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En una serie de videos, el sospechoso del letal atentado de Año Nuevo en Nueva Orleans habló de planear matar a su familia y de tener sueños que le ayudaron a inspirarse para unirse a ISIS, según múltiples funcionarios informados sobre la investigación.
Shamsud-Din Jabbar, el hombre, de 42 años, que la Policía sospecha que condujo una camioneta contra una multitud de asistentes a la fiesta en Bourbon Street, matando al menos a 14 personas e hiriendo a docenas más, hizo las escalofriantes grabaciones mientras conducía desde su casa en Texas a Louisiana, según creen las autoridades.
Jabbar, ciudadano estadounidense nacido en Texas y veterano del Ejército que sirvió en Afganistán, hizo referencia en los videos a su divorcio y a cómo había planeado en un principio reunir a su familia para una “celebración” con la intención de matarlos, dijeron dos funcionarios que habían sido informados de las grabaciones. Pero Jabbar dijo en los videos que había cambiado de planes y se había unido a ISIS y mencionó varios sueños que había tenido sobre por qué debía unirse al grupo terrorista, según los funcionarios.
Los videos, que CNN no ha revisado, parecen haber sido grabados mientras conducía por la noche, dijeron los funcionarios, aunque el momento exacto no está claro.
Jabbar murió mientras intercambiaba disparos con la Policía tras embestir con el vehículo a la multitud en las primeras horas del Día de Año Nuevo. Llevaba posibles artefactos explosivos improvisados y una bandera de ISIS en la camioneta que conducía, según las autoridades locales y federales.
Ahora, las autoridades policiales están revisando los videos grabados por Jabbar mientras se apresuran a reconstruir los detalles sobre cómo pasó de un militar veterano a sospechoso de un atropello mortal.
Jabbar sirvió en el Ejército durante más de una década, según informó un portavoz del Ejército a CNN el miércoles. Sirvió como especialista en recursos humanos y especialista en tecnología de la información en servicio activo entre marzo de 2007 y enero de 2015, y se desplegó en Afganistán una vez entre febrero de 2009 y enero de 2010, dijo el portavoz. Tras abandonar el servicio activo en enero de 2015, Jabbar sirvió en la Reserva del Ejército hasta julio de 2020, cuando dejó el servicio como sargento primero.
Nacido en Beaumont, Texas, declaró Jabbar en un video de YouTube, de 2020, titulado “Presentación personal”, en el que se presentó como un agente inmobiliario profesional con sede en Houston.
Jabbar dijo en un video de YouTube que haber servido en el Ejército le había enseñado “el significado de un gran servicio y lo que significa ser receptivo y tomarse todo en serio, poniendo los puntos sobre las íes para asegurarse de que las cosas salgan bien”. El video ya no está en línea. En el video, se sentaba junto a un póster enmarcado con la palabra “Disciplina” en negrita, y cerca de un libro titulado “Liderazgo”.
Jabbar recibió un título asociado del Central Texas College, en 2010, y una licenciatura de la Universidad Estatal de Georgia, en 2017, según un currículum en línea. Ambos títulos estaban relacionados con la Informática y la Tecnología de la Información. Más tarde, trabajó en desarrollo de negocios e ingeniería de datos en las consultoras Deloitte y Accenture, según el currículum.
La Universidad Estatal de Georgia confirmó a CNN que Jabbar asistió de 2015 a 2017 y se graduó con una licenciatura en Administración de Empresas en Sistemas de Información Computacional. Central Texas College y Accenture no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios el miércoles.
En un comunicado, Deloitte dijo: “Estamos conmocionados al enterarnos de los informes de hoy de que el individuo identificado como sospechoso tenía alguna asociación con nuestra firma. La persona mencionada sirvió en un puesto a nivel de personal desde que fue contratada en 2021. Como todos, estamos indignados por este acto de violencia vergonzoso y sin sentido y estamos haciendo todo lo posible para ayudar a las autoridades en su investigación”.
Jabbar obtuvo en 2019 una licencia de bienes raíces que expiró en 2023, según los registros de la Comisión de Bienes Raíces de Texas. Los registros muestran que tomó una serie de clases de bienes raíces sobre temas como derecho contractual y finanzas entre 2018 y 2021. También aparece en los registros públicos como registrado previamente o asociado con varias compañías en Texas y Georgia.
Jabbar se había divorciado dos veces, según muestran los documentos judiciales. Su primera esposa lo demandó en 2012 por la manutención de sus hijos poco después de solicitar el divorcio, y el tribunal le ordenó pagar cantidades que aumentaron con los años a medida que crecían sus ingresos. El caso fue desestimado en 2022.
