El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció el pasado martes la decisión de su gobierno de impedir que los migrantes que crucen la frontera sur de forma ilegal reciban asilo bajo ciertas circunstancias. Las reacciones ante dicha medida no se han hecho esperar, principalmente en áreas como California, estado que podría ver de forma directa las consecuencias del bloqueo fronterizo.
Las nuevas acciones están destinadas a disuadir a los inmigrantes de cruzar la frontera de forma irregular o ilegal, situación que se ha vivido desde hace mucho tiempo en los puntos fronterizos del Estado Dorado con ciudades de México, como Tijuana, en Baja California.
Ante la medida de la Casa Blanca, se esperaba una respuesta del gobernado de California, Gavin Newsom. En su cuenta de Twitter solo se limitó a escribir el mismo día del anuncio: “Recordamos que los @GOP (republicanos) se han negado a asegurar la frontera. Votaron en contra (…) Lo único que les interesa es jugar a la política”.
De acuerdo con Cal Matters, un portavoz de Newsom comentó: “Como afirmó hoy el presidente Biden, las acciones ejecutivas no son suficientes; los republicanos deben hacer su trabajo. El Congreso debe actuar sobre el acuerdo fronterizo bipartidista y finalmente trabajar con el presidente para aprobar un camino hacia la ciudadanía y arreglar nuestro sistema de inmigración profundamente obsoleto”.
Por su parte, el alcalde de San Diego, Todd Gloria, ciudad que durante los primeros siete meses del año fiscal 2023-24 registró alrededor de 220 mil cruces ilegales de migrantes desde México para buscar asilo, expresó: “Frente a la continua inacción de los republicanos del Congreso en materia de legislación para ayudar a mejorar la situación en nuestra frontera suroeste, el presidente Biden está actuando con decisión. El sistema actual está fallando tanto a las comunidades locales como a los solicitantes de asilo; el hecho es que necesitamos una reforma migratoria integral”.
Mientras que el supervisor del condado de San Diego, Jim Desmond, señaló: “Si al presidente realmente le importara asegurar la frontera, vendría a San Diego y vería a las más de 150 mil personas que han sido liberadas en nuestras calles o los 52.000 extranjeros de interés especial que han cruzado. El desprecio de esta administración por nuestra seguridad es espantoso. La realidad aquí en San Diego es terrible, y los gestos vacíos del presidente no hacen nada para abordar la crisis actual. Necesitamos una acción urgente e integral, no más teatro político”.
Masih Fouladi, director ejecutivo de la organización California Inmigrant Policy Center (CIPC), precisó en un comunicado: “El derecho a solicitar asilo es un derecho humano. La orden ejecutiva del presidente Biden firmada hoy (4 de junio) que le permite suspender protecciones de larga data para las personas que buscan asilo en Estados Unidos es decepcionante y peligrosa”.
El representante de la organización también dijo que la administración Biden ha tenido suficiente tiempo para encontrar un camino mejor. Añadió: “En lugar de repetir las políticas crueles utilizadas por la administración anterior, el presidente Biden debería trabajar con todos los niveles de gobierno para proporcionar a las organizaciones comunitarias y sin fines de lucro a lo largo de la frontera los recursos necesarios para recibir a las personas con dignidad de manera segura y humana”.
LA NACION
