COLIMA.- El Dr. Jaime Alberto Bricio Barrios, profesor investigador de la Facultad de Medicina de la Universidad de Colima, compartió sus conocimientos y reflexiones sobre la nutrición, un tema esencial para la salud y bienestar. En esta conversación con AFmedios, el especialista aborda conceptos clave, desmitifica ideas erróneas y enfatiza la importancia de una alimentación consciente y culturalmente compatible.
El Dr. Bricio comienza señalando que la nutrición no debe reducirse a «dietas» temporales, sino entenderse como un estilo de vida que se adapta a cada persona.
“Todo lo que hacemos en nuestra alimentación diaria está influido por factores como la cultura”, afirma. Por ejemplo, menciona cómo en febrero, con la tradición de los tamales, las elecciones alimentarias responden no solo a necesidades nutricionales, sino también a un contexto cultural.
Destaca que el objetivo debe ser encontrar un equilibrio entre disfrutar de la comida y mantener una alimentación adecuada, recordando que el aumento o pérdida de peso es un proceso gradual.
El experto explica que una dieta balanceada incluye carbohidratos, proteínas y grasas, además de vitaminas y minerales. Subraya que cada macronutriente tiene una función crucial:
Carbohidratos: Fuente de energía, presentes en alimentos como las tortillas.
Proteínas: Indispensables para músculos, hormonas y tejidos, provenientes de fuentes animales y vegetales.
Grasas: Aunque temidas, existen muchas saludables esenciales para el organismo.
El Dr. Bricio advierte contra las dietas extremas que eliminan por completo algún macronutriente, como la dieta cetogénica. Aunque pueden ser efectivas en casos específicos bajo supervisión profesional, no son adecuadas para todos.
“Lo ideal es comer de todo, en las cantidades correctas para cada persona”, afirma.
Cultura alimentaria y mitos comunes
La conversación aborda cómo los hábitos culturales influyen en las elecciones alimenticias. Por ejemplo, señala la tentación de consumir tacos y hamburguesas por la noche, especialmente cuando no se planea con anticipación. Sin embargo, propone estrategias para disfrutar estos alimentos de manera equilibrada, como complementar las comidas con verduras o reducir porciones.
“Las verduras son una inversión excelente”, comenta, sugiriendo que preparar alimentos con antelación puede facilitar elecciones saludables durante la semana. Reconoce que puede haber desperdicio, pero enfatiza que priorizar la disponibilidad de opciones nutritivas es esencial para mejorar los hábitos alimenticios.
El Dr. Bricio profundiza en la relación entre la salud mental y la alimentación. Explica que condiciones como la depresión o la ansiedad pueden alterar los patrones alimenticios, ya sea provocando un exceso o una falta de apetito. También menciona cómo los comentarios sobre el peso o la apariencia física pueden afectar negativamente a las personas.
“El impacto de nuestras palabras sobre la alimentación de otros es enorme. Es crucial abordar este tema con empatía y evitar juicios que puedan agravar problemas emocionales”, advierte.
Además, el especialista destaca que las consultas de nutrición pueden incorporar elementos de psicología para abordar comportamientos alimentarios.
“En muchas ocasiones, la clave para mejorar las prácticas alimenticias no está solo en la nutrición, sino en el trabajo conjunto con un psicólogo que enfoque su labor en el comportamiento alimentario”, asegura.
Rompiendo patrones negativos
El Dr. Bricio aborda cómo los mensajes aprendidos en la infancia, como la obligación de terminar toda la comida del plato, pueden persistir en la adultez y dificultar una relación saludable con la alimentación. Señala que estas creencias pueden modificarse con el apoyo adecuado y que es importante enseñar a las nuevas generaciones a escuchar sus señales de saciedad.
Finalmente, el Dr. Bricio anima a las personas a ser exigentes al elegir un profesional de la nutrición. “Cada quien tiene expectativas y necesidades diferentes. Es importante encontrar un profesional cuyo estilo sea compatible con lo que buscamos”, aconseja.
Concluye enfatizando la conexión entre la nutrición y la psicología, señalando que ambas disciplinas pueden trabajar juntas para ayudar a las personas a lograr un equilibrio alimenticio y emocional.
Refirió que en 2023 se publicó una actualización de las Guías Alimentarias Mexicanas, que incluye el nuevo Plato del Bien Comer, una herramienta diseñada para orientar a las personas sobre cómo balancear su alimentación de manera práctica y saludable.
Este recurso ofrece información detallada sobre los grupos de alimentos, su proporción ideal, y las porciones recomendadas para diferentes rangos de edad, desde la infancia hasta la adultez mayor. Además, incorpora recomendaciones específicas para optar por alimentos locales, económicos y accesibles, fomentando así una nutrición más consciente y sostenible.
El nuevo Plato del Bien Comer y las guías asociadas pueden consultarse fácilmente en línea. Basta con buscar términos como «nuevo plato del bien comer» o «guías alimentarias mexicanas» en cualquier navegador.
La primera opción que suele aparecer es el sitio oficial del Gobierno de México, que incluye infografías, resúmenes y un documento completo de más de 90 páginas. Este material no solo detalla cómo estructurar una dieta equilibrada, sino también proporciona consejos prácticos para adaptar estas recomendaciones a distintas realidades y necesidades personales.
La entrevista deja claro que la nutrición es un tema complejo y multidimensional, que va más allá de la simple elección de alimentos. Es un reflejo de nuestra cultura, emociones y estilo de vida, y merece un abordaje integral para mejorar nuestra calidad de vida.
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