En 2020, un juez de Texas concedió a la segunda esposa de Jabbar una orden de alejamiento contra él durante su proceso de divorcio. La orden obligaba a Jabbar a abstenerse de amenazas, daños físicos u otros comportamientos estipulados contra su exesposa y cualquiera de sus hijos. A ella le exigía evitar el mismo comportamiento. En una presentación judicial, la exesposa de Jabbar declaró que el matrimonio se había vuelto “insoportable debido a la discordia o a un conflicto de personalidades”.
Los registros judiciales del condado de Harris también muestran que Jabbar se declaró culpable de un delito menor de robo de entre US$ 50 y 500 en diciembre de 2002, y sirvió nueve meses de “supervisión comunitaria”.
Documentos judiciales de un Tribunal de Distrito de Estados Unidos en Carolina del Norte obtenidos por CNN muestran que, en 2015, Jabbar se declaró culpable de cargos relacionados con la conducción bajo la influencia de sustancias en Fort Bragg, una base militar de Carolina del Norte, ahora conocida como Fort Liberty.
Los documentos revelaron que Jabbar estaba bajo los efectos de una sustancia perjudicial en noviembre de 2014 y registró un nivel de alcohol en sangre superior al límite legal. También mostraban que conducía con “un recipiente abierto de bebida alcohólica después de haber consumido alcohol”.
Jabbar fue acusado de conducir intoxicado (DWI, por sus siglas en inglés) de nivel 5, el nivel menos grave del delito en Carolina del Norte.
Según los documentos, se le suspendió el permiso de conducir, se le puso en libertad condicional durante 12 meses, se le impuso una multa de US$ 200 y cumplió 24 horas de servicios comunitarios. A Jabbar también se le ordenó someterse a una evaluación y tratamiento por abuso de sustancias, y pagar por ello, además de participar en cualquier otro programa de rehabilitación de alcohol/drogas dirigido por la Oficina de Libertad Condicional de EE.UU.
En los últimos años, Jabbar, de 42 años, parece haber tenido problemas con sus finanzas. En un correo electrónico de enero de 2022, presentado como parte de su demanda de divorcio, escribió que no podía hacer frente al pago de la hipoteca de su casa, que, según él, estaba vencida en más de US$ 27.000 y “en peligro de ejecución hipotecaria” si se retrasaba aún más el acuerdo de divorcio.
Jabbar también afirmaba en el correo electrónico que una empresa que había creado, Blue Meadow Properties, había perdido unos US$ 28.000 el año anterior, y que otras empresas que había creado no valían nada. Añadió que había contraído una deuda de unos US$ 16.000 en tarjetas de crédito.
Jabbar alquiló el vehículo que utilizó en el ataque de Año Nuevo, una camioneta eléctrica Ford F-150 Lightning, en el sitio web de alquiler de automóviles Turo, que permite a los propietarios alquilar sus vehículos a otras personas. El propietario de la camioneta confirmó a CNN en un mensaje de texto que fue alquilado por medio de Turo.
El sitio web de alquiler también fue vinculado a un incidente en Las Vegas que involucró a un Cybertruck Tesla que explotó fuera de un Hotel Trump el miércoles. El conductor del Cybertruck murió en la explosión, dijo la Policía. Las autoridades no han confirmado el nombre del conductor fallecido y están investigando si el incidente fue un atentado terrorista.
“Estamos colaborando activamente con las autoridades policiales mientras investigan ambos incidentes”, dijo un portavoz de Turo a CNN. “No creemos que ninguno de los dos arrendatarios implicados en los ataques de Las Vegas y Nueva Orleans tuviera antecedentes penales que les hubieran identificado como una amenaza para la seguridad”.
La compañía sigue “comprometida a mantener los más altos estándares en la gestión de riesgos, gracias a nuestras tecnologías de confianza y seguridad de clase mundial y equipos que incluyen experimentados exprofesionales de las fuerzas del orden”, continúa el comunicado.
“Tenemos el corazón roto por la violencia perpetrada en Nueva Orleans y Las Vegas, y nuestras oraciones están con las víctimas y sus familias”, dice el comunicado.
Turo desactivó en su plataforma el alquiler del camión vinculado al incidente de Nueva Orleans el miércoles por la mañana. Antes de ser desactivado, el vehículo figuraba con un costo de US$ 105 al día, sin incluir impuestos y tasas, y no estuvo disponible para alquilar hasta las 12:30 p.m. hora central del miércoles.
