La demanda empresarial de sus servicios en la nube y la fiebre por la inteligencia artificial (IA) generativa siguen impulsando el negocio y los beneficios de Microsoft. Los ingresos del gigante informático crecieron un 16%, hasta 65.585 millones de dólares (unos 60.400 millones de euros al tipo de cambio actual), en el primer trimestre de su año fiscal, que equivale al tercero del año natural, de julio a septiembre. Los resultados de explotación aumentaron un 14%, hasta 30.552 millones de dólares, y el beneficio neto marcó un nuevo récord de 24.667 millones de dólares, con un aumento del 11%, según las cuentas publicadas este miércoles por la empresa, que superan las expectativas del mercado
La compañía, además, emprendió con éxito hace unos años una transición desde la venta de software para ordenadores personales hacia la prestación de servicios a empresas y en la nube. Los ingresos en la división de Productividad y Procesos de Negocio fueron de 28.300 millones de dólares y aumentaron un 12%. Dentro de ello, los ingresos por productos y servicios en la nube para empresas de Office aumentaron un 13%, impulsados por un crecimiento de los ingresos de Office 365 del 15%. Mientras, los ingresos de LinkedIn aumentaron un 10%. Por su parte, los ingresos por productos y servicios en la nube de Dynamics aumentaron un 14% gracias al tirón del 18% de Dynamics 365.
Los ingresos en Nube Inteligente fueron de 24.092 millones de dólares y aumentaron un 20%, impulsados por los productos de servidor y servicios en la nube, que aumentaron un 23%. Estos, a su vez, tuvieron como motor a Azure y otros servicios en la nube, con un incremento del 33%
En cuanto a computación personal, los ingresos fueron de 13.200 millones de dólares y aumentaron un 17%. Mientras que los ingresos de Windows crecen un 2%. En cuanto a los ingresos por contenidos y servicios de Xbox, aumentaron un 61% por la adquisición de Activision. Los ingresos por publicidad en búsquedas y noticias, excluidos los costes de adquisición de tráfico, aumentaron un 18%.
“La transformación impulsada por la IA está cambiando el trabajo, los artefactos de trabajo y el flujo de trabajo en todos los roles, funciones y procesos de negocio”, dijo Satya Nadella, presidente y consejero delegado de Microsoft, a través de un comunicado. “Estamos ampliando nuestra oportunidad y ganando nuevos clientes a medida que les ayudamos a aplicar nuestras plataformas y herramientas de IA para impulsar un nuevo crecimiento y apalancamiento operativo”, añadió.
“La fuerte ejecución por parte de nuestros equipos de ventas y socios proporcionó un sólido comienzo de nuestro año fiscal con unos ingresos de Microsoft Cloud de 38.900 millones de dólares, un 22% más interanual”, dijo Amy Hood, vicepresidenta ejecutiva y directora financiera de Microsoft.
Nadella ha estado apostando por la tecnología de IA de su participada OpenAI en toda la línea de productos de Microsoft. Los clientes añaden herramientas de IA que resumen documentos, generan nuevos contenidos para su software de productividad Office o para sus suscripciones a la nube Azure, o compran más servicios en la nube que les permiten crear y ejecutar sus propias aplicaciones de IA.
Microsoft ha acusado esta semana a Google de tratar de desacreditarla antes los reguladores con maniobras encubiertas. Responsabiliza a la empresa que dirige Sundar Pichai de impulsar una asociación de empresas dirigida a combatir la fortaleza de su negocio de computación en la nube inclinando el panorama regulador a favor, en lugar de competir por sus propios méritos. No es la única batalla entre ambas. El consejero delegado de Microsoft, Satya Nadella, testificó contra Google en el caso de Washington en que el juez dictó que la compañía del grupo Alphabet ha ejercido un monopolio ilegal en el mercado de los buscadores.
Con su inversión en OpenAI y el desarrollo de sus propios servicios, Microsoft es una de las empresas punteras en inteligencia artificial y su negocio de computación en la nube crece con fuerza. Microsoft ha subido en Bolsa cerca de un 30% en los últimos 12 meses. En julio pasado marcó su máximo histórico en 468 dólares por acción. Desde entonces ha cedido algo de terreno. La compañía tiene un valor en Bolsa de 3,2 billones de dólares.
Microsoft cerró en junio pasado un ejercicio récord. Al calor de la inteligencia artificial, aumentó sus ingresos un 16%, hasta 245.122 millones de dólares (220.300 millones de euros al tipo de cambio actual) y mejoró su beneficio un 22%, hasta los 88.136 millones de dólares. La compañía decidió que tocaba recompensar a los accionistas y aprobó un aumento del dividendo del 10% y una recompra de acciones de 60.000 millones de dólares, según anunció en septiembre.
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