Existe un número incontable de personas que, desde el anonimato, hacen que todo funcione, como es el caso de María Isidora Víllora Romero, Isi, la secretaria del Decanato de la Facultad de Medicina de Albacete, la mujer amable, conciliadora y resolutiva que ha hecho de puente entre el hospital y las aulas. Pieza clave del engranaje prácticamente desde que nació la primera facultad de Medicina de Castilla-La Mancha, sus compañeros han querido sacarla del anonimato con motivo de su jubilación. Cada una de las frases define a Isi, la secretaria de cinco decanos.
Los compañeros sacan del anonimato a María Isidora Víllora, alma de la Facultad de Medicina de Albacete
Más de una veintena de testimonios tratan de describir a quien ha sido la mano derecha de los cinco decanos con los que ha contado la Facultad de Medicina de Albacete desde que se convirtiera en la primera de Castilla-La Mancha en 1998.
María Isidora Víllora ha sido la cara amable para los nuevos profesores y, sobre todo, para los asociados, que cruzaban perdidos desde el Hospital General, situado enfrente, para atravesar la puerta que les abría la facultad hacia la docencia. Ella lo resolvía todo. Así, la definen como una artista y la bondad personificada, pero también como una persona resolutiva que ha unido a su buen hacer una sonrisa crónica.