La Universidad de Penn State ha llevado a cabo una investigación en el seno de su Departamento de Ciencias de la Nutrición. Esta ha podido concluir que el consumo de nueces pecanas puede no sólo mejorar los niveles de colesterol de las personas, también el de la calidad de la dieta en general.
Así lo ha concretado la propia universidad en su página web. Lo resultados del estudio, que están disponibles en la revista American Journal of Clinical Nutrition, apuntan que, del total de participantes del estudio, aquellos que sustituyeron los snacks por este tipo de nueces mejoraron la calidad de su dieta en un 17%.
Fueron un total de 138 personas adultas de entre 25 y 70 años las que participaron en el estudio. Se las dividió en dos grupos, uno de ellos siguió con su dieta habitual; el otro, en lugar de sus refrigerios habituales, empezó a tomar nueces pecanas.
En palabras de la profesora asociada de ciencias de la nutrición en Penn State y coautora del estudio Kristina Petersen, “reemplazar los bocadillos típicos por nueces pecanas mejoró factores de riesgo clave para enfermedades cardíacas, como los niveles de colesterol en sangre y la calidad de la dieta”.
Sus declaraciones, que han sido publicadas en la web de la institución educativa de Penn State, no cesan ahí. La experta ha precisado que los resultados de este estudio “se suman a la amplia evidencia que respalda los beneficios cardiovasculares de los frutos secos”.
Asimismo, ha indicado que la investigación de la que ha formado parte “aporta información adicional sobre cómo los adultos pueden incorporarlos a su dieta para mejorar la calidad general de la misma“.
