F1: Liam Lawson y los Alpine, las grandes decepciones de China

El neozelandés disputó tres sesiones clasificatorias con Red Bull y en todas quedó eliminado en Q1. En Australia fue 18º y China se ubicó último, tanto en la tanda para el sprint como para la carrera principal. El RB21 no es un súper auto, eso está claro y lo deja en evidencia Max Verstappen, quien apenas logró el cuarto puesto en la clasificación para la carrera del domingo. “Más allá de la degradación, seguimos siendo lentos”, dijo el neerlandés, quien, se sabe, saca a puro talento mucho más rendimiento del que su coche le entrega. Pero de ahí a quedar último…

Marko se mostró indulgente el viernes: “Necesita tiempo, debe tomar ritmo para mostrar su potencial”, dijo el asesor y hombre fuerte de Red Bull. Ya el sábado todo cambió. Después de que Lawson lograra avanzar seis lugares en el sprint, dijo: “Hubo adelantamientos. Ahora espero que su clasificación sea mejor, empiece donde debe comenzar desde Q3 y luchar por puntos”. Un par de horas después, Liam quedó en el fondo de la grilla y el discurso ya fue a lo Marko: “La Fórmula 1 es un deporte competitivo”. La guillotina del expiloto austríaco, por la que tantos pilotos de Red Bull (o su hermano menor Racing Bulls) pasaron, empieza a desempolvarse.

Pero si de decepciones se trata, lo de Alpine es un caso serio. En Australia, el equipo francés no tuvo un buen fin de semana en general, pero Pierre Gasly estuvo en la lucha de los puntos casi hasta el final. El galo fue el único piloto en pista en la primera fecha, después de que Jack Doohan destruyera su A525 en la primera vuelta. En China, todo fue para peor.

Ninguno de sus pilotos logró avanzar a Q2, ni en la clasificación para el sprint ni en la de la carrera principal. En el shootout, el australiano fue 16º y el francés, 17º. Y en la qualy de la carrera larga, Gasly quedó 16º y Doohan 18º, con trompo incluido.

El ritmo de los dos pilotos en ensayos y clasificaciones, tanto en Australia como en China fue muy parejo. De hecho, en la tanda de este sábado en Shanghái, Gasly le ganó por apenas 100 milésimas a su compañero. Esa paridad no se vio, hasta ahora, en carrera. Doohan no duró una vuelta en Melbourne y en el sprint de China tuvo una mala largada y, después, su ritmo no fue consistente. Tuvo una gama de tiempos amplia y variable. Para colmo, cerró la competencia corta con un golpe a Gabriel Bortoleto que le valió una sanción de diez segundos (no cambió nada porque fue último) y la quita de dos puntos en la súperlicencia.

Doohan se quejó del gripo de su Alpine después de la clasificación. Muchos deberán trabajar en el team de Enstone para mejorar el rendimiento de un auto que, al menos en China, se mostró como el peor de todos, inclusive, por detrás de los Haas, que tuvieron a Esteban Ocon en la puerta de Q3 (largará 11º).