El bizarro Gran Premio de Austria de la temporada pasada en la Fórmula 1 será recordado por la infamia de sus múltiples sanciones. De aquel día serán siempre célebres las confusiones por los límites de la pista, la lluvia de penalizaciones, la protesta de Aston Martin y otro puñado de castigos en tiempo que se impusieron horas después de que terminara la competición, teniendo que revisar un total de 1.200 salidas de pista por escapatorias asfaltadas.
La tensa situación frustró no sólo a los equipos y pilotos, sino también a la propia FIA, que emitió un comunicado que incluía el siguiente comentario: “Para abordar el problema en futuros eventos, renovaremos nuestra recomendación al circuito de añadir una trampa de grava a la salida de las curvas 9 y 10”.
TECNOLOGÍA SEMIAUTOMÁTICA… CON ALGUNA NOVEDAD
Por tanto, esta temporada ya se verán implementadas, acorde a las fotos compartidas por el medio ‘Parc Fermé’, lo que obligará a los pilotos a perder tiempo y no tener que acudir a sanciones posteriores.
En otros lugares del circuito se introducirá ahora la tecnología semiautomática, con un concepto de línea azul que también estará pintada en las salidas de ambas curvas, como ya se usó en algunas zonas de este año en el GP de Barcelona.
El impacto es que hace que sea mucho más fácil para la tecnología de inteligencia artificial diferenciar entre una rueda que está dentro o sobre los límites de la pista en llamadas marginales, donde el blanco del bordillo previamente se mezclaba con la línea blanca que definía el borde de la pista, buscando evitar bochornos como el vivido en la edición pasada por parte de la FIA.
