Lo que parecía una escena sacada de una novela de ciencia ficción se hará realidad. Tal y como ha confirmado la NASA, la Tierra contará con una mini luna temporal. Durante dos meses, un nuevo satélite natural acompañará a nuestro planeta, convirtiéndose en uno de los fenómenos astronómicos más sorprendentes del año.
¿Qué son las mini lunas?
Una «mini luna» es un pequeño asteroide o fragmento de roca atrapado temporalmente por la gravedad terrestre. Estos cuerpos celestes orbitan la Tierra durante un corto tiempo antes de escapar al espacio. A diferencia de la Luna, que es nuestro satélite natural permanente, las mini lunas son pasajeras.
Estos objetos tienen dimensiones reducidas, generalmente de pocos metros de diámetro. Su captura es un evento poco frecuente. Un ejemplo es el asteroide 2020 CD3, que fue una mini luna de la Tierra durante varios años.
El pequeño asteroide que se convertirá en la mini luna de la Tierra
A diferencia de nuestra habitual luna, esta será mucho más pequeña y no tendrá efectos significativos sobre la Tierra. Se trata de un pequeño asteroide denominado 2024 PT5. Será capturado temporalmente por la gravedad de la Tierra antes de regresar a su órbita en el cinturón de asteroides que sigue a nuestro planeta alrededor del Sol.
El asteroide 2024 PT5 proviene del cinturón de asteroides Arjuna, una región de rocas espaciales que orbitan de manera similar a la Tierra. Según el profesor Carlos de la Fuente Marcos, de la Universidad Complutense de Madrid, algunos objetos de este cinturón pueden acercarse lo suficiente a nuestro planeta como para ser atrapados temporalmente por su gravedad. Como consecuencia, detalle, se convierten en mini lunas.
Este asteroide estará cerca de la Tierra durante aproximadamente dos meses, pero no completará una órbita completa antes de alejarse nuevamente hacia el espacio. Cabe recordad que este fenómeno no será visible a simple vista. Sin embargo es una oportunidad única para aprender más sobre las interacciones gravitacionales entre la Tierra y los cuerpos cercanos.
En los próximos meses, aunque no la veamos, sabremos que una segunda luna nos acompaña en el cielo, recordándonos que el cosmos siempre tiene sorpresas reservadas para nosotros.