reconoce la actriz.
Serrano, quien permanecerá hasta fin de mes en Buenos Aires, añade: “Me gusta Argentina, siento que hay una actitud de progreso fuerte, incluso tenéis derechos que todavía en España o en Francia no tenemos. Hay una ley fundamental que es la del cupo laboral trans, que desde que llegué aquí me sorprendió porque pude constatar el impacto que tiene en la sociedad. Espero que no se la modifique con el actual gobierno, porque este tipo de leyes marcan un cambio. Es un país en el que hay conductoras de televisión, actrices y personas en los medios que son trans, muchas más que en otros lados. Me enorgullece formar parte ahora de esta sociedad y de este ambiente, aunque sea por mi participación en la serie”.
−¿Cómo definirías el contexto de la década de 1990 en que se basa la tira?
−Tuve que hacer todo un trabajo de investigación, porque además la década del ‘90 en la Argentina fue muy particular, la pizza con champán, ¿no? Es un contexto que hay que entender. El universo de la revista porteña también es una cosa genuina que me fascinó desde el primer momento. Pero sí, estaba todo muy alejado de mi contexto, yo conocía y admiraba a las vedetes mejicanas o a las vedetes de la revista española.
−Te definís como artista “multidisciplinaria”. ¿Qué implica hacer televisión?
−Es un terreno distinto. Si empiezo a pensar en los detalles de cada disciplina que hago es un lío, ni yo me aclaro. Pero lo que me gusta es contar historias que siento que merecen la pena ser contadas, y cada historia tiene una disciplina más adecuada que otra, entonces en este caso lo natural era hacer una ficción audiovisual. Y bueno, pues me adapto, me meto en el papel y trato de encararlo con la mayor humildad posible porque es la primera vez que protagonizo algo así, es la primera vez que me enfrento a esto. Y lo hago escuchando, dejándome aconsejar por el equipo. A veces tengo un poco de miedo porque hay mucha gente que me va a ver, muchas opiniones. Pero trato de disfrutarlo porque no sé cuántas veces voy a estar en una situación parecida. Quiero simplemente disfrutarlo a cada momento, no pretendo crearme ninguna expectativa.
Para ver “Cris Miró (ella)”
La biopic se podrá ver en TNT desde hoy a las 22, con nuevos episodios cada domingo de media hora. Se repetirán los martes a las 22 y los viernes 23. Estará completa en Flow a partir del 24 de junio. También estará disponible en Max.
