Estudios Bíblicos Predica de Hoy: ¡Algo que todos necesitamos!
Texto: “Santiago, siervo de Dios y del Señor Jesucristo, a las doce tribus que están en la dispersión: Salud. Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, 3 sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. 4 Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna.” Santiago 1:1-4.
Idea central: Debemos entender que las pruebas en nuestra vida se deben tener como algo realmente necesario.
INTRODUCCIÒN.
La epístola de Santiago es posiblemente el primer escrito del Nuevo Testamento. Mucho se ha debatido sobre su autor y posible fecha de Escritura, pero estos datos son intrascendentes para el creyente enfocado en la obediencia a la Palabra de Dios. Independientemente de los cuestionamientos hechos por los críticos, podemos estar seguros de que es un libro de mucha teología práctica.
¿Quién era Santiago?
Santiago era el medio hermano de nuestro Señor Jesucristo, un hombre que rechazó a Jesús durante Su ministerio terrenal quizás considerándole una vergüenza familiar.
“¿No es éste el hijo del carpintero? ¿No se llama su madre María, y sus hermanos, Jacobo, José, Simón y Judas? 56 ¿No están todas sus hermanas con nosotros? ¿De dónde, pues, tiene éste todas estas cosas? 57 Y se escandalizaban de él. Pero Jesús les dijo: No hay profeta sin honra, sino en su propia tierra y en su casa.” (Mateo 13:55-57).
Santiago se identifica en el capítulo 1 como “siervo de Dios y del Señor Jesucristo” (1:1).
¿Qué explica este cambio? La respuesta está en 1 Corintios 15:6-7:
“Después apareció a más de quinientos hermanos a la vez, de los cuales muchos viven aún, y otros ya duermen. 7 Después apareció a Jacobo…”
Un encuentro con el Cristo resucitado marcó un cambio radical en la vida de Santiago, marcó un cambio en la vida de Pablo y marcará un cambio en nuestras vidas. Es por eso que día a día es tan necesario ese momento de encuentro con el Cristo resucitado.
Llama la atención la humildad de este hombre quien fue pastor de la Iglesia de Jerusalén y una autoridad en la misma, a tal punto que Pablo se refirió a él en Gálatas 2:9 como “columna de la Iglesia” y dictaminó el informe del Concilio de Jerusalén en Hechos 15. No estaba embriagado de posición y poder sino de un espíritu humilde para servir al Señor. Tampoco se refiere a él mismo como hermano del Señor Jesucristo
Cuando se nombra siervo lo hace con el término doulos que se refiere al esclavo que es propiedad de su amo.
OT: En esta mañana veremos porque las pruebas son necesarias para nuestras vidas.
I. ¿Qué son las pruebas?
A. La palabra griega para prueba es peirasmos y puede significar varias cosas, pero dentro del contexto de este versículo puede significar:
Un intento para ver si algo funciona.
“Pero esto decía para probarle; porque él sabía lo que había de hacer.” (Juan 6:6).
Una prueba de la fidelidad o del amor de alguien.
“y no me despreciasteis ni desechasteis por la prueba que tenía en mi cuerpo, antes bien me recibisteis como a un ángel de Dios, como a Cristo Jesús.” (Gálatas 4:14).
Una aflicción, un problema o adversidad para probar la fe, la fidelidad y el carácter de alguien.
“No os ha sobrevenido ninguna prueba que no sea humana, pero fiel es Dios, quien no os dejará ser probados más de lo que podéis; antes bien, juntamente con la prueba proveerá también la salida, para que podáis soportar.” (1 Corintios 10:13). S.B Textual.
B. Las pruebas tienen un carácter inesperado. (Verso 2 “…os halléis…”)
La voz pasiva de la traducción trata de rescatar el sentido del original peripesete que significa “caer en manos” como en Lucas 10:30 cuando el viajero de la parábola del Buen samaritano “cayó en manos de ladrones”
C. Generalmente las pruebas tienen un carácter múltiple.
“En lo cual vosotros os alegráis, aunque ahora por un poco de tiempo, si es necesario, tengáis que ser afligidos en diversas pruebas…” (1 Pedro 1:6).
II. Las pruebas son necesarias para producir en nosotros una actitud positiva.
A. Santiago comienza abruptamente su carta
Identificándose con su audiencia, pero no como el que mira los toros desde la barra; sino con la autoridad de la experiencia adquirida. (Sabiendo=Ginoskontes=“ conociendo por medio de la experiencia.”)
B. La actitud ante cualquier circunstancia es lo más esencial.
“La vida es diez por ciento la manera en que hacemos las cosas y noventa por ciento la actitud como la tomamos” Anónimo.
Es un fruto externo que proviene de una raíz interna.
“Y todos los varones de Israel que veían aquel hombre huían de su presencia, y tenían gran temor. 25 Y cada uno de los de Israel decía: ¿No habéis visto aquel hombre que ha salido? El se adelanta para provocar a Israel. Al que le venciere, el rey le enriquecerá con grandes riquezas, y le dará su hija, y eximirá de tributos a la casa de su padre en Israel. 26 Entonces habló David a los que estaban junto a él, diciendo: ¿Qué harán al hombre que venciere a este filisteo, y quitare el oprobio de Israel? Porque ¿quién es este filisteo incircunciso, para que provoque a los escuadrones del Dios viviente?” (1 Samuel 17:24-26).
