Javi Alamañac es de Sabiñánigo, tiene 17 años recién cumplidos, estudia primero de Bachiller de ciencias en el IES San Alberto Magno. De pequeño jugaba al fútbol, pero un día probó el atletismo y le enganchó tanto que hoy cuenta en su haber con varios pódiums en diferentes campeonatos y pruebas. Esta semana en Bilbao ha hecho marca en 1.500 metros, 3:54.02, y en 800 metros la tiene en 1:50.71. Le gustaría dedicarse al atletismo, sigue entrenando con ahínco, pero no descuida sus estudios que los ve encaminados hacia la biotecnología, la química o la nutrición y rendimiento.
¿Por qué elegiste el atletismo?
—Cuando era pequeño recuerdo que al principio no quería ir a atletismo, sólo me gustaba el fútbol. Pero un año mis amigos me convencieron, fui a probar y me sorprendió. Estuve con el fútbol y el atletismo durante cinco años y aunque al principio me atraía más el fútbol, poco a poco el atletismo se fue ganando un sitio. En el atletismo encontré momentos y emociones que en el fútbol no encontraba. La sensación de conseguir tus objetivos después de todo el esfuerzo, trabajo y sacrificio durante la temporada o varias temporadas no se puede explicar con palabras. Y me atrajo el buen ambiente que hay en la pista porque todos sabemos lo sacrificado que es este deporte y, antes que rivales, todos somos amigos. El atletismo parece que sólo es un deporte individual, pero es más colectivo de lo que parece. Soy muy inconformista y el atletismo es un deporte donde el 90 % de las veces terminas una carrera y no estás satisfecho porque querías mejorar más.
¿A qué te saben los podios?
—Los podios siempre saben bien y siempre quieres estar en lo más alto. Si al final subes, es que algo estás haciendo bien y que vas por buen camino, pero en algunas ocasiones los podios no son lo más importante. Hay muchas carreras que preferiría quedarme último para mejorar mi marca o hacer la marca que quiero, pero no es algo en lo que piense mucho. Simplemente me centro en entrenar y mejorar, pero siempre disfrutando que es lo más importante. Si haces esto y tienes paciencia, los podios acabarán llegando.
Pasar de correr 600 y 1.000 metros a 800 y 1.500, ¿fue fácil?
—No me resultó muy fácil. El primer invierno lo pasé muy mal, entrenaba mejor que el año anterior, pero no me salían las marcas. Recuerdo que hablando con mi entrenador me decía que no lo entendía, entrenaba mucho mejor y en vez de progresar parecía que iba para atrás, me costó cogerle la medida al 800 y al 1.500. Pero esto son cosas del deporte, hay veces que por el motivo que sea las cosas no salen, lo importante es ser paciente y disciplinado.
En el regional sub-18 del pasado febrero fuiste primero en 800 y mejoraste tu marca. ¿Estás cumpliendo tus objetivos?
—Vamos por el buen camino, aunque mentiría si dijera que estoy contento con mis marcas. Sé que estoy para mejorarlas. Al nacional de finales de febrero llegué con un virus y tampoco pude demostrar todo el trabajo de invierno, pero el objetivo marcado es el europeo sub-18, que se celebra del 18 al 21 de julio en Eslovaquia. Es complicado porque somos muchos y sólo dos pueden ir en cada prueba. Hay gente muy buena que se va a quedar fuera, esperemos que no me toque a mí. Todo se decidirá en el Campeonato de España al aire libre, que se celebra el 6 y 7 de julio.
¿Cómo son tus entrenos?
—Hay un poco de todo, días más tranquilos que sirven para recuperar y asimilar entrenos y otros más intensos donde toca exigirse al máximo. A principio de temporada suelen ser muchos kilómetros, conforme se van acercando los campeonatos se van convirtiendo en series más cortas e intensas.
¿Por dónde pasan tus objetivos?
—A corto plazo, poder disputar el europeo sub-18, más a largo plazo no tengo nada pensado. Prefiero centrarme y vivir el día a día, lo que tenga que venir ya vendrá. Fuera de lo deportivo disfrutar de este deporte y de todos los momentos que permite vivir junto a las personas que me rodean.
¿Te ves dedicándote profesionalmente a este deporte?
—Es algo que me gustaría, el problema es llegar y mantenerse, el atletismo es un deporte muy difícil y los resultados lo son todo. Hay que ser muy constante y disciplinado además de tener un buen plan de entrenamientos. Muchos atletas soñarán con esto, pero la realidad es que muy pocos consiguen dedicarse al atletismo plenamente. Además, son muchos gastos hasta que llegas, zapatillas, ropa, fisio, nutrición…
Y de estudios, ¿cómo vamos?
—Vamos bien, no queda otra, sólo con el atletismo no se llega a ningún lado. Los estudios son muy importantes y es lo primero para poder asegurarte un buen futuro. Pero por mucho que haya que estudiar si te organizas bien, puedes sacar tiempo para entrenar sin problemas.
Pero no todo será atletismo ni estudios. ¿Cuál es tu hobby o hobbies?
—Pues como cualquier otro chico de 17 años, me gusta salir con mis amigos a tomar algo o a dar una vuelta. En verano le damos bastante al pádel. También me gusta ver series, películas o jugar algún videojuego y estar con mi familia. Es importante pasarlo bien y desconectar del deporte porque si no acabas machacado tanto mentalmente como físicamente.
