Domingo 10 de Noviembre de 2024, 10:27
Hace 23 años, Stephen Hawking propuso la idea del fin de la humanidad, tema que retomó un año antes de su fallecimiento en el documental “The Search for a New Earth” (2017). Según el astrofísico, serían las acciones humanas las que acabarían con la Tierra tal como la conocemos. El año 2600 sería la fecha en la que el planeta quedaría completamente despoblado y sin recursos.
Esta visión fue considerada por muchos científicos como un pronóstico sombrío, pero recientemente la NASA ha respaldado esta teoría, enfatizando que si no se implementan políticas globales para reducir la contaminación, las consecuencias podrían ser catastróficas en menos tiempo del anticipado.
¿Qué planteaba Stephen Hawking sobre el fin de la humanidad?
Stephen Hawking sostenía que el cambio climático representaba la mayor amenaza para la vida, advirtiendo que el incremento constante de las temperaturas podría eventualmente convertir a la Tierra en “una bola de fuego”.
En su análisis, el renombrado científico británico señalaba también los riesgos de la sobrepoblación, que resultaría en la disminución de recursos naturales y un incremento en la demanda de energía y alimentos. Esto llevaría a la utilización de más tierras para cultivo, destruyendo así fuentes vitales de oxígeno como los bosques y selvas tropicales.
Además, la contaminación de ríos y cuerpos de agua dulce, junto con el derretimiento de glaciares, eliminaría las fuentes de agua necesarias para el consumo humano diario, un aspecto fundamental para la supervivencia.
¿Qué dijo la NASA al respecto?
Buscando llevar concientización sobre esta temática a toda la población, la NASA comenzó a difundir y a poner en alerta sobre las consecuencias visibles de los cambios meteorológicos extremos, como las inundaciones, los incendios forestales y los períodos de sequía, entre otros.
En su cuenta oficial, la agencia estadounidense tiene expuesta una explicación clara de lo que sucederá con el paso del tiempo si no se toman medidas rápidas. “La tendencia de calentamiento actual es diferente porque es claramente el resultado de las actividades humanas desde mediados del siglo XIX y avanza a un ritmo que no se ha visto en muchos milenios recientes”, comenzó mencionando la entidad.
“Es innegable que las actividades humanas produjeron los gases atmosféricos que atraparon una mayor parte de la energía del Sol en el sistema de la Tierra. Esta energía adicional calentó la atmósfera, el océano y la tierra, y se produjeron cambios rápidos y generalizados en la atmósfera, el océano, la criósfera y la biosfera”, continuó remarcando.
“Los científicos demostraron la naturaleza de atrapar el calor del dióxido de carbono y otros gases a mediados del siglo XIX. Muchos de los instrumentos científicos que usa la NASA para estudiar nuestro clima se enfocan en cómo estos gases afectan el movimiento de radiación infrarroja a través de la atmósfera. A partir de los impactos medidos de los aumentos de estos gases, no hay duda de que el aumento de los niveles de gases de efecto invernadero calienta la Tierra en respuesta”, concluyó la NASA.