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Álex Luna
En la previa del partido frente al Valladolid, Míchel dejó claras sus preocupaciones, pero también mostró confianza en la capacidad del equipo para revertir la situación. El Girona afrontará el encuentro sin Oriol Romeu, sancionado, ni Viktor Tsygankov, lesionado. Sin embargo, el técnico confirmó una buena noticia: “Yangel Herrera ha entrenado con normalidad y llega para el partido”, confirmó.
Tras el último partido, el técnico reconoció su preocupación por el rendimiento colectivo. “Tenemos que jugar con más agresividad en las dos áreas y la conexión entre jugadores no es la que quisiera tras cinco meses. La realidad es que tenemos que mejorar”, afirmó. El madrileño asumió su responsabilidad en esta situación: “La autocrítica es mía, es mi responsabilidad. Creo que el equipo sigue entrenando bien, pero soy yo el que tengo que dar con la tecla”, recalcó.
El técnico no ocultó la trascendencia del duelo ante el Valladolid: “Es clave, no porque sea el último del año, sino porque después de tres partidos sin ganar en LaLiga tenemos que dar nuestra mejor versión en casa”, contó. Quieren ser sólidos y dar un paso al frente.
Al evaluar el 2024, Míchel se mostró realista: “La nota es menor que la del año pasado por los números, pero ha sido un buen año. Jugamos la Champions, el club ha crecido mucho y seguimos dando pasos adelante; Espero un mejor 2025”, pidió. Sin embargo, dejó claro que el Girona tiene plantilla para estar en Europa, pero actualmente no está mostrando el nivel necesario. “Ahora mismo no tengo la sensación de poder estar en puestos europeos porque no se está viendo nuestra mejor versión”, lamentó.
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Míchel elogió al próximo rival, destacando su capacidad para adaptarse. “Espero la mejor versión del Valladolid, vendrán con ánimos de ganar tras vencer al Valencia y nos hemos centrado mucho en nosotros mismos esta semana, porque no tenemos referencias claras con su nuevo entrenador”, confesó.
Asentarse en Primera, objetivo principal
El técnico insistió en que el crecimiento del Girona pasa por asentarse en Primera División. “Somos un club en crecimiento, y estar en Primera es el reto más importante. A partir de ahí, queremos estar entre los diez primeros, pero hemos fallado en Champions y en la Copa, y no me gusta”, reconoció. Pese a los resultados, Míchel pidió fijarse en “el sentimiento y la manera de hacer las cosas”, asegurando que ningún aficionado debería estar decepcionado.