La salud de las personas no tiene que ver con el aspecto del cuerpo, “si bien es cierto que hay mayor incidencia de diabetes en personas con pesos altos, eso no quiere decir que toda la gente con sobrepeso va a ser diabética. Hay estadísticas que indican que 12% de quien está en el rango de obesidad presentan diabetes en algún momento de su vida; estás hablando de que 80% no; esto no quiere decir que la gordura sea la causa”, planteó en entrevista con MILENIO Raquel Lobatón, nutrióloga, educadora en diabetes y proveedora de confianza corporal.
“Lo que buscamos es estar bien, no la delgadez, que no es sinónimo de salud, de la misma forma la gordura no es igual a enfermedad. Hay personas delgadas que tienen diabetes, colesterol y triglicéridos; hay personas gordas que no tienen ninguna de estas enfermedades”, dijo la autora del libro Tu peso no es el problema (Grijalbo).
“Quizá las personas en pesos más altos presentan diabetes por otras cuestiones, como que han intentado en su vida perder peso, haciendo dietas con ciclos de subidas y bajadas. Hay estudios que demuestran que el weight cycling se asocia a mayor riesgo de diabetes, entre otras cosas. También son personas que retrasan su visita al doctor porque saben que es su culpa por estar gordas y por eso presentan estas enfermedades con mayor frecuencia”, precisó Lobatón.
Como educadora en diabetes sabe que si la enfermedad no se aborda bajo el enfoque sólo del peso, hay un mejor pronóstico.
“Cuando a la persona se le dice que para mejorar su diabetes tiene que bajar de peso, se estresa, porque está con hambre y siente que es su culpa, y cuando deje la dieta va a recuperar el peso. Mi tratamiento está orientado a mejorar la condición de glucemia, con estrategias de alimentación, prácticas de cuidado, monitoreo, patrones de sueño y actividad física”, abundó.
“La diabetes es una enfermedad compleja, multicausal, que tiene que ver con varias aristas, está influida por los determinantes sociales de salud, con la pobreza, desigualdad, estrés crónico e inseguridad alimentaria. Todos estos factores pueden influir en el desarrollo de enfermedades como la diabetes”, aseguró.
Un libro y guía
Tu peso no es el problema “es una guía para tener una mejor relación con la comida, es un libro que intenta ayudar a las personas a salir del mundo de las dietas, de la restricción y del rechazo hacía el propio cuerpo”, compartió la autora.
“El libro surgió a raíz de una transformación profesional y personal que tuve hace seis años. Después de 20 años de trabajar como nutrióloga tradicional que prescribía pérdida de peso, dar dietas, me di cuenta de que las personas que venían a mi consulta y que perdían peso, de manera inevitable terminaban recuperándolo después de dos o más años, con una peor relación con la comida”, contó.
Notó que la gente regresaba además con más culpa al comer, con miedo, atracones, odiando más su cuerpo, con menos entendimiento de lo que pasaba con el cuerpo. “Sentí que algo estaba haciendo mal, estuve a punto de retirarme y hacer algo más, y descubrí el enfoque de salud en todas las tallas”, explicó.
Desde los años 80 en Estados Unidos existe este enfoque, aseguró la nutrióloga, que demuestra que 95% de las personas que pierden peso en cualquier intervención lo recupera en un periodo de entre dos a cinco años, y que dos terceras partes suben más de lo que habían bajado.
“Hacer dieta es el factor número uno de riesgo para desarrollar un trastorno de la conducta alimentaria, las personas se sumergen en ciclos interminables de dietas y nunca acaban.
Hay que promover la salud y mejorarla aunque no bajen de peso, si una persona empieza a dormir mejor, deja de fumar, va a terapia, come mejor que no necesariamente es menos, mover su cuerpo de forma placentera por los beneficios que el ejercicio le proporciona, va a mejorar”, puntualizó.
Para Lobatón la experiencia le deja claro que la diversidad corporal es parte de la naturaleza, “así como hay personas más altas, bajas, morenas, rubias, hay gente con mayor o menor peso. En el libro hablo de la cultura de la dieta que parte de muchas premisas que nos son verdades, una de ellas es la universalidad de la delgadez, como si todas las personas estuvieran destinadas a ser delgadas y si no, están mal”, aclaró.
La alimentación debe ser suficiente para cubrir las necesidades energéticas y nutrimentales, y que se adecue a gustos y preferencias de la persona.
La autora Raquel Lobatón también tiene el audiolibro Tú no le fallaste a las dietas, las dietas te fallaron a ti, disponible en plataformas.
MGR