No hay dudas de que inteligencia artificial (IA) promete transformar la medicina, pero su implementación genera “dudas” y hasta “preocupación” entre los profesionales de la salud.
Así lo dicen en una reciente encuesta de la plataforma Medscape, el principal sitio de noticias clínicas, realizada a más de 3.000 médicos de Argentina, Brasil y México.
El 84% de los médicos argentinos pide que exista un marco jurídico.
Según el relevamiento, seis de cada diez médicos en Argentina, Brasil y México se muestran optimistas respecto al futuro de la IA en la salud. Sin embargo, el 42% de los profesionales argentinos expresa “mucha” o “alguna” preocupación sobre la posibilidad de que la IA reemplace su criterio clínico.
IA en Salud, pero regulada
El 72% de los médicos argentinos consultados consideran fundamental que el uso de la IA en la medicina esté bajo supervisión gubernamental o de asociaciones médicas. Y el porcentaje alcanza al 84% cuando se consulta por la necesidad de darle un marco jurídico a la inteligencia artificial aplicada a la salud.
Por otro lado, la mayoría de los médicos en los tres países también expresó sus dudas en relación a los posibles riesgos de la IA generativa, como ChatGPT, en el acceso a información médica. El 92% de los médicos en nuestro país considera “muy” o “algo” probable que los pacientes reciban información incorrecta a través de estas herramientas.
Aunque la mayoría de los médicos aún no utiliza la IA en su práctica diaria, un 70% de los profesionales en los tres países relevados indica que contemplan su uso en el futuro cercano. Las áreas donde la inteligencia artificial ya está siendo aplicada por los profesionales de Argentina incluyen la investigación de enfermedades (16%) y las tareas administrativas (13%).
Sin embargo, la utilización de la IA para tareas clínicas sigue siendo objeto de controversia. Si bien un 60% de los médicos está dispuesto a utilizarla para el diagnóstico de afecciones y 45% para orientar el tratamiento, casi un tercio y la mitad del total se oponen respectivamente a esas aplicaciones de la tecnología.
Otro aspecto que se desprende del estudio es la percepción de que la IA podría reducir el riesgo de negligencia médica. En Argentina, alrededor del 60% de los médicos coinciden en que la tecnología podría ayudar a reducir errores humanos.
El 60% de los médicos argentinos se muestra entusiasta sobre las posibilidades asociadas a la aplicación de estas tecnologías, aunque muchos insisten en la importancia de que el control siga siendo del médico a la hora de tomar decisiones críticas.
De cara al futuro
“A principios de año, en una conferencia a la que asistí en el MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts), en Boston, se decía que se están publicando cerca de 100 papers por día sobre IA en la Medicina. La cantidad de aplicaciones que tiene la IA en la Salud es tal que las principales revistas médicas tienen una sección específica sobre el tema”, dice a Clarín el reconocido neurólogo Conrado Estol.
“La inteligencia artificial ya cambió el paradigma de la medicina. En el mundo se usa desde en la fase de asistencia a los pacientes, pasando por los ensayos clínicos, hasta en las etapas previas de investigación”, remarca.
Lo que le resulta “apasionante” de la IA, “con sus recaudos”, es la ayuda diferencial para el diagnóstico.
“Por ejemplo, hubo un ensayo hace pocos meses en los que se evaluaron 300 casos de ‘diagnóstico difícil’ publicados en The New England Journal of Medicine, donde se comparó un programa de Google de IA contra 20 médicos con 10 años de experiencia. El programa fue más preciso en lograr diagnósticos diferenciales”, dice Estol.
“En los últimos días -cuenta- se hizo otra evaluación: se comparó a médicos experimentados y a otros igual de experimentados pero que podían usar IA, contra el programa de IA solo. La IA, solita, fue más eficaz en los diagnósticos. Eso muestra que estamos en un proceso de aprendizaje sobre cómo los profesionales podemos aplicarla a la Salud”.
SC