-
JOSÉ FÉLIX DÍAZ
Actualizado
Alexander-Arnold y todo lo que está pasando a su alrededor en las últimas semanas es el fiel reflejo de la gestión y estrategia del Real Madrid en los últimos años. Se podría incluir también a Alphonso Davies, pero la necesidad y lo que demanda la actual plantilla han llevado a hacer un movimiento, que con el canadiense no se va a producir en el mercado de invierno recién abierto. Cuestión de cantidad o mejor dicho de sensación de que pueda ser más necesario ahora el lateral inglés. Hay confianza en la plantilla, pero la ausencia de Carvajal puede anticipar un movimiento sobre una posición que desde hace tiempo se cree necesaria de reforzar.
Con el acuerdo más que encaminado con el lateral inglés (paso previo e imprescindible que ejecutan todos los equipos antes de presentar una oferta para fichar a un futbolista), el Real Madrid se ha dirigido al Liverpool para intentar cerrar un acuerdo para el inminente traspaso del defensa. Primer paso obligado y todo dentro de una negociación entre dos clubes amigos. Ahora no es cuestión de dinero (el club blanco podría llegar a los 25 millones como tope) y sí de no decepcionar a los suyos.
Ya lo tienen claro en Anfield
La primera propuesta ha sido rechazada. Lógico, pero en el Liverpool ya saben, primero por boca del jugador y ahora ya con la llamada de los dirigentes del Real Madrid, que no hay faroles de por medio. De hecho, tal y como informó este periódico, antes del partido de la Champions, los que mandan en el club inglés llamaron a Valdebebas para saber si todo lo que se estaba hablando era cierto. Respuesta positiva.
Todo es real. El interés del equipo blanco y el del futbolista por vestir de ese mismo color. Hoy, ese entendimiento entre las dos partes (equipo y futbolista), ya tendría validez y estaría hecho dentro de la más estricta legalidad, al estar dentro de los últimos seis meses de su contrato con el actual club, el Liverpool. Habrá más movimientos ante una respuesta más que esperada.
Tras agitar el cóctel, ahora se necesita un tiempo de reposo, de que por Anfield recapaciten y piensen cuál es la mejor solución. El Real Madrid necesita un lateral derecho. La solitaria presencia Lucas Vazquez piede ser poco para los seis meses y medio de competición que quedan por delante, pero esto no ha llevado a los que mandan en la entidad madridista a realizar locura alguna. Lo llevan demostrando especialmente en los últimos meses primero con Mastantuono y después con Yoro. Y en este caso, asegurado el jugador, con más motivos para no hacerlo.
Valverde, solución de emergencia
En Valdebebas ya se hablado de la posibilidad del fichaje para este mercado de invierno, pero si no llega, el que está al frente del grupo (Ancelotti) ya se las inventará para sacar partido a lo que hay para cuando falte Lucas Vázquez. Llámese Fede Valverde para determinados partidos (imprescindible en el centro del campo) o Asencio haciendo las veces de lateral, movimiento arriesgado ante la posibilidad de quemar a un buen central, tal y como ha demostrado.
¿Por qué en este invierno sí y en el pasado, pese a las lesiones de Alaba y Militao, no? La principal y de más peso habla de un objetivo claro, con un trabajo ya hecho y una situación que invita a adelantar un movimiento por la necesidad del grupo. No es acudir por acudir a un mercado que no se toca en los últimos cinco años. Es por el convencimiento sobre una operación en marcha, que puede dar resultado inmediato. Hace un año no había alternativa que encajara con la estrategia del Real Madrid y Ancelotti supo adaptar la plantilla a las necesidades de cada partido hasta ganar Liga y Champions.
Aquí entra la otra opción, por la que se lleva trabajando tiempo, que no es otro que Alphonso Davies. Con el canadiense ha habido muchas subidas y bajadas, pero lo que está claro es que no hay la misma necesidad de hacerlo inmediato. El principio de acuerdo está sobre la mesa, pero tampoco se tiene que ejecutar ahora y todo supeditado a lo que finalmente decida el jugador y si es capaz de resistir o no la presión del Bayern.
Salah y Van Dijk
El Bayern, a diferencia del Liverpool, está más acostumbrado a aquello de que sus jugadores apuren a la finalización del contrato. No hay tanta presión como en Anfield, ya que al inglés se han unido Van Dijk y Salah (van a renovar) en ese de apurar al límite. El club alemán le pasó con Alaba y ahora está en esta misma situación tanto con Davies como con Kimmich. El asunto con el lateral zurdo está encaminado, pero no se espera movimiento alguno con el Bayern antes del cierre del mercado de invierno.
El Real Madrid está demostrando en los últimos años que los fichajes, los madura con el tiempo y aquello de sembrar para recoger, con Juni Calafat por delante, da resultado. El club blanco cumple lo prometido, pero si el asunto se desvía, a otra cosa. Que se lo pregunten a Yoro o Mastantuono.