David tenía una actitud valiente que provenía de una confianza en Dios cultivada en la intimidad con Dios.
Es nuestra mejor amiga o nuestra peor enemiga.
“Y oyéndole hablar Eliab su hermano mayor con aquellos hombres, se encendió en ira contra David y dijo: ¿Para qué has descendido acá? ¿y a quién has dejado aquellas pocas ovejas en el desierto? Yo conozco tu soberbia y la malicia de tu corazón, que para ver la batalla has venido.” (1 Samuel 17:28).
Eliab mantenía una actitud de desprecio y desacuerdo con su hermano, esto no le favorecía sino que le impedía tener el valor necesario para enfrentar al gigante.
Es una manifestación exterior basada en nuestras experiencias pasadas.
“Fueron oídas las palabras que David había dicho, y las refirieron delante de Saúl; y él lo hizo venir. 32 Y dijo David a Saúl: No desmaye el corazón de ninguno a causa de él; tu siervo irá y peleará contra este filisteo. 33 Dijo Saúl a David: No podrás tú ir contra aquel filisteo, para pelear con él; porque tú eres muchacho, y él un hombre de guerra desde su juventud. 34 David respondió a Saúl: Tu siervo era pastor de las ovejas de su padre; y cuando venía un león, o un oso, y tomaba algún cordero de la manada, 35 salía yo tras él, y lo hería, y lo libraba de su boca; y si se levantaba contra mí, yo le echaba mano de la quijada, y lo hería y lo mataba. 36 Fuese león, fuese oso, tu siervo lo mataba; y este filisteo incircunciso será como uno de ellos, porque ha provocado al ejército del Dios viviente. 37 Añadió David: Jehová, que me ha librado de las garras del león y de las garras del oso, él también me librará de la mano de este filisteo.” (1 Samuel 17:31-37).
C. La actitud correcta en las pruebas es “sumo gozo”.
Esto no es masoquismo espiritual. No significa necesariamente tener una risa de “oreja a oreja” cuando se experimentan dificultades.
Gozo es un profundo sentimiento de la aprobación de nuestro actuar por parte de Dios, una seguridad de saberse en los caminos y en la voluntad de Dios más allá de todo dolor humano que se pueda estar experimentando.
“Mi vida está de continuo en peligro, Mas no me he olvidado de tu ley. Me pusieron lazo los impíos, Pero yo no me desvié de tus mandamientos. Por heredad he tomado tus testimonios para siempre, Porque son el gozo de mi corazón.” (Salmo 119:109-111).
Un proverbio cristiano dice así: “Dios decide por las circunstancias que pasaremos, nosotros decidimos como lo pasaremos.”
III. Las pruebas son necesarias para forjar el carácter del cristiano.
A. Hoy por hoy hay muchos creyentes, pero es triste ver la falta de carácter cristiano en el pueblo de Dios.
Alguien dijo: “Un creyente sin carácter es como un automóvil si amortiguadores, cualquier bache en el camino lo estremece fuertemente.”
B. Cuando se habla de “la prueba de vuestra fe” no se refiere solo al proceso de la prueba sino a la parte probada resultante de este proceso.
D. Un espíritu paciente es el indicativo de un carácter cristiano maduro.
“Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor.” (Salmos 40:1)
“También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles, que seáis pacientes para con todos.” (1 Tesalonicenses 5:14).
“Porque todo sumo sacerdote tomado de entre los hombres es constituido a favor de los hombres en lo que a Dios se refiere, para que presente ofrendas y sacrificios por los pecados; para que se muestre paciente con los ignorantes y extraviados…” (Hebreos 5:1-2).
IV. Las pruebas son necesarias para alcanzar la perfección cristiana.
A. En este proceso ascendente actitud, carácter se suma entonces una palabra temida por los seres humanos “perfección”; temida porque la imperfección es el escudo que utilizamos para justificar nuestras negligencias y “suavizar” en nuestra conciencia la maldad de nuestros pecados.
B. La perfección cristiana es necesaria para una vida exitosa. Nuestro Señor Jesucristo es el ejemplo de una vida exitosa: una vida que cumple el propósito de Dios. Nuestro Señor experimentó pruebas.
“Y aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia; 9 y habiendo sido perfeccionado, vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen…” (Hebreos 5:8-9).
C. La perfección cristiana es un mandato.
“Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.” (Mateo 5:48).
D. Las pruebas son el medio para obtener esta perfección.
QUEREMOS ser perfectos, DEBEMOS ser perfectos, NECESITAMOS ser perfectos y las pruebas son el camino.
“El discípulo no es superior a su maestro; mas todo el que fuere perfeccionado, será como su maestro.” (Lucas 6:40).
“Por tanto, dejando ya los rudimentos de la doctrina de Cristo, vamos adelante a la perfección; no echando otra vez el fundamento del arrepentimiento de obras muertas, de la fe en Dios…” (Hebreos 6:1).
CONCLUSIÓN
Amados hermanos, las pruebas son NECESARIAS en nuestras vidas, entendamos que por medio de ellas, Dios forja nuestro carácter a la imagen de Cristo. Cuando seamos probados entendamos que Dios está obrando sus propósitos en nosotros.
© David Gutiérrez. Todos los derechos reservados.
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Pastor en Cuba, Presbítero y Secretario Tesorero del Distrito Camagüey. Asociado Universitario con Global University de Springfield, U.S.A