La tradicional San Silvestre zaragozana, que reúne a corredores profesionales y aficionados en torno a un recorrido festivo de casi cinco kilómetros por el centro de la ciudad para dar la bienvenida al nuevo año, cumple este 2024 su XIX edición, en la que se ha batido récord de inscripción y se ha logrado una mayor paridad entre los asistentes.
El concejal delegado de Deportes del Ayuntamiento de Zaragoza, Félix Brocate, ha dado a conocer este viernes las novedades en la edición de este año, que mantendrá su recorrido habitual. Brocate ha expresado que, en esta ocasión, se ha alcanzado el cupo de 5.000 participantes media hora antes del cierre de las inscripciones.
De los inscritos, un 8 % (aproximadamente 400 deportistas) corresponden a atletas profesionales o federados, mientras que el resto incluyen a todo tipo de corredores aficionados. Del total, un 46 % de los participantes serán mujeres, unas cifras que continúan aumentando año tras año, según Brocate, y que contrastan con los comienzos de la prueba.
“Cuando empezamos, hace 20 años, el tanto por ciento de mujeres que corrían no llegaría a un 5 % o 6 %. Esto nos dice que el deporte es para todos, siempre lo ha sido, pero cada vez lo es más”, ha señalado el concejal. La inscripción, que ha costado dos euros para los participantes, supondrá un donativo para la Asociación Parkinson Aragón y la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer (AFEDAZ).
Una de las corredoras habituales es Cristina Espejo, ganadora de las últimas tres ediciones de la competición en categoría femenina y que ha participado en la presentación de la prueba desde el edificio consistorial. “La San Silvestre me ha visto crecer, me ha visto correr desde categorías menores y dar el salto al deporte. Es precioso. Puedo decir que es la carrera más he corrido en mi vida”, ha expresado Espejo.
La edición de este 31 de diciembre de 2024 seguirá el itinerario habitual: con comienzo y fin enfrente del Teatro Principal de Zaragoza pasando por el Coso, el ‘puente de hierro’ y vuelta a la zona ribereña para volver por el puente de Piedra y terminar al final de la calle San Vicente de Paúl.
La carrera dará comienzo a las seis de la tarde, y a las ocho y cuarto ya estará reestablecido previsiblemente el tráfico habitual en la zona. Otra de las constantes, el uso de disfraces, también tendrá premio al mejor vestuario, entre gran parte de los corredores populares que emplean estos trajes de manera recreativa.
