La profesional recomienda organizar los alimentos en un orden específico durante las comidas. Este método, respaldado por estudios de prestigiosas instituciones como la Universidad de Cornell, promete estabilizar los niveles de azúcar en sangre y prevenir enfermedades metabólicas sin necesidad de cambios drásticos en la dieta.
“Muchas personas están atrapadas en una montaña rusa de glucosa, con antojos constantes y cansancio. Liberarse de esto es posible, y puede lograrse en solo unos días”, explica Inchauspé. Según la experta, los picos de azúcar no solo afectan la energía diaria, sino que también están relacionados con enfermedades como diabetes, problemas cardiovasculares y daño en órganos vitales.
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Su método tiene como base un principio sencillo: el orden en el que se consumen los alimentos influye directamente en la forma en que el cuerpo procesa la glucosa. Jessica explica que comer los alimentos en el orden correcto puede reducir los picos de glucosa hasta en un 75%, incluso sin cambiar los ingredientes del plato. Este es el esquema que recomienda:
- Vegetales primero: Su fibra ralentiza la absorción de glucosa y crea una barrera que estabiliza los niveles de azúcar.
- Proteínas y grasas después: Estos macronutrientes preparan el cuerpo para procesar los carbohidratos de forma más eficiente.
- Hidratos de carbono y azúcares al final: Consumirlos al final mitiga el impacto en la glucosa y genera mayor saciedad.
“Debería hacer una camiseta con esto”, bromea la bioquímica, quien asegura que este cambio, aunque pequeño, tiene un impacto enorme.
Inchauspé diseñó un programa progresivo para implementar su método en un mes, con cada semana enfocada en un pilar diferente. Según sus investigaciones, este sistema no solo reduce la inflamación y mejora la energía, sino que también fomenta una relación más consciente con la comida.
El enfoque de Inchauspé va más allá de las tendencias: está sustentado en investigaciones que demuestran cómo pequeños ajustes en la alimentación pueden prevenir enfermedades metabólicas a largo plazo. Al priorizar los vegetales, las fibras actúan como un regulador natural de la glucosa. Por su parte, las proteínas y grasas estabilizan el impacto de los carbohidratos, mientras que el retraso en el consumo de azúcares suaviza la curva de insulina, mejorando la calidad de vida.
“Es un cambio tan simple que parece increíble que tenga un efecto tan grande”, afirma la experta, quien también destaca que su método no implica restricciones severas ni sacrificios extremos, sino un ajuste que cualquier persona puede adoptar en su rutina diaria.
Más allá de controlar la glucosa, el objetivo de Jessica es educar a las personas sobre cómo su cuerpo responde a los alimentos, promoviendo una relación más saludable y equilibrada con ellos. Su “revolución de la glucosa” no solo busca transformar platos, sino también mentalidades.
Para quienes buscan mejorar su salud sin caer en dietas extremas, el método de Inchauspé es un recordatorio de que a veces, los cambios más simples son los más poderosos.