CAMAGÜEY.- El quinto Festival Internacional de Danzas Folclóricas “Camagua Folk Dance” abrió sus puertas en esta ciudad, que congrega a participantes de 16 países y celebra la diversidad y riqueza de la danza tradicional.
La jornada inaugural comenzó este jueves en el Centro de Convenciones Santa Cecilia, con un evento teórico que combinó historia, análisis y reflexión sobre el arte de la danza.
El programa incluyó la presentación del documental Súlkary clásico, dirigido por Yuris Nórido y Adolfo Izquierdo, una obra conmemorativa por el aniversario 50 del estreno de la pieza maestra de Eduardo Rivero. Este segmento fue seguido por conferencias sobre temas de relevancia cultural como el papel de la mujer en la historia de la danza mexicana y la importancia del coreógrafo.
El intercambio cerró con un panel moderado por el crítico y profesor Ismael Albelo, titulado “Volver a los orígenes desde el siglo XXI”, que contó con expertos como Johannes García y Alfredo O´Farril, Premios Nacionales de Danza, junto con los jóvenes Yoerlis Brunet y Leiván García, representantes de Danza Contemporánea de Cuba y Conjunto Folklórico Nacional.
En sus palabras inaugurales, Fernando Medrano, presidente fundador del festival, destacó el crecimiento del evento desde sus inicios virtuales hasta esta quinta edición totalmente presencial. Asimismo, agradeció el apoyo de las autoridades locales, quienes han facilitado su realización en un contexto marcado por retos económicos y la crisis energética nacional, pero que ha encontrado respaldo en el centro histórico con un “corredor cultural” permanente.
Por su parte, Kenny Ortigas, director provincial de Cultura, expresó su esperanza de que el festival se convierta en un espacio para repensar la danza, propiciar nuevas alianzas y fomentar innovadoras aproximaciones al arte de danzar.
El “Camagua Folk Dance” reúne a estudiantes, bailarines profesionales y expertos hasta el domingo 15 de diciembre, con una agenda que incluye tres concursos de parejas, exposiciones culturales y espectáculos, para consolidarse como una plataforma para el intercambio cultural y la celebración de la danza folclórica a nivel internacional.
