(CNN) — La tormenta tropical Francine se acerca a la categoría de huracán a medida que avanza hacia la costa del Golfo, donde algunas comunidades de Luisiana ya han empezado a evacuar y a cerrar de golpe sus compuertas en previsión de la probable llegada a tierra de la tormenta este miércoles.
Francine podría convertirse en huracán este martes y alcanzar la categoría 2 al tocar tierra. Una tormenta de esa fuerza es capaz de infligir grandes daños a los hogares y cortes de energía generalizados, lo que llevó al gobernador de Luisiana a emitir una declaración de emergencia en todo el estado antes de su llegada.
Este lunes por la noche, Francine se encontraba a 200 km de la frontera entre Texas y México, con vientos máximos sostenidos de 105 km/h, a solo 14 km/h de convertirse en huracán, según el Centro Nacional de Huracanes.
El paso de Francine podría provocar inundaciones, fuertes vientos y mareas tormentosas potencialmente mortales en algunas zonas de las costas de Texas y Luisiana. Es probable que los efectos más graves se dejen sentir en el sur de Luisiana alrededor de la hora en que toque tierra.
Más de 5 millones de personas están bajo alerta por inundaciones en la costa del Golfo. Se espera que la tormenta traiga precipitaciones totales de 100 a 200 mm desde la costa del noreste de México hasta el sur de Mississippi, y algunos lugares podrían ver hasta 300 mm.
Además de un aviso de huracán en Luisiana, se han emitido avisos y alertas de tormenta tropical a lo largo de una franja de la costa de Luisiana y Texas. También se ha emitido un aviso de marejada ciclónica desde High Island, Texas, hasta la desembocadura del río Mississippi.
Aunque se arrastraba hacia el norte a 8 km/h alrededor de 10 p.m. hora del centro de Estados Unidos de este lunes, la tormenta se espera que aumente la velocidad este martes.
Todavía es demasiado pronto para determinar exactamente donde Francine golpeará Louisiana y es posible que la tormenta podría ser más fuerte de lo previsto. La tormenta podría ser alimentada por el agua muy caliente del océano –un síntoma del calentamiento del planeta por la contaminación de los combustibles fósiles– que esencialmente actúa como combustible de avión para las tormentas tropicales.
Los preparativos ya están en marcha en Luisiana, donde las comunidades costeras están familiarizadas con el desastre que pueden causar este tipo de tormentas. El gobernador Jeff Landry dijo este lunes que ya ha pedido a la Agencia Federal de Gestión de Emergencias que se prepare para ayudar.
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Las órdenes de evacuación obligatoria están en vigor en la parroquia de Cameron, en Luisiana, según informó un funcionario en las redes sociales. Tanto las evacuaciones obligatorias como las voluntarias se ordenaron más al este, en la localidad de Grand Isle, en la parroquia de Jefferson, que fue diezmada por la tormenta de categoría 4 Ida en 2021.
Algunas parroquias, entre ellas St. Mary y Terrebonne, comenzaron a cerrar compuertas y a distribuir sacos de arena este lunes. La parroquia de Terrebonne también declaró el estado de emergencia, según un comunicado de prensa.
Las escuelas están cerradas en varias parroquias de Luisiana este miércoles y este jueves, incluyendo Jefferson, Terrebonne y Orleans, que abarca Nueva Orleans.
En Mississippi, los habitantes de la ciudad de Pass Christian han comenzado a evacuar voluntariamente.
Qué esperar a lo largo de la trayectoria de Francine
Los impactos de Francine comenzarán a sentirse incluso antes de su llegada y pueden durar hasta finales de esta semana, ya que empuja en tierra y comienza a debilitarse.
“Se espera que Francine traiga fuertes lluvias y el riesgo de inundaciones repentinas considerables a lo largo de la costa del noreste de México, las costas del extremo inferior y superior de Texas, gran parte de Luisiana y Mississippi hasta este jueves por la mañana”, dijo el Centro Nacional de Huracanes.
(Crédito: CNN Weather)
Ya este martes, los vientos con fuerza de tormenta tropical comenzarán a azotar partes de las costas del noreste de México y el sur de Texas. La marejada ciclónica y el fuerte oleaje también podrían causar pequeñas inundaciones en la costa de México a principios de esta semana.
La marejada ciclónica comenzará a aumentar a medida que Francine se acerque a tierra, generando que zonas normalmente secas se inunden con varios metros de agua. Algunas partes de la costa central de Luisiana podrían sufrir las inundaciones más graves, con niveles de marejada que podrían alcanzar hasta 3 metros por encima de lo normal.
Este lunes se emitió una alerta de marea de tormenta para las zonas costeras del extremo oriental de Texas a través de Luisiana y Mississippi.
Las fuertes lluvias también representan una amenaza significativa, comenzando en partes de Texas y el noroeste de México este lunes y moviéndose más hacia el oeste de la costa del Golfo este martes. Texas recibirá la mayor parte de sus fuertes lluvias a principios de esta semana, pero algunas de las condiciones más torrenciales podrían esperar hasta la noche de este martes para Luisiana.
La tormenta debería debilitarse rápidamente a medida que se desplaza hacia la costa este miércoles, pero se espera que las precipitaciones empapen partes de la parte baja y media del valle del río Mississippi durante el resto de la semana. La lluvia se desplazará hacia el norte a lo largo del río Mississippi este jueves, una reposición potencialmente bienvenida a los niveles de agua del río actualmente bajos.
Aunque Francine se desplazará a finales de semana, en el Atlántico podría haber más problemas.
Otras dos zonas del Atlántico abierto tienen una probabilidad media de desarrollarse en los próximos días, según el centro de huracanes. Aún faltan días para que se desarrolle cualquier posible sistema tropical de cualquiera de ellas, por lo que es demasiado pronto para especular sobre dónde podrían acabar.
