Este documento está alineado con el Marco Global de Biodiversidad de Kunming-Montreal, y es una necesidad para Haití, al igual que para otros países comprometidos con la preservación de los ecosistemas.
Según el diario digital Haití Libre, la nación caribeña sufre de manera alarmante la pérdida de su biodiversidad, un hecho que representa una gran amenaza para los ecosistemas y el bienestar de la población.
El Gobierno –en opinión del rotativo- debe involucrar a los actores del sector público, el sector privado, la academia y las organizaciones ambientales de la sociedad civil en un enfoque consensuado de la degradación de la biodiversidad.
La fuente argumentó que la biodiversidad en Haití se divide en cuatro dimensiones esenciales: la biológica, salud y población, sociocultural y la socioeconómica.
Al referirse a la dimensión biológica apunta que Haití es un punto clave de biodiversidad, pues posee un ecosistema rico y diverso que es de suma importancia en la región del Caribe.
En materia de salud y la población, explica que la población depende de muchas especies de plantas y animales para satisfacer sus necesidades primarias de salud y medios de subsistencia.
Actualmente, Haití cuenta con un reconocido conocimiento de plantas medicinales, único en el Caribe.
La dimensión sociocultural –señala el rotativo- está estrechamente vinculada a las prácticas tradicionales, en particular a través de la medicina familiar y las creencias populares, como las asociadas con el vudú.
“Los ecosistemas constituyen la base de la economía rural, proporcionando recursos naturales esenciales, al tiempo que desempeñan un papel importante en los servicios ecosistémicos, como la regulación del clima y la gestión del agua”, concluyó Haití Libre.
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