La vicepresidenta Kamala Harris y el expresidente Donald Trump se encuentran en la recta final de las elecciones de 2024. Los candidatos a la presidencia participaron en un único debate en el que respondieron a preguntas sobre sus programas y dejaron claras sus agendas para liderar Estados Unidos.
En esta página, podrá revisar sus propuestas políticas en los temas principales de la campaña, como la materia económica, política exterior, control de armas, salud, educación, inmigración y derechos LGBT+. Seleccione la temática que le interesa para desplegar las propuestas correspondientes. Puede elegir más de una materia para comparar las opciones que presentan los planes de gobierno de ambos.
Harris promete una economía que funcione para todos los ciudadanos estadounidenses, en especial para la clase media y las familias trabajadoras. Su plan económico incluye inversiones en infraestructuras, viviendas asequibles y guarderías, destinadas a crear empleo y aumentar los salarios. Harris busca ampliar los derechos sindicales y la protección de los trabajadores, haciendo hincapié en la negociación colectiva y en la importancia del trabajo sindicado. También planea acelerar la transición a las energías limpias, creando puestos de trabajo en industrias ecológicas y garantizando al mismo tiempo que el crecimiento económico sea integrador y sostenible. Su administración se centrará en reducir el coste de la vida, especialmente en ámbitos como la vivienda y la sanidad, para garantizar que las familias puedan prosperar en una economía equitativa.
El expresidente busca promover el crecimiento económico mediante el apoyo a la independencia energética, la reducción de regulaciones y la mejora de las cadenas de suministro. De igual forma, una de sus principales promesas es establecer altos aranceles de 10 a 20% a los bienes de importación para promover un crecimiento económico. También busca reducir la inflación al controlar el gasto gubernamental y disminuir la deuda nacional. Además, apoya la desregulación para fomentar la inversión y reducir los costos energéticos. De acuerdo con su agenda, la creación de empleos es una prioridad, con un enfoque en reconstruir la base industrial de Estados Unidos y promover la fabricación nacional, especialmente en industrias clave para la defensa. También propone mejorar la competitividad a través de la disminución la burocracia, lo que reformaría el proceso de permisos y aseguraría que las políticas exteriores prioricen los intereses económicos del país.
Harris aboga por un sistema fiscal que ayude a las familias trabajadoras y garantice que los estadounidenses más ricos paguen más impuestos. Según su plan, los recortes fiscales se dirigirían a los hogares de clase media y a los que luchan contra el aumento del coste de la vida. También planea ofrecer créditos fiscales adicionales para ayudar a las familias a hacer frente a gastos esenciales como el cuidado de los niños y la educación. La candidata afirma que los ricos y las grandes empresas tendrían que pagar impuestos más altos para equilibrar la balanza económica, utilizando esos ingresos para financiar programas públicos y reducir la desigualdad.
La agenda de Trump incluye la reducción de impuestos para individuos y empresas. Proponee reducir las tasas del impuesto sobre la renta, hacer permanentes los recortes fiscales de su tiempo en la presidencia y eliminar el impuesto sobre herencias para aliviar la carga financiera de familias y empresas. También pretende simplificar el código tributario y proporcionar más deducciones y créditos para las familias, especialmente aquellas con hijos. Por otra parte, su meta principal es mantener impuestos bajos para impulsar el crecimiento económico y empoderar a los trabajadores y empresas estadounidenses.
En respuesta a la inflación, Harris busca abordar las principales causas, y afirma que luchará contra los “precios abusivos” de las empresas, especialmente en sectores como la vivienda y la sanidad, que, en su opinión, están elevando los costes para las familias. Su administración se centraría en ampliar la producción nacional en sectores clave, reducir la dependencia de las cadenas de suministro extranjeras y estabilizar los precios mediante inversiones estratégicas en infraestructuras y tecnología. Harris también planea reforzar la protección de los consumidores para evitar subidas de precios excesivas y aumentar la transparencia en la fijación de precios, especialmente en los sectores farmacéutico y energético.
Para abordar la inflación, Trump planea frenar el gasto “excesivo” del gobierno (como su campaña lo señala) y reformar las políticas de la Reserva Federal para evitar una inflación prolongada. Su plataforma argumenta que la independencia energética y la reducción de la dependencia del petróleo extranjero ayudarán a bajar los precios de los combustibles, lo que reducirá la inflación general. Propone aumentar la producción nacional, especialmente en los sectores de energía y manufactura, lo que -asegura- estabilizaría los precios y reduciría las presiones inflacionarias.
