Hace casi un año, Apple creyó que había dado con la gallina de los huevos de oro al dar luz verde al lanzamiento de las Vision Pro, las gafas de realidad mixta de la compañía. Con ellas, la intención de la firma era adentrarse en un campo inexplorado hasta el momento que, por desgracia, ha terminado peor de lo que esperaban. ¿El motivo? A pesar de los intentos de Apple, su equipo de realidad virtual y aumentada no consigue convencer a los usuarios.
Como señala TechSpot, dicha situación ha llevado a la firma norteamericana a detener la fabricación de su casco Vision Pro por dos motivos: por un lado, la baja demanda; por otro, la insatisfacción de los clientes. Así, Apple acumuló un inventario suficiente como para cubrir la demanda del dispositivo hasta 2025, todo ello tras reducir la producción durante el verano de 2024. De hecho, la compañía de Cupertino ha vendido menos de 500.000 unidades desde su lanzamiento, un aspecto al que hay que sumar las múltiples devoluciones relacionadas con dolores de cabeza, problemas de visión, dolor de cuello y mareos.
Los usuarios ya no utilizan el dispositivo
A todo lo mencionado, debemos añadir que los usuarios que decidieron conservar el dispositivo no lo usan con la frecuencia esperada, ya que no se sienten atraídos por las aplicaciones o los juegos disponibles. Por ello, algunos proveedores incluso optaron por dejar de fabricar componentes a mediados de 2024, dado que tomaron la determinación de anticiparse a las bajas expectativas de ventas. Un ejemplo de ello sería Luxshare, el fabricante chino que redujo la producción a 1.000 unidades diarias hacia el final del proceso, justo la mitad de su capacidad máxima.
Apple, por su parte, tendría en mente desarrollar una versión más asequible de su casco de realidad virtual. Por este motivo, habría decidido suspender de forma temporal el desarrollo de la segunda generación del Vision Pro. En lo relativo a las ventas, tiene la esperanza de vender 4 millones de unidades durante su ciclo de vida, pero aspectos como su precio elevado o sus críticas mixtas han contribuido a rebajar las expectativas tanto de los usuarios como de la compañía.