A pesar de las expectativas que lo consideraban como favorito para el galardón, Vinícius quedó en segundo lugar, mientras que Jude Bellingham, Dani Carvajal y Erling Haaland ocuparon el tercer, cuarto y quinto puesto, respectivamente. En señal de protesta, el club merengue decidió no asistir a la ceremonia organizada por France Football y UEFA, donde no estuvieron presentes ningún nominado del equipo ni los directivos.
Una fuente cercana a la organización del club calificó el resultado como “injusto” y “vergonzoso”, llegando a describirlo como “un robo histórico”. Posteriormente, Vinícius expresó su decepción en las redes sociales, afirmando: “Haré 10 veces más si es necesario. Ellos no están listos”. Su destacada actuación en la temporada pasada, donde anotó 24 goles y ayudó al equipo a conquistar laLiga y la Champions League, destacó aún más su exclusión del premio.
Los mensajes de sus compañeros también reflejaron su apoyo. Eduardo Camavinga expresó en X que Vinícius es “el mejor jugador del mundo” y que ningún premio puede cambiar eso. Éder Militão y Aurélien Tchouaméni también se unieron al respaldo, afirmando que la excelencia del jugador no puede ser rechazada. Aunque brilló en su club, tuvo una actuación más discreta en la Copa América, donde Brazil fue eliminado en cuartos de final.
El descontento por la decisión del Balón de Oro fue generalizado. Richarlison, delantero brasilero, lamentó que la premiación no reconociera el talento de Vinícius, enfatizando que el fútbol perdió en este proceso. Marta, leyenda del fútbol brasileño, manifestó su frustración y admiración hacia el jugador en un video en Instagram, demandando un reconocimiento que consideraba merecido. Por su parte, Lucas Paquetá le recordó que su historia y logros son admirables, resaltando que, a pesar de los premios, él sigue siendo el mejor.