La política exterior de Kamala Harris se basa en el compromiso de restaurar el liderazgo estadounidense en la escena mundial. Ha colaborado de forma cercana con líderes internacionales para reforzar las alianzas, especialmente con la OTAN y en la región Indo-Pacífica, donde ha mostrado una postura contra las prácticas económicas y las amenazas a la seguridad de China. Harris también daría prioridad a la defensa de la democracia, como demuestra su apoyo a Ucrania frente a la agresión de Rusia. Se compromete a seguir trabajando con socios mundiales para abordar problemas acuciantes como el cambio climático y la competencia tecnológica, especialmente en ámbitos como la inteligencia artificial y los semiconductores. Su administración también mantendría un firme compromiso con la seguridad de Israel, mientras que trabajaría por una solución pacífica en Gaza.
En este punto, Trump ha señalado que busca la “Paz mediante la Fuerza” mediante la reconstrucción del ejército y el fortalecimiento de alianzas con otros países. Planea invertir en tecnologías militares avanzadas, como el escudo de defensa antimisiles “Domo de Hierro” de Israel, y apoyar un mayor salario para los militares. Por otra parte, busca contrarrestar el impacto económico de China y afirma que buscará la paz en el Medio Oriente y en el Indo-Pacífico, mientras se reconstruye la influencia estadounidense a nivel global. Además, apoya modernizar la defensa, restaurar el estatus de Estados Unidos en el escenario mundial y asegurar que la política exterior estadounidense esté alineada con los intereses nacionales.
Harris aboga desde hace tiempo por medidas más estrictas de control de armas. Su plataforma incluye el compromiso de prohibir las armas de asalto y los cargadores de gran capacidad, implantar la comprobación universal de antecedentes y apoyar las leyes de “bandera roja” para mantener las armas de fuego fuera del alcance de individuos peligrosos. Como vicepresidenta, ayudó a aprobar la primera gran ley de seguridad de las armas en décadas, ampliando la financiación para profesionales de la salud mental en las escuelas y proporcionando recursos para programas de seguridad comunitaria. Harris continuaría estos esfuerzos como presidenta, dando prioridad a la seguridad pública y garantizando al mismo tiempo que las fuerzas del orden tengan la formación y el apoyo necesarios para reducir la violencia armada.
La agenda republicana promueve los derechos de la Segunda Enmienda y se opone a los esfuerzos para limitar la posesión de armas. El partido y Trump aboga por hacer cumplir las leyes de armas existentes en lugar de crear nuevas restricciones, y aseguran que los ciudadanos respetuosos de la ley puedan protegerse. El enfoque en este punto sería proteger los derechos constitucionales mientras se promueve la posesión segura de armas, sin mencionar medidas específicas para el control de armas.
El plan sanitario de Harris se centra en ampliar el acceso a una asistencia sanitaria asequible para todos los estadounidenses. Aboga por reducir el coste de los medicamentos con receta y hacer más accesibles los tratamientos críticos permitiendo a Medicare negociar los precios de los fármacos. Harris también se compromete a ampliar los servicios de salud mental, garantizando que todos los estadounidenses puedan acceder a una atención sanitaria mental de calidad. Su plataforma se basa en la Ley de Asistencia Sanitaria Asequible, con el objetivo de cerrar las brechas de cobertura y reducir las primas, mientras que se centra en la atención preventiva para mejorar los resultados generales de salud pública.
En cuanto a la salud, Trump afirma que se pueden reducir los costos de servicios médicos al promover la competencia y la elección del consumidor. Se opone a los programas de salud administrados por el gobierno, prefiriendo empoderar a los mercados privados. La atención médica para los veteranos es un foco de la campaña y propone expandir el acceso a opciones de atención médica para los veteranos, responsabilizar a los empleados del Departamento de asuntos de veteranos y proteger a los denunciantes. Los republicanos también enfatizan la importancia de escuelas libres de drogas y el acceso a la atención médica a través de reformas en lugar de nuevos programas gubernamentales.
La protección de los derechos reproductivos es un punto clave de la plataforma de Harris. Desde la anulación del caso Roe contra Wade, se ha pronunciado a favor de la restauración de las libertades reproductivas a nivel federal. Se compromete a firmar cualquier proyecto de ley que restablezca el derecho al aborto en todo el país y ha participado activamente en la estrategia de la administración Biden para defender estos derechos. Harris ha viajado por todo el país, escuchando a las mujeres afectadas por leyes restrictivas del aborto, y promete bloquear cualquier intento de promulgar una prohibición nacional del aborto.
La agenda republicana es fuertemente pro-vida, con énfasis en una oposición a los abortos tardíos mientras que apoya los derechos de los estados para aprobar leyes que protejan a los niños no nacidos. También proponen avanzar en políticas que apoyen el cuidado prenatal, el control de la natalidad y el acceso a tratamientos de fertilidad. Trump ha tomado crédito por la anulación de Roe contra Wade en la Suprema Corte, y sostiene que los Estados deben decidir sobre el aborto. De igual forma, ha mencionado que apoya el aborto en caso de violación, incesto o cuando sea peligroso para las madres. También ha mencionado que vetaría una ley que prohibiese el aborto en todo el país.
