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FERNANDO CHACÓN
EXPERTO EN ZAPATILLAS
SEVILLA
Todo corredor que se precie tiene una cita con San Silvestre cada 31 de diciembre. Podríamos acabar el año de cualquier manera, pero una vez más elegimos el lactato como fiel compañero. Son carreras, por lo general, de menos de 10 kilómetros en las que corremos al límite buscando, quizá, despedir el año siendo un poco más rápidos que el anterior. A continuación os dejamos las diez mejores propuestas de zapatillas para correr tu San Silvestre más rápida.
Adidas Takumi Sen 10
Una propuesta salvaje de la casa germana. Se trata de un híbrido entre lo que antaño era una zapatilla voladora y lo que son a día de hoy, es decir, una zapatilla con varillas de carbono, compuesto Lightstrike Pro en toda la mediasuela y un perfil 33×26 que da la sensación de llevarte pegado al suelo. Es una zapatilla con mucho nervio, que responde de inmediato a lo que se le pide, con una suela minimalista que sin embargo no pierde adherencia bajo ninguna circunstancia y que solo adolece de falta de estabilidad. Esto es algo comprensible, pues tenemos un conjunto de tan solo 196 gramos.
Asics Metaspeed Sky Paris
Sin duda una de las zapatillas más interesantes del mercado. La habéis visto como alternativa para correr maratones a ritmos rápidos, medias, etc, pero es tal su pegada que si le pones un 5k por delante se lo meriendan con la misma destreza. La Asics Metaspeed Sky Paris una zapatilla con un chasis muy particular, tanto que te da la impresión de tener un drop negativo o, lo que es lo mismo, tienes la sensación de llevar más elevados los metatarsos que el talón. Verdaderamente no es así, pues tiene un drop de 5 mm (40×35 mm). La culpable es una placa de carbono rígida y recta que no negocia otra cosa que ir a tope.
Brooks Hyperion Elite V4
La propuesta de Brooks es una zapatilla de competición y con placa de carbono, sí, pero también bastante versátil. No es una zapatilla muy exigente, pues su rocker no es muy elevado aunque sí que es realmente ligera, pues deja la báscula por debajo de los de 200 gramos. Lo bueno es que la Brooks Hyperion Elite v4 es una zapatilla con bastante recorrido a la que podrás sacar en días de series, rodajes a ritmo y carreras de distancias más largas.
Hoka Rocket X2
Una de mis zapatillas favoritas, y precisamente lo es por su pegada. Una zapatilla con una geometría agresiva, un tacto perfecto, ligera, con mucha tracción y una mediasuela con mucho rebote. Aún no ajustando sus alturas a los límites legales, también es una zapatilla que podrás estirar hasta la media maratón en muchos casos, aunque para utilizarla en maratón vas a tener que poseer dos buenas piernas. Pero lo dicho, para la San Silvestre la Hoka Rocket X2 es una opción perfecta.
New Balance Supercomp Pacer V2
Una zapatilla relativamente poco conocida por el gran público. A la sombra de la Supercomp Elite, tenemos esta versión aún más radical que precisamente está pensada para estos menesteres. Un perfil más bajo (35×27), mismo compuesto de mediasuela y por supuesto una placa de carbono son los ingredientes para ponerte a mil por hora en distancias inferiores a diez kilómetros. Lo mejor es que es muy estable, con lo que no vas a estrenar el año nuevo con las piernas colgando.
Mizuno Rebellion Pro 2
Si te gusta lo excéntrico la Rebellion Pro 2 es tu zapatilla. Gracias a un chasis con doble curvatura la Rebellion Pro 2 alcanza perfiles de hasta 56 milímetros lo que te dará bastante ventaja con respecto a otras zapatillas con placa de carbono. La pega es que son bastante exigentes con la musculatura y que no todo el mundo será capaz de hacer migas con este exigente perfil. Si eres capaz de mover esta bestia desde luego que vas a volar.
Joma R5000
No sé qué le deparará el nuevo año a la marca toledana Joma, pero desde luego que el año que se va lo acaba envuelta en un halo de gracia. Y una de las culpables de este gran año es la zapatilla R.5000. Es una apuesta por la velocidad total, perfil bajo, mediasuela con compuesto de mucho rebote y placa de carbono. Se une a todo esto un upper muy bien ejecutado, una gran estabilidad y materiales que en nada están acordes con su recortado precio.
On Cloudboom Strike
Quizá este año que finaliza sea el último en el que la marca suiza nos suene más por moda que por rendimiento. Si ya nos han dejado buenas perlas en forma de zapatillas increíbles, en un futuro seguramente sean aun mejores. Para muestra un botón, o unas On Cloudboom Strike, una zapatilla que se atreve a probar casi de todo y muy raro. Los helvéticos se han atrevido a dividir la mediasuela en dos partes, la propia mediasuela, y una gruesa plantilla hecha del mismo material. Con eso no solo consigue una respuesta espectacular en cuanto a rebote sino que burla el reglamento de la World Athletics en cuanto a alturas, lo que obviamente nos da un plus de rendimiento.
Puma Fast R Nitro
Puma, al igual que On, y aunque es una marca muy veterana, está de reestreno en el mundo del atletismo. Para no pasar desapercibida, Puma ha optado por presentar un modelo completamente fuera de la norma. La mediasuela está dividida en dos secciones, con lo que la placa de carbono queda al descubierto en la zona del arco. No solo eso, sino que la misma placa sobresale por la puntera a fin de hacer más palanca. El resultado es una zapatilla rabiosa, de esas que ajustan a morir al pie, que se agarra al suelo y, que a pesar de tener un alto perfil, da la sensación de estar pegada al suelo.
Saucony Endoprhin Elite
Mi zapatilla fetiche. Lo mismo es capaz de afrontar una maratón que hacerte volar en un 5k. Su secreto es una mediasuela que tiene un gran rebote, un peso contenido, un chasis muy agresivo que se combina con una estabilidad portentosa. Con esta combinación la Endorphin Elite puede ser exigente en cuanto a la postura que exige al correr debido a su chasis extremadamente curvado, pero a la vez es muy permisiva con problemas de pisada debido a su estabilidad. Esto la convierte en una zapatilla que puede correr muy rápido y largo.