(CNN) – Un incendio en una planta química de Georgia aparentemente causado por un mal funcionamiento del cabezal de rociadores el domingo por la mañana causó evacuaciones y cierres de carreteras en el área, según los funcionarios del condado de Rockdale.
El incidente se desarrolló alrededor de las 5 a.m. ET en BioLab en Conyers, Georgia. El agua del cabezal de rociadores averiado “entró en contacto con un químico reactivo al agua y causó una columna”, explicaron los funcionarios del condado en su sitio web.
CNN se comunicó con BioLab, descrito como un fabricante de productos para el tratamiento de piscinas y spa, para obtener comentarios.
Se produjo un incendio en el techo y los bomberos pudieron contener el incendio, pero el fuego se reavivó horas después, dijo el sheriff del condado de Rockdale, Eric Levett, en un mensaje de video publicado en Facebook.
“Quiero pedirles encarecidamente a todos que difundan la información para mantenerse alejados de esta área en este momento”, dijo Levett. “Está ardiendo bastante. Tratamos de controlar eso, pero al mismo tiempo también tratamos de controlar el tráfico”.
Las carreteras están cerradas en el área y se pidió a los residentes entre Sigman Road y la Interestatal 20 que evacuen. Además, la interestatal está bloqueada en ambas direcciones entre Salem Road y Turner Hill. El sheriff dijo que solicitará ayuda al Departamento de Seguridad Pública de Georgia y a la Patrulla Estatal de Georgia.
Se pidió a los que están al norte de Sigman que se resguarden en el lugar y mantengan las ventanas cerradas.
Los Departamentos de Salud de los Condados de Gwinnett, Newton y Rockdale también pidieron a los residentes cercanos que apaguen el aire acondicionado “para minimizar la exposición a posibles peligros”.
En septiembre de 2020, BioLab sufrió un “evento de descomposición térmica” que también causó un incendio que cerró temporalmente la Interestatal 20.
En su informe final sobre el incidente, la Junta de Seguridad Química de EE.UU. encontró que los fuertes vientos del huracán Laura dañaron el almacén del laboratorio, lo que permitió que el agua de lluvia ingresara al edificio. El agua entró en contacto con una sustancia química y generó una reacción que causó el incendio.
Conyers está a unos 48 kilómetros al este de Atlanta.