La educación es fundamental en el plan de Harris para reducir la desigualdad y ampliar las oportunidades. Defiende el aumento de la financiación de las escuelas públicas, el incremento salarial de los profesores y la educación preescolar universal para garantizar que todos los niños tengan un buen comienzo en la vida. Harris también apoya la gratuidad de los colegios comunitarios y la ampliación del acceso a la educación superior para los estudiantes de rentas medias y bajas. Su administración se centraría en reducir la deuda de los estudiantes y hacer la educación más asequible en todos los ámbitos, ya que ve la educación como un camino hacia la movilidad económica y el éxito a largo plazo.
Trump busca reformar el sistema educativo eliminando ideologías “woke” como la Teoría Crítica de la Raza y la educación de género en las escuelas, centrándose en cambio en materias fundamentales como la lectura, historia, ciencias y matemáticas. Planea devolver el control de la educación a los estados cerrando el Departamento de Educación y aumentando los derechos de los padres. De igual forma, busca promover una educación patriótica, lo que incluye la enseñanza de la civilización occidental y los principios fundacionales de Estados Unidos. Su campaña también hace hincapié en la seguridad escolar, con apoyo a la mejora de la seguridad en las escuelas y estándares de disciplina más estrictos para los estudiantes violentos.
El plan de inmigración de Harris equilibra una fuerte seguridad fronteriza con una reforma integral. Es partidaria de desplegar más recursos en la frontera, incluidas tecnologías avanzadas de detección para interceptar drogas y traficantes de personas, y de aumentar el número de agentes de seguridad fronteriza. Sin embargo, Harris también reconoce la necesidad de una reforma integral de la inmigración, que incluya una vía a la ciudadanía para los inmigrantes indocumentados que han contribuido a la economía y la sociedad estadounidenses. Su plataforma se centra en arreglar un sistema que no funciona y garantizar que Estados Unidos siga siendo un país que acoge a los inmigrantes.
Una de las principales propuestas de la campaña de Trump es “sellar la frontera con México” y realizar la deportación más grande de inmigrantes en la historia. Sin embargo, no ha detallado cómo se llevaría a cabo este plan. El candidato está comprometido a asegurar la frontera de Estados Unidos, continuar construyendo el muro fronterizo y tomar medidas drásticas contra los carteles que trafican drogas y personas. Ha propuesto la estricta aplicación de las leyes de inmigración para reducir la inmigración ilegal y se oponen a otorgar derechos de voto a inmigrantes indocumentados. Su agenda incluye medidas para prevenir las ciudades santuario, apoyar a las fuerzas del orden y asegurar que los trabajos estadounidenses estén protegidos de los inmigrantes ilegales.
La lucha contra el cambio climático y la degradación del medio ambiente es una de las principales prioridades de la plataforma de Harris. Su plan incluye la transición a energías limpias mediante una inversión de 500.000 millones de dólares en infraestructuras y tecnologías ecológicas que también crearán nuevos puestos de trabajo. Harris pretende convertir a Estados Unidos en líder mundial en la lucha contra el cambio climático invirtiendo en energías renovables, reduciendo las emisiones de carbono y protegiendo los recursos naturales. Su plataforma alinea el crecimiento económico con la sostenibilidad medioambiental, garantizando que la acción climática genere nuevas oportunidades en las industrias emergentes, al tiempo que preserva el planeta para las generaciones futuras. Ha mencionado que no prohibirá el ‘fracking’
La plataforma de Trump busca la conservación ambiental mientras asegura la independencia energética mediante el uso de recursos naturales como el petróleo y el gas natural. Abogaa por esfuerzos de conservación equilibrados que apoyen el crecimiento económico sin restringir en exceso a las empresas y resalta un interés en preservar los tesoros nacionales y la arquitectura pública, con lo que busca que Estados Unidos mantenga un equilibrio saludable entre la preservación ambiental y el desarrollo económico.
Harris defiende los derechos de la comunidad LGBTQ+. Su plataforma incluye la aprobación de la Ley de Igualdad para consagrar protecciones contra la discriminación en ámbitos como la sanidad, la vivienda y el empleo. También es partidaria de ampliar la protección de los derechos civiles de las personas LGBTQ+ y tiene un largo historial de lucha por la igualdad matrimonial, ya que ofició algunos de los primeros matrimonios entre personas del mismo sexo en Estados Unidos. Como presidenta, Harris quiere garantizar que los estadounidenses LGBTQ+ estén plenamente protegidos por la ley.
Trump se opone a la financiación pública de cirugías de cambio de sexo y busca proteger los deportes femeninos al mantener a las mujeres trans fuera de las competiciones femeninas. También pretende revertir las regulaciones del Título IX del presidente Biden, que protegen la identidad de género, y restaurar las protecciones para mujeres y niñas. El partido republicano se opone a lo que llaman “adoctrinamiento de género” en las escuelas y políticas gubernamentales que promueven las transiciones de género.
