Alejandro Quintana, exlocutor cubano radicado en Miami, ha causado revuelo con un video publicado en sus redes sociales, donde reaccionó a la controversia generada por la relación entre Ana de Armas y Manuel Anido Cuesta, hijo de Lis Cuesta.
En el video, Quintana defendió la libertad de la actriz para tomar sus propias decisiones, a la vez que criticó a quienes la han cuestionado.
“Si la gente se preocupara un poquito más por enfocarse en sus proyectos, por construir su vida, por analizar cómo van sus finanzas… te aseguro que, a nivel personal, no fuéramos mejor. Pero la gente prefiere mirar hacia el lado, criticar al de al lado, juzgar al que tiene al lado, sin conocer su historia, sin conocer sus condiciones, sin conocer lo que ha vivido”, expresó Quintana. Además, dejó clara su postura sobre no criticar: “Esa es su moral, es su vida, su dignidad y, sobre todas las cosas, su decisión. Yo no critico a nadie. Esa es su conciencia, su moral y su dignidad. Como buen ciudadano del mundo, defiendo la democracia y el derecho a elegir”.
El video desató una avalancha de reacciones en los comentarios. Entre los críticos, hubo quien señaló: “Ella nunca se ha pronunciado a favor del pueblo cubano. Nunca ha mostrado empatía por el sufrimiento de Cuba”; otro escribió: “Papá, tantos hombres que hay, y una cubana exitosa se matrimonia con el hijo de los culpables que hicieron que tú salieras de Cuba”. Algunos consideraron que Quintana estaba justificando lo injustificable: “Este tareco es un vocero de la dictadura cubana, con su bla bla bla quiere cambiar los conceptos de los que hemos sufrido la tiranía”. Otros calificaron su postura de ingenua: “Esto no es solo política, es cuestión de dignidad y respeto al pueblo cubano”. Un comentario añadió: “Si estuvieras en Cuba o supieras lo que se pasa, no pensarías igual”.
Por otra parte, algunos apoyaron el punto de vista del exlocutor. Comentarios como “Cada quien hace su vida como y con quien le plazca” y “Qué madurez la de este joven. Felicidades a quien educó a este ser brutalmente bien” se sumaron al debate. Otros añadieron: “Quieren que todo el mundo piense igual, ¿y eso cómo se llama?” y “El comunismo no deja construir nada, pero esta mujer nunca prometió nada a nadie”. Alguien resumió la postura de Quintana con un mensaje de apoyo: “Es su conciencia, su moral y su vida. Nadie puede obligarla a pensar o actuar de una manera en particular”.
El debate sigue marcando el pulso de las redes sociales, reflejando las divisiones que provoca este tema. Para algunos, las palabras de Quintana significan un llamado a la introspección, mientras que otros ven en su discurso una postura que minimiza el impacto del dolor que vive el pueblo cubano y lo que representa el romance de la afamada actriz con alguien vinculado al régimen cubano. “Vamos a pensar un poquito más y mejor antes de hacer esos juicios, y vamos a enfocarnos un poco más en nuestra vida, en cómo nos está yendo y qué estamos haciendo para que nos vaya mejor”, concluyó Quintana en su mensaje.
Este mismo miércoles, por otra parte, vieron la luz nuevas fotos de Ana de Armas paseando por Madrid con el hijastro de Díaz-Canel. Las instantáneas, desveladas por Hola (que también confirmó el romance hace una semana) llegan poco después de que en Miami la comunidad cubana rechazara campaña publicitaria de la actriz por sus vínculos con dictadura cubana